En su sencilla prosa Lin Yutang expresa que este libro es su testimonio personal, un testimonio de su propia experiencia.
Llamado el autor “Hombre- puerta” por haber establecido una suave conexión entre la milenaria cultura China y los Estados Unidos modernos que le tocó vivir.
Va entregando sus pensamientos, que dice que no son suyos, sino de las miles de almas que conoció y leyó, y así dice que el “ rara vez se desilusiona, porque no tiene ilusiones, y rara vez se decepciona, porque nunca ha tenido esperanzas extravagantes”.
Así, con profunda sabiduría pinta al más alto ideal de la cultura china al “hombre con un sentido de desapego hacia la vida, basado en un sentido de sabio desencanto”, y “ de este desapego surge también un sentido de libertad” con lo que eventualmente se llega a “la intensa alegría de vivir”.
Y con filosofía o sin ella, ya sean Chinos o Americanos, lo mejor que podríamos decir es : “ La vida es Hermosa” y está en cada uno lograr que así sea.
Podríamos considerar a esta obra como un hermoso manual de sabiduría que nos puede ayudar a mirarnos con nuevos ojos, recordándonos que vivir la vida es todo un arte y está al alcance de quien quiera disfrutarlo.
¿Nos vemos entre los estantes de la BACCN?