Retrato preciso del personaje y estadista, del hombre y del mito , que aún cuatro siglos y medio después de su muerte sigue dando que hablar.
“La vida pública y privada de Enrique VIII constituía en toda Europa uno de los principales temas de conversación”. “Sin embargo no es tanto el historial de estadista ni las argucias de príncipe maquiavélico , sino, sobre todo la vida privada de Enrique y sus seis matrimonios lo que en su época provocaba la perplejidad del pueblo y de las cortes europeas”.
Constituyéndose en una obra histórica , el lector no puede dejar de asombrarse ante la dimensión casi fabulosa del personaje y su época en donde podríamos decir que se cumple el adagio de “La realidad supera a veces a la ficción”.