M
E S A D I R E C T I V A
PRESIDENTE : Convencional Oscar Facundo Ynsfrán
VICE PRESIDENTE 1º : Convencional Emilio Cubas Grau
VICE PRESIDENTE 2º :
Convencional Rafael Eladio Velázquez
VICE PRESIDENTE 3º : Convencional Darío A. Palacios Vera
VICE PRESIDENTE 4º : Convencional Luis Alfonso Resck
SECRETARIOS : Convencional Diógenes Martínez
:
Convencional Emilio Oriol Acosta
:
Convencional Cristina Muñoz
:
Convencional Antonia Irigoitia
:
Convencional Víctor Báez Mosqueira
COORDINADORES
Convencional Gerardo Sosa Argaña
Convencional Víctor Núñez
Convencional Ramiro Barboza
Convencional Ramón Vera Venialgo
DIARIO DE SESIONES
Computación: José Manuel Plano de Egea
Corrección y Estilo: Américo Pérez Peña
Secretaría y Archivo: Merardo Martínez
LISTA
DE CONVENCIONALES
Acevedo,
Euclides Roberto
Acosta
Cantero, Emilio Oriol
Alcaraz,
Cirila Cabral vda. de
Alfonzo
González, Marcelino
Alvarenga
P., Francisco
Argaña
C., Jesús M.
Aseretto,
Rodolfo
Avalos
Flores, Carlos
Ayala,
Angel
Ayala
Jiménez, Eusebio R.
Ayala
Zelada, Humberto
Báez
Mosqueira, Víctor
Balmelli,
Carlos Mateo
Barboza,
Ramiro
Bareiro
Saguier, Rubén
Benítez
C., Carmelo J. G.
Benítez
Florentín, Juan M.
Bernal
Garay, Víctor Luis
Boccia,
Franklin
Bogado
Gondra, Juan Félix
Britos
Acosta, Julián
Caballero
C., Esteban
Cabral
Frutos, Pablo A.
Cáceres,
Crescencio H.
Cáceres,
Favio Catalino
Callizo,
Federico
Camacho
Paredes, Emilio
Campos
Cervera, Rodrigo
Candia,
José Ismael
Cano
Radil, Bernardino
Capurro,
Héctor
Cárdenas
Marín, Ignacio
Castiglioni
Soria, Luis A.
Castillo
Gamarra, Celso
Centurión,
María Ligia
Centurión,
Rodolfo H.
Centurión
S., Gregorio R.
Chaparro,
Albino
Chilavert
Benítez, Lino
Chilavert
Viera, Reinaldo
Colarte,
Carlos Martín
Dávalos
Arce, Felipe
Decoud
Rodríguez, Justo R.
Delvalle,
Oscar Alberto
Delvalle
García, Domingo
Díaz
Calderara, Francisco
Doldán
Velázquez, Manuel
Dos
Santos, Jorge
Dos
Santos Jara, César R.
Duarte
E., Inmaculada
Duarte
Molinas, Luis A.
Echagüe
de Ayala, María C.
Echagüe
Insfrán, Ismael
Elizeche
Baudo, Juan F.
Enciso
Gómez, Patricio
Enciso
Vega, Gregorio
Escobar
Genes, José B.
Espínola,
Armando
Esteche
Troche, Abrahán
Estigarribia
G., Hugo
Fanego
Arellano, Julio C.
Fanego
Mussi, Rubén O.
Fernández
Arévalos, Evelio
Fernández
B., Benjamín
Fernández
E., José F.
Fernández
de Marín, Nilda
Ferreira,
Antonio
Ferreira
vda. de Ayala, Dolores
Ferreira
Bernal, Miguel M.
Figueredo,
Federico
Franco
Lanceta, Ricardo
Fretes,
Carlos
Fretes
Faría, Aparicio
Flores
López, Arcadio
Florentín
Paoli, Atilio R.
Gamarra
V., Valentín
Garay,
Luis
García,
Migdalia R. de
Galeano,
Antonia O. de
Galeano,
Miguel Angel
Gauto
Sanabria, Carlyle W.
Gill
Duarte, Rodolfo
Godoy
Jara, Milciades
González,
Carlos Alberto
González
F., Blanca Lila
González,
Juan de la Cruz
González,
Gustavo René
Gónzalez,
Timoteo
González
Delvalle, Alcibiades
González
Macchi, Luis A.
González
O., Wilfrido S.
Gwynn
Safstrand, Cayo
Heisecke,
Guillermo
Hermosilla
Ortigoza, Dora
Huerta
Echeverry, Juan R.
Insaurralde
F., Víctor Hugo
Insaurralde
Fleitas, Elvio
Irigoitia,
Antonia
Jiménez,
Castor Elizardo
Kennedy,
Peter Holder
Laíno,
Domingo
Laterza,
Gustavo
Lezcano
Claude, Luis
Llamas,
Estanislao
Llano,
Pedro Luis
López,
Francisco Solano
López
Leiva, Fernando
López
Ramírez, Blanca M.
Lugo
Benítez, Pedro
Lugo
Ortiz, Julio César
Maciel
Pasotti, Benjamín
Martínez,
Diógenes
Martínez
G., Estanislao
Mazó
Elizeche, Gustavo A.
Melgarejo
Lanzoni, Rubén
Melgarejo
Pereira, Isidro
Meyer,
Carlos Ovidio
Miltos,
Cosme
Mongelós,
Juan Héctor Mongelós, Serapio
Morel
Pintos, Mario
Morínigo,
José Nicolás
Morínigo,
Susana
Muñoz,
Cristina
Núñez,
Víctor Manuel
Oggero
Fernández, Raúl
Orella,
Juan Gilberto
Ortíz
Samudio, Tomás
Osorio,
Cecilio Alejandro
Ovelar
Ledesma, Pedro P.
Paciello,
Oscar
Palacios
Vera, Darío A.
Paniagua
F., Víctor Hugo
Peralta
Pérez, Juan Manuel
Pérez
Peña, Julio Damián
Podestá,
Carlos
Portillo,
Pedro Darío
Quevedo
Acosta, Víctor M.
Quintana,
Gonzalo
Radice,
Manuel Augusto
Ramírez,
Avelino
Ramírez,
Fermín
Ramírez
C., Manuel de J.
Ramírez
Jou, Manfredo
Ramírez,
René
Recalde
de Rojas, Elba
Resck,
Luis Alfonso
Ríos
Rodríguez, Jorge
Riquelme,
Miguel Angel
Robles
Alcaraz, Aída M.
Rodas,
Miguel Angel
Rodríguez
Acosta, Eduardo
Rodríguez
Arias, Pablino A.
Rodríguez
P., Pedro Angel
Rodríguez,
Osvaldo Tomás
Rodríguez,
Teresa D. de
Rodríguez,
Sinforiano
Rolón
Galeano, Fernando
Rolón
Sanabria, Vidal
Romero,
Rubén Darío
Romero
Pereira, Carlos
Romero
Roa, Ramón
Ruíz
Díaz, Herminio
Ruíz
Díaz Brítez, Perfecto
Ruíz
Díaz Bareiro, Elisa
Ruíz
Nestosa, Jesús
Sachero,
María Elena
Saguier,
Miguel Abdón
Salum
Flecha, Antonio
Samaniego
G., Gustavo
Samaniego
Giménez, José D.
Sánchez
Galeano, Víctor H.
Saucedo
Rodas, Aníbal
Sardi
Segovia, Manuel
Segovia
Avalos, Luis A.
Segovia
Boltes, Agustín
Silvero
Silvano, Jorgelina
Sosa
Argaña, Gerardo
Sotomayor
de Setrini, Ada
Storm
B., Carlos Armando
Storm
Monges, Crescencio
Talavera
Martínez, Pedro
Torales
Franco, Marciano D.
Ugarte
Díaz, Alirio
Valiente
Escobar, Antonio
Vargas
Mendoza, Eligio
Velázquez,
Rafael Eladio
Vera
Cáceres, Julio César
Vera
Fleitas, Francisco
Vera
Venialgo, Ramón A.
Villagra
Marsal, Carlos
Villalba,
Edgar
Villalba
Cardozo, Bernardo
Villanueva
Cardozo, Leslie
Ynsfrán,
Oscar Facundo
Yore
de Yunis, Lamia
Zárate
González, Dionisio
Zarratea,
Tadeo
SESION ORDINARIA N° 26.- 19 DE MAYO DE 1992
FECHA:19
de mayo de 1992.
INICIO:09:00
horas.
FINAL: 19:30 horas.
AUSENTES
CON
AVISO: Sesión Completa: -Báez Mosqueira, Víctor
-Cubas
Grau, Emilio
-Esteche
Troche, Abrahán
-Gamarra
Velázquez, Valentín
-Miltos,
Cosme
-Rodríguez,
Osvaldo Tomás
-Velázquez,
Rafael Eladio
Turno
Mañana:-Ruiz Díaz Britez, Perfecto
-Vera
Fleitas, Francisco
SIN
AVISO: Sesión Completa: -Ramírez, Avelino
Turno
Mañana:-Echagüe Insfrán, Ismael
-González,
Wilfrido
-López,
Francisco Solano
-Oggero
Fernández, Raúl
-Segovia
Boltes,Agustín
-Vera
Cáceres, Julio César
ASUNTOS ENTRADOS
-Pedido
de permiso del ciudadano Convencional Víctor Báez Mosqueira para dejar de
asistir a la sesión del día 19 de mayo.
-Pedido
de permiso del ciudadano Convencional Emilio Cubas Grau para dejar de asistir a
las sesiones, por el tiempo que reste en las deliberaciones.
-Pedido
de permiso del ciudadano Convencional Francisco Vera Fleitas par ausentarse de
la sesión del 19 de mayo, por la mañana.
-Pedido
de permiso del ciudadano Convencional Efraín Enríquez Gamón para dejar de asistir
a las sesiones hasta el 20 de junio.
-Pedido
de permiso del ciudadano Convencional Cosme Miltos para ausentarse de la sesión
del 19 de mayo, por la mañana.
-Pedido
de permiso del ciudadano Convencional Perfecto Ruiz Díaz Britez, para
ausentarse de la sesión del 19 de mayo, por la mañana.
-Pedido
de permiso del ciudadano Osvaldo Rodríguez, para dejar de asistir a la sesión
del 19 de mayo.
-Pedido
de permiso de la ciudadana Convencional Cirila Cabral de Alcaraz, para
ausentarse de la sesión del 19 de mayo, por dos horas.
SE
INICIA LA SESION, SIENDO LA HORA 9:30.
CIUDADANO PRESIDENTE: Honorable Convención, ciudadanos
Convencionales: habiendo quórum de más
de ciento viente Convencionales, la Presidencia declara abierta la sesión del
día de la fecha.
Por
Secretaría se dará lectura al Resumen del Acta de la sesión anterior.
CIUDADANO SECRETARIA: RESUMEN
DE ACTA. SESION DE FECHA LUNES
18 DE MAYO DE 1992
Artículo
121.-DE LAS MATERIAS QUE NO SERAN OBJETO DE REFERENDUM.
No
podrán ser materias de referéndum:
a) Las
cuestiones referentes a las relaciones internacionales, tratados, convenios o
acuerdos internacionales, expropiaciones, defensa nacional y limitación de la
propiedad inmobiliaria;
b) las
cuestiones relativas a los sistemas tributarios, monetarios y bancarios, la
contratación de empréstitos y el Presupuesto General de la Nación y,
c) las
cuestiones atinentes a las elecciones nacionales *"departamentales" y
a las municipales.
* El agregado de la palabra departamentales,
queda a cargo de la Comisión de Estilo y Técnica Legislativa.
Artículo 122.- DE LA INICIATIVA POPULAR.
Se
reconoce a los electores el derecho a la iniciativa popular para proponer al
Congreso proyectos de ley. La forma de
las propuestas y el número de electores que deban suscribirlas, serán
establecidos en la ley.
Artículo
123.- DE LA NATURALEZA Y LAS FUNCIONES
DE LOS PARTIDOS POLITICOS.
Los
partidos políticos son personas jurídicas de derecho público. Deben expresar el pluralismo y concurrir a la
formación de las autoridades electivas, a la orientación de la política
nacional, regional o municipal, y a la formación cívica de los ciudadanos.
Artículo
124.- DE LA LIBERTAD DE ORGANIZACION
POLITICA.
Todos
los ciudadanos tienen el derecho de asociarse libremente en partidos y en
movimientos políticos para concurrir, por métodos democráticos, a la elección
de las autoridades previstas en esta Constitución y en las leyes, así como en
la orientación de la política nacional.
La
Ley reglamentará la Constitución y el funcionamiento de los partidos y
movimientos políticos, a fin de asegurar el carácter democrático de los mismos.
Sólo
se puede cancelar la personalidad jurídica de los partidos y movimientos políticos
en virtud de sentencia judicial.
Artículo
125.- DE LA PROPORCIONALIDAD Y LAS
GARANTIAS A LAS MINORIAS.
Se
observarán las reglas de la proporcionalidad que garanticen la participación de
las minoríasº en todo el cuerpo colegiado electo por el voto de los socios y
afiliados en forma directa, universal, igual y secreta.
Artículo
126.- DE LAS PROHIBICIONES A LOS
PARTIDOS Y MOVIMIENTOS.
Los
partidos y movimientos políticos, en su funcionamiento, no podrán:
a)
Recibir auxilio económico, directivas o instrucciones de organizaciones
o estados extranjeros;
b)
establecer estructuras asociativas que, directa o indirectamente,
indiquen la utilización o la apelación a la violencia como metodología del
quehacer político, y
c)
constituirse con fines que tiendan a sustituir por la fuerza el régimen
fundamental de libertad y de democracia, o a poner en peligro la existencia de
la República.
Artículo 126.- (1)
* La
ley que altere el proceso electoral se hará efectiva un año después de su
promulgación.
* Obs.:
Pasa a la Comisión Redactora su inclusión.
Artículo
127.- DEL CUMPLIMIENTO DE LA LEY.
Toda
persona está obligada al cumplimiento de la ley. La crítica a las leyes es libre, pero no está
permitido predicar su desobediencia.
INTERRUPCION...
CIUDADANO PRESIDENTE: Se ruega silencio en la sala, para escuchar
la lectura del acta.
CIUDADANO SECRETARIA:
Artículo
128.- DE LA PRIMACIA DEL INTERES
GENERAL, Y DEL DEBER DE COLABORAR.
En
ningún caso el interés de los particulares primará sobre el interés
general. Todos los habitantes deben
colaborar en bien del país, prestar los servicios y desempeñar las funciones
definidas como carga pública y determinadas en la ley.
Artículo
129.- DEL SERVICIO MILITAR.
Todo
paraguayo tiene la obligación de prepararse y de prestar su concurso para la
defensa armada de la Patria.
A
este objeto, se establece el servicio militar obligatorio. La ley regulará las
condiciones en que se hará efectivo este deber.
El
servicio militar deberá cumplirse con plena dignidad y respeto hacia la
persona. En tiempo de paz, no podrán
exceder de doce meses.
Las
mujeres no prestarán servicio militar sino como auxiliares, en caso de
necesidad, durante conflicto armado internacional.
Quienes
declaren su objeción de conciencia prestarán servicios en beneficios de la
población civil a través de centros asistenciales designados por ley y bajo
jurisdicción civil. La reglamentación y
el servicio de este derecho no deberán tornarlo punitivo ni impondrán
gravámenes superiores a los establecidos para el servicio militar.
Prohíbese
el servicio militar personal no determinado en la ley o para beneficio o lucro
particular de personas o entidades privadas.
La
ley reglamentará la contribución de los extranjeros a la defensa nacional.
Artículo
130.- DE LOS BENEMERITOS DE LA PATRIA.
Los
veteranos de la guerra del Chaco y los de otros conflictos armados
internacionales que se libren en defensa de la Patria, gozarán de honores y
privilegios; de pensiones que les permitan vivir decorosamente; de asistencia
preferencial, gratuita y completa a su salud y de otros beneficios, conforme
con lo que determine la ley.
En
los beneficios económicos les sucederán sus viudas, hijos menores o
discapacitados, incluidos los de los fallecidos con anterioridad a la
promulgación de esta Constitución.
Los
beneficios acordados a los beneméritos de la Patria no sufrirán restricciones y
serán de vigencia automática y sin más requisito que su certificación
fehaciente.
Los
ex prisioneros de guerra bolivianos, que desde entonces hubieren optado por
integrarse definitivamente al Paraguay, en cuanto a beneficios económicos y
prestaciones asistenciales quedan equiparados a los veteranos de la guerra del
Chaco.
Artículo
131.- DE LA VIGENCIA EL ORDEN JURIDICO.
Esta
Constitución es la ley suprema de la Nación.
La Constitución, los tratados y los acuerdos internacionales aprobados y
ratificados, las leyes dictadas por el Congreso, y las demás disposiciones
jurídicas de inferior jerarquía, sancionadas en su consecuencia, integran el
derecho positivo nacional en el orden de prelación enunciado.
Cualquiera
que intente cambiar dicho orden al margen de los procedimientos previstos en
esta Constitución incurrirá en los delitos que se tipificarán y penarán en la
ley.
Se
autoriza a los ciudadanos a resistir a los usurpadores, por todos los medios a
sus alcance; en la hipótesis de que tal persona o grupo de personas, invocando
cualquier principio o representación al margen de esta Constitución, detente el
poder público, sus actos se declaran nulos y sin ningún valor, no vinculantes
y, por lo mismo, el pueblo en ejercicio de sus derecho de resistencia a la
opresión queda dispensado de su cumplimiento.
Los
estados extranjeros que, por cualquier circunstancia, se relacionen con tales
usurpadores, no podrán invocar ningún pacto, tratado ni acuerdo suscripto o
autorizado por el gobierno usurpador, para exigirlo posteriormente como
obligación o compromiso a la República del Paraguay.
* Esta
Constitución es la ley suprema de la Nación.
La Constitución, los tratados y los acuerdos internacionales aprobados y
ratificados, las leyes dictadas por el Congreso, y las demás disposiciones
jurídicas de inferior jerarquía, sancionadas en su consecuencia, integran el
derecho positivo nacional en el orden de prelación enunciado.
Toda
disposición o acto de autoridad opuesto a lo que establece esta Constitución,
carece de validez.
(BIS) DE LA INVIOLABILIDAD DE LA CONSTITUCION Y DEL
DERECHO DE RESISTENCIA A LA OPRESION.
* Esta
Constitución no perderá su vigencia si dejare de observarse por acto de fuerza
o fuere derogada por cualquier otro medio distinto del que ella misma dispone.
Cualquiera
que intentare cambiar el orden constitucional al margen de los procedimientos
previstos en esta Constitución, incurrirá en los delitos que se tipificarán y
penarán en la ley.
Se
autoriza a los ciudadanos a resistir a los usurpadores, por todos los medios a
sus alcance. En la hipótesis de que una
persona o un grupo de personas, invocando cualquier principio o representación
al margen de esta Constitución, detente el poder público, sus actos se declaren
nulos y sin ningún valor, no vinculantes y, por lo mismo, el pueblo en
ejercicio de sus derecho de resistencia a la opresión queda dispensado de su
cumplimiento.
Los
Estados extranjeros que, por cualquier circunstancia, se relacionen con tales
usurpadores, no podrán invocar ningún tratado o acuerdo suscripto o autorizado
por el gobierno usurpador, para exigirlo posteriormente como obligación o
compromiso a la República del Paraguay.
OBSERVACION: La compaginación se llevará a cabo por la
Comisión Redactora y la Comisión de Estilo.
Artículo
132.- DE LA DISPOSICION O ACTO DE
AUTORIDAD.
Toda
disposición o acto de autoridad opuesto a lo que establece esta Constitución,
carece de validez.
Artículo
133.- DE LOS SIMBOLOS.
Son
símbolos de la República del Paraguay:
1) el
Pabellón de la República;
2) el
Sello Nacional, y
3) el
Himno Nacional.
La
ley reglamentará las características de los símbolos de la República no
previstos en la Resolución del Congreso General Extraordinario del 25 de noviembre de 1842, y determinará su uso.
Artículo
134.- DE LOS IDIOMAS.
El
Paraguay es un país pluricultural y bilingüe.
Son
idiomas oficiales el castellano y el guaraní.
La
ley establecerá las modalidades de utilización de uno y otro.
Las
lenguas indígenas y las de otras minorías, forman parte del patrimonio cultural
de la Nación.
Se
levanta la sesión, siendo la hora 18:00.
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración el Resumen de Acta que acaba
de leerse por Secretaría.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Francklin Boccia.
CIUDADANO CONVENCIONAL FRANKLIN
BOCCIA: Gracias, ciudadano Presidente.
El
Artículo 131, del Proyecto Base, en el primer parágrafo se había objetado la
palabra "sancionada" a ser cambiado por "dictado" de
acuerdo a lo que propuso el ciudadano Convencional Rodrigo Campos Cervera y la
frase de "Estados extranjeros que, por cualquier circunstancia", se
propuso que se cambie "no se podrán invocar" para que pase a Comisión
de Estilo y no escuché que se haya aclarado eso, ciudadano Presidente. Gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE: Se le va a aclarar por Secretaría, ciudadano
Convencional.
CIUDADANO SECRETARIO: La observación que queda al pie de ese
artículo aprobado, dice claramente, "la compaginación se llevará a cabo por
la Comisión Redactora y la Comisión de Estilo". Porque habían tres mociones.
Primera,
la del Convencional Luis Lezcano Claude, la Comisión Redactora y una
modificación hecha por el Convencional Carlos Podestá. Las tres cosas quedan a cargo de la Comisión
Redactora y la Comisión de Estilo.
CIUDADANO PRESIDENTE: No habiendo otra observación. La Presidencia da por aprobado el acta.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Cayo Gwynn.
CIUDADANO CONVENCIONAL CAYO
GWYNN: Ciudadano Presidente: solamente quiero dejar mi total disidencia en
uno de los artículos aprobados en esta Constitución.
Que
se haya consagrado en la Constitución paraguaya, "la de beneficiar de
igual forma a los bolivianos, como igual valor a los beneméritos de nuestra
guerra del Chaco". Quiero dejar
sentada, y que conste en acta, ciudadano Presidente, mi protesta formal por
aquello que nosotros estamos consagrando en esta Constitución de la misma forma
que le estamos tratando a nuestros beneméritos de la guerra del Chaco, a
quiénes ayer o antes de ayer no más hayan matado a mis parientes, a mis
abuelos, a mis tíos y hayan desangrado a mi familia.
Entonces,
ciudadano Presidente, en esta Convención, quiero dejar mi protesta formal por
esta situación. A quiénes, los amigos
Convencionales, hayan consagrado en esta Constitución. Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Ciudadano Convencional: queda el libro en
Secretaría, para que usted anote su disconformidad con lo expuesto. Muchas gracias.
No
hay otra observación. La Presidencia, da
por aprobada el acta. Queda aprobado el
acta.
APROBADO.
Por
Secretaría se dará lectura a pedidos de permisos.
CIUDADANO SECRETARIO: Los siguientes Convencionales, solicitaron
permiso: Víctor Báez Mosqueira, permiso
por el día de hoy.
Una
nota del Vicepresidente primero, Emilio Cubas Grau. Cumplo en dirigirme al ciudadano Presidente,
con el objeto de solicitar permiso por el tiempo que reste en las
deliberaciones de esta honorable Convención, atendiendo a motivos personales.
Al
mismo tiempo aprovecho la oportunidad para manifestar al ciudadano Presidente,
mi disidencia y que conste en acta, del 6) y 7) párrafos del Artículo 129, Del
Servicio Militar; como así también del párrafo 4) del Artículo 130, De los Beneméritos
de la Patria.
Sin
otro particular, aprovecho la oportunidad para saludar al ciudadano Presidente,
con la consideración y respeto que se merece.
Emilio Cubas Grau.
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración la solicitud de permiso y se convoca
al suplente para el día de mañana, Miguel Angel Rodas, me dice la Secretaría,
sería convocado para el día de mañana.
Queda
aprobado la solicitud de permiso.
APROBADO.
CIUDADANO SECRETARIO: Convencional Francisco Vera Fleitas, en horas
de la mañana.
Efraín
Enríquez Gamón, hasta el veinte de junio de 1992. Está en su sustitución la ciudadana
Convencional Cirila Vda. de Alcaraz, quien continua en funciones.
Cosme
Miltos, por el día de la fecha, en horas de la mañana.
Perfecto
Ruíz Díaz, en horas de la mañana del día de la fecha.
Osvaldo
Rodríguez, la sesión del día de la fecha.
Y
por el lapso de dos horas, Cirila Cabral Vda. de Alcaraz.
CIUDADANO PRESIDENTE: Esos son todos los permisos solicitados. El caso del ciudadano Convencional Efraín
Enríquez Gamón, él ya había tenido un permiso por tiempo determinado y este
nuevo permiso es una prórroga del mismo, hasta el veinte de junio. Por lo que la Convención deberá aprobar este
pedido de permiso.
Queda
aprobado.
APROBADO.
Orden
del Día, prosecución del estudio del Texto Constitucional. Artículo 135.
Por
Secretaría se dará lectura al mismo.
CIUDADANO
SECRETARIO: CAPITULO II.
Título: DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES. Propuesta Unica. Proyecto Base. Artículo 135.-
Título: De los
Tratados Internacionales.
Texto: "Los tratados internacionales validamente
celebrados, aprobados por ley del Congreso, cuyos instrumentos de ratificación
fueran canjeados, o depositados, forman parte del ordenamiento legal interno
con la jerarquía que determina el Artículo 131".
Punto
final del texto.
CIUDADANO PRESIDENTE:
A votación el texto que no tiene observación alguna.
Quienes
estén por la aprobación, se servirán levantar la mano: Mayoría. Queda aprobado el texto del Artículo 135.
APROBADO.
Se
pasa al Artículo 136.
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
136. Propuesta Unica. Proyecto Base.
Título:
De la Denuncia de Tratados.
Texto: "Los
tratados internacionales relativos a los derechos humanos no podrán ser denunciados
si no por los procedimientos que rigen para la enmienda de esta
Constitución".
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración. No existe observación alguna. A votación, entonces.
Quienes
estén de acuerdo, se servirán levantar la mano:
Mayoría. Aprobado.
APROBADO.
Ciudadano
Convencional, acaba de leerse el artículo.
Ahora se va a leer el Artículo 137.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional José Félix Fernández
Estigarribia.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
FELIX FERNANDEZ ESTIGARRIBIA: Gracias,
Presidente.
Sobre
el Artículo 136, que con respecto al título habría que consultar, después,
nuevamente con la Comisión de Estilo.
Porque es... la negativa a que puedan ser denunciado los tratados de los
derechos humanos no más. Tal vez el título
pertinente tenga que ser "Tratado de derechos humanos" y no lo
referente a la denuncia. Aquí lo que se
limita es la denuncia de esos tratados.
Gracias, Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE:
Fue aprobado, ciudadano Convencional.
Con esa observación para la Comisión de Estilo y redacción final. Se tendrá muy en cuenta.
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo 137.- Existen dos propuestas.
Propuesta N°
1. Proyecto Base.
Título:
De las Relaciones Internacionales.
Texto: "La
República del Paraguay en sus relaciones internacionales acepta el derecho
internacional y se ajusta a los siguientes principios:
1)La independencia nacional;
2)la auto determinación de los pueblos;
3)la igualdad jurídica entre los Estados;
4)la solidaridad y la cooperación internacional;
5)la protección internacional de los derechos humanos;
6)la libre navegación de los ríos internacionales;
7)la no intervención, y
8)la condena a toda forma de colonialismo e imperialismo".
Propuesta N°
2, de los Convencionales Luis Alfonso Resck,
Juan Manuel Benítez, Miguel Abdón Saguier y otros. Título:
De las Relaciones Internacionales.
Texto:
"La proposición es la de agregar al inciso 8) "la condena a toda
forma de dictadura, colonialismo e imperialismo".
Agrega
en el inciso 8) la palabra "dictadura", el resto queda todo igual al
Proyecto Base.
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración, el Artículo 137, que acaba
de leerse.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Luis Alfonso Resck.
CIUDADANO CONVENCIONAL LUIS
ALFONSO RESCK: Gracias, ciudadano Presidente.
Honorables
Convencionales: Brevisimamente, con
vuestra paciencia, voy a fundamentar la razón de ser de este agregado, si así
se puede llamar, formalmente.
Resulta
que, en todo sistema colonialista o imperialista y en toda forma de dictadura,
de suyo tácitamente, tanto natural como lógicamente se conculcan los derechos
humanos. Como así también por
contraposición, sólo en un sistema democrático, se promueven los derechos
humanos.
Por
consiguiente, ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales, creo que es
oportuno incorporar este concepto "dictadura", teniendo en cuenta,
que arranca a partir de esa conculcación, ya que los derechos humanos no son
privativos de gobierno alguno, ni propiedad de partido alguno, sino que son
patrimonio de la humanidad.
Y
en este contexto es que, respetuosa y fraternalmente, proponemos que se
incorpore el concepto. Voy a señalar,
solamente un hecho concreto, de reciente data.
A la luz de su propia Constitución y de los propios convenios
internacionales, Venezuela, acaba de romper sus relaciones internacionales con
el Perú, condenando, consiguientemente, la dictadura. Creo que en torno a este ideal, común de los
latinoamericanos, que tanto han sufrido la conculcación, no solo político sino
social y económico y cuyo resabio aún subsiste, es hora de solidarizarnos bajo
una común bandera.
Por
ello es que, ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales, solicito la
incorporación de este concepto. Muchas
gracias y perdone por la molestia.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Ramiro Barboza.
CIUDADANO CONVENCIONAL RAMIRO
BARBOZA: Ciudadano Presidente: nada más que para transmitir a la Comisión de
Estilo una crítica que se ha formulado al Proyecto de Constitución, en el
sentido de que, en algunos casos, para señalar los incisos se usan letras y, en
otros, números; en este caso se están utilizando números, sin embargo en otros
artículos, como el 126 y 175, se usan letras.
Entonces, nada más que eso, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE:
Gracias, ciudadano Convencional.
Se
trasmite esa inquietud a la Comisión de Estilo para la redacción final del
texto constitucional.
Tiene la palabra el ciudadano Convencional Oscar
Paciello.
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO:
Ciudadano Presidente: bien, yo desde
luego no puedo estar en contra de este agregado, y no veo la razón por la cual
la Comisión Redactora podría oponerse a esto, si bien es cierto, tendría alguna
resalva desde el punto de vista etimológico del vocablo, porque
"dictadura" era una magistratura, en todo caso yo estaría más de
acuerdo con la expresión "tiranía".
Pero,
en fin, no hace al fondo y como esto pasamos a la Comisión de Estilo, me
parece, ciudadano Presidente, que no hay ninguna objeción en acoger la
propuesta de estos distinguidos ciudadanos Convencionales. Muchas gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Ricardo Franco Lanceta.
CIUDADANO CONVENCIONAL RICARDO
FRANCO LANCETA: Gracias, ciudadano Presidente.
Es
también por una cuestión de estilo. Acá hablamos
el título del Artículo 137, De las Relaciones Internacionales.
En
la República del Paraguay, en sus relaciones internacionales acepta el Derecho
Internacional, y se ajusta a los siguientes principios.
Sugiero
que la Comisión de Estilo considere la conveniencia de dar una mejor redacción
a este párrafo, porque entiendo que lo correcto sería decir: "la política", en reemplazo de ese
texto en la cuestión de redacción "la política internacional del Paraguay
se basa en los siguientes principios", y se enumeran esos principios. Porque eso de que acepta el Derecho
Internacional, entiendo que es una expresión no adecuada para un texto
constitucional. El Derecho Internacional
evidentemente configuran los tratados y tiene imperio en virtud de los acuerdos
que se llegan en esta materia.
Sugiero
eso a la Comisión de Estilo. Gracias,
ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional José Félix Fernández Estigarribia.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
FELIX FERNANDEZ ESTIGARRIBIA: Ciudadano Presidente: con respecto a la última intervención del
ciudadano Convencional, yo me inclinaría por aceptar el texto de la Comisión
Redactora tal cual está, sobre todo, atendiendo a la extensa discusión que hubo
en el Derecho Internacional, que me remito al tema del modismo y dualismo del
mismo, si el Derecho Internacional es derecho separado del derecho interno,
diferente, o es un sólo derecho con dos ámbitos uno, el ámbito internacional, y
el otro, el ámbito interno.
La
aceptación del Derecho Internacional por el Paraguay, por otra parte, es su
manera de insertarse dentro de la sociedad internacional, y aceptar todos estos
principios que son parte de ese Derecho Internacional que están a continuación.
Hacer
la separación y no establecer expresamente la presencia del Derecho
Internacional, incluso, nos traería problemas en la forma que se recibe el
mismo.
Por
eso, desde el punto de vista técnico, yo me inclinaría a aceptar el artículo
tal cual está.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el Convencional Carlos Romero Pereira.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
ROMERO PEREIRA:
Ciudadano Presidente: una
cuestión de procedimiento nada más. Ayer
justamente, en ocasión discutir el tema de la inclusión o no de artículos
nuevos, etc., se había llegado a la conclusión, y entiendo que el propio
Presidente de la Convención había sugerido como un procedimiento que se vino
siguiendo hasta ahora, y creo que es sano que así se siga haciendo.
En
primer lugar por el despacho de la Comisión, y luego así como viene, como acaba
de sugerir un preopinante, y luego si cabe o no cabe la inclusión del artículo
que fuere.
Yo
pregunto a la Presidencia, me gustaría que se aclare eso, si ese va a ser el
procedimiento que también en este caso se va a seguir, porque no veo la razón
de salirnos de esta norma, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Efectivamente,
hemos advertido ayer que la norma que se va a aplicar invariablemente va a ser
la de llevar a votación en primer término el despacho de Comisión, pero en el
curso del debate, si la Comisión acepta, y forma parte del texto, como despacho
de Comisión, entonces allana enormemente el problema.
En
este caso, el ciudadano Convencional Presidente de la Comisión ha aceptado la
incorporación de este nuevo concepto, por lo que forma parte del despacho de
Comisión y, en consecuencia, existe un solo Proyecto...
¿Ha
aceptado como despacho de Comisión?
INTERRUPCION...
CIUDADANO CONVENCIONAL...: ¿Me permite una aclaración, ciudadano
Presidente?
CIUDADANO PRESIDENTE: Se le permite,
ciudadano Convencional.
CIUDADANO CONVENCIONAL...: No, lo que el Presidente de la Comisión
Redactora hizo, y no puede desde luego hacer otra cosa sino eso, es aceptar a
título personal. La Comisión Redactora
no se ha reunido y no le ha dado ningún mandato, independientemente de la
naturaleza del asunto que fuere, ciudadano Presidente.
Por
eso, este no es un despacho de la Comisión Redactora. Lo que es despacho de la Comisión Redactora,
sin ninguna duda, es el artículo así como vino.
Y
luego, por eso repito, ciudadano Presidente, tenemos que seguir esa norma, y no
empezar a cambiar otra vez. Y luego se
vota la inclusión o no del artículo que fuere.
CIUDADANO PRESIDENTE: Ciudadano
Convencional: si efectivamente cree que
es a título personal, entonces así se hará.
Pero es importante, nosotros tenemos también la aplicación del
Reglamento de la Cámara de Diputados en forma supletoria, que generalmente el
vocero de la Comisión, es el que lleva la voz cantante de dicha Comisión, salvo
que en este caso, los otros miembros de la Comisión se opongan a ello.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Benjamím Maciel Pasotti.
CIUDADANO CONVENCIONAL BENJAMIN
MACIEL PASOTTI:
Ciudadano Presidente: por el
Artículo 57, que se ha modificado, se establece claramente que para la incorporación,
modificación o supresión de cualquier palabra dentro de un artículo, tiene que
existir consenso. Le recuerdo eso,
ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Ciudadano Convencional, usted ya se está
refiriendo al Artículo 98, inciso 5), pero en ese caso desde luego vamos a
hacer que se lea por Secretaría para su clarificación.
CIUDADANO SECRETARIO: El Artículo 98, que trata de las reglas
relativas de la discusión en particular, en su inciso 5) establece: "podrán presentarse otro u otros
artículos que sustituyan totalmente al que será discutido, o modifiquen,
adicionen, o supriman parte de él, hasta treinta minutos antes de la hora
fijada para el inicio de la sesión, salvo los artículos consensuados entre los
proyectistas durante la sesión".
Acá
habría que aclarar, ciudadano Presidente, si al hablar de consensuados, deben
ser todos los de la Comisión Redactora o el plenario de esta Convención.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra el ciudadano Convencional
Federico Callizo.
CIUDADANO CONVENCIONAL FEDERICO
CALLIZO: Ciudadano Presidente: creo que la lectura es sumamente
esclarecedora. En este caso se ha
presentado con media hora de anticipación la modificación, o sea, la inclusión
de una palabra.
Cuando
se pretende en el curso de la discusión incorporar algo, ahí es donde debe
haber un consenso, se debe consensuar la propuesta que en el transcurso de la
discusión surge como un aporte, que yo creo que es muy importante, porque de la
discusión a veces suele salir algún tema que debe incorporarse.
Por
eso es que ahí es donde, de acuerdo a lo que manifestó el que me precedió en el
uso de la palabra, debe tenerse en cuenta el consenso.
Pero,
en este caso, ciudadano Presidente, creo que es cuestión de que se vote, que se
analice, se discuta y se vote la inclusión de la palabra. Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra el ciudadano Convencional
Diógenes Martínez.
CIUDADANO CONVENCIONAL DIOGENES
MARTINEZ: Ciudadano Presidente: quiero agregar nada más
mi opinión sobre la interpretación de este Artículo 98. El inciso 5) se refiere fundamentalmente a
las distintas propuestas presentadas en la plenaria, cuando se tiene que
modificar o unificar criterios en torno a un solo texto, en cuyo caso requiere
la unanimidad de pareceres de la plenaria.
Otra
cosa es cuando a la Comisión Redactora se le pide que acoja en su texto una
propuesta presentada, ya sea presentada por escrito o verbalmente en la
sala. Entonces la Comisión Redactora por
unanimidad se debe expedir aquí. Pero
este inciso 5) se refiere expresamente a las distintas propuestas que se
presentan, para cuyo caso se requiere la unanimidad de la sala. Bastará con que alguien pida que se mantenga
esa propuesta, para que tenga que llevarse a votación, salvo que el propio
titular la retire. Es todo.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra el ciudadano Convencional
José Nicolás Morínigo.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
NICOLAS MORINIGO: Ciudadano Presidente: creo que la cuestión está suficientemente clara.
Se ha presentado una alternativa con la propuesta N°
2: por lo tanto hay dos mociones, y fue
presentada a hora y tiempo, lo que acá corresponde es ver si esta plenaria
acepta o no la inclusión, y si la Comisión Redactora acepta o no en su
totalidad.
Personalmente,
creo de que la inclusión está fuera del marco de lo que se está tratando en
este artículo, porque lo que estamos viendo acá son las relaciones
internacionales, y dentro de este, dentro del inciso 8), lo que se condena es la
forma de colonialismo imperialismo; es
decir, la acción de un Estado sobre otro Estado. Pueden existir forma dictatoriales que
precisamente no actúen en relación a una acción de agresión con respecto a otro
Estado; por lo tanto, creo que debemos circunscribirnos exclusivamente al
Proyecto Base. Gracias, ciudadano
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Ricardo Franco Lanceta. Brevemente, si es sobre el punto.
CIUDADANO CONVENCIONAL RICARDO
FRANCO LANCETA: Sí,
simplemente tenemos que evitar caer en una suerte de conflictos de poderes
entre la Comisión Redactora y el plenario de la Convención.
Yo
creo reivindicar, ciudadano Presidente, el derecho que tenemos a aportar en los
asuntos muy puntuales, en los que podamos contribuir a mejorar una redacción, y
que evidentemente al hacerlo, ya sea proponiendo, que vaya a la Comisión de
Estilo, e inclusive, mejorando la Redacción.
Tenemos que estar todos los Convencionales predispuestos a aceptar las
mejoras que surjan de un debate, si no, no tiene sentido el debate en esta
plenaria, ciudadano Presidente.
Ubiquémonos
en la dignidad de esta Magna Asamblea y en la dignidad que en consecuencia
tiene cada Constituyente, de emitir su opinión sobre los asuntos que se someten
a su consideración. Si no, ¿qué
tendríamos que hacer? Todos los días a
la hora 7:30 de la mañana venir con un Proyecto, y tendríamos que estar
considerando ciento noventa y ocho proyectos, cuanto que del debate pueden
surgir pequeñas modificaciones que mejoren los textos, y en ese espíritu
tenemos que trabajar.
Yo
exhorto a los colegas Convencionales a que trabajemos en ese espíritu, a objeto
es hacer bien las cosas. Gracias,
ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Franklin Boccia, brevemente sobre este
punto.
CIUDADANO CONVENCIONAL FRANKLIN
BOCCIA: Declino, ciudadano Presidente. Está dicho lo quería decir.
CIUDADANO PRESIDENTE:
Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Luis Alfonso Resck.
CIUDADANO CONVENCIONAL LUIS
ALFONSO RESCK:
Ciudadano Presidente.
Honorables
Convencionales: lamento mucho la
derivación que ha tomado esta propuesta.
No estaba en mi ánimo obstaculizar la marcha formal, porque estaba
convencido que en este ideal común estamos todos contestes, y yo querría
siempre, ciudadano Presidente, con todo respeto y la disculpa correspondiente a
tan honorable Convención, decir un poco emocionado, que a mí me sorprende que
haya oposición a esta propuesta.
¿Por
qué, ciudadano Presidente? Porque
nosotros no podemos desvincular el concepto de los derechos humanos, de dictadura
o de democracia, aunque sean diferentes, son correlativos, hay una
interinfluencia recíproca.
Y
pongo nuevamente el ejemplo. Sólo en un
sistema democrático se promueven los derechos humanos. Lo dicen las Naciones Unidas, O.E.A; y en un
régimen de dictadura se conculcan los derechos humanos.
Y
resulta que hoy en día, vemos resurgir la llamada espada, la conspiración de
las espadas, ciudadano Presidente.
Acaba
el Congreso paraguayo por unanimidad, y felicito, incluso el propio ejecutivo,
si no una condena directa, el Congreso sí, a condenado directamente al
autogolpe del Perú, porque en esa dictadura, aunque realmente no haya una
influencia imperialista o colonialista, sin embargo, tácitamente en forma
indirecta, tiene sus negativas incidencias.
Quiero
que sepan los compañeros que hay una conspiración en América Latina contra las
recientes democracias, y que necesita por lo tanto profundizarse, no sólo en lo
político, social, económico y cultural.
El
golpe de Estado fracasado en Venezuela, si hubiera éxito, se iba a proyectar
sobre Colombia, de Colombia, dicen los propios gobernantes, sobre el Brasil y
luego Paraguay.
Por
lo tanto, no son golpes localizados dentro de las estrechas fronteras. Son inspiraciones internacionales que atentan
contra la liberación de nuestro pueblo, ciudadano Presidente, y tenemos que ser
solidarios en los derechos, tanto en el dolor, como en la esperanza.
Ratifico
plenamente, ciudadano Presidente, esta propuesta de incorporar el concepto de
dictadura a nivel internacional. Muchas
gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE:
Tiene la palabra por segunda vez, el ciudadano Convencional Carlos Romero
Pereira.
La
Presidencia declara cerrada la lista de oradores sobre este punto.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
ROMERO PEREIRA: Ciudadano Presidente: no por segunda vez, sino por última vez. Normalmente hay días enteros que no estoy
molestando a esta Convención, por lo tanto creo que de vez en cuando tengo
derecho a dar mi opinión.
El
tema es el siguiente, acá se ha derivado la cuestión hacia el fondo. De lo que se trata es de una cuestión
procedimental, de manera que cualquier debate o lo que fuere, emotivo o
emocional, no tiene nada que ver con la cuestión fundamental que estamos
discutiendo.
Este
es un artículo más, igual que cualquier otro, y -repito- lo que creo que debe
hacerse, y se deduce de lo que se explicó por Secretaría, es votar el despacho
de Comisión, y luego votar si se incluye o no se incluye el artículo
presentado, o los artículos presentados que fueren, independientemente de la
naturaleza que tenga el artículo. Nada
más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Carlos Avalos.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
AVALOS: Gracias, ciudadano Presidente. Aclarado por el preopinante lo que quería
decir, declino, ciudadano Presidente, gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra el último orador sobre este
punto, el ciudadano Convencional Emilio Camacho.
CIUDADANO CONVENCIONAL EMILIO
CAMACHO: Ciudadano Presidente: en los mismos términos que el preopinante, y
declino, ciudadano Presidente.
Corresponde votar ya. Nada más.
CIUDADANO PRESIDENTE:
Así es, ciudadano Convencional.
La
Presidencia va a llevar a votación.
Entramos en estadio de votación.
Se va a votar en primer término el despacho de Comisión. Los que estén por el mismo, se servirán
levantar la mano: Mayoría.
APROBADO.
DISCUSION EN LA SALA...
La verdad es que, aprobándose el despacho de
Comisión, queda aprobado, queda totalmente aprobado. Existe la observación que no contó con el
despacho de Comisión, porque dijeron que era solamente personal la opinión del
Presidente de la Comisión de Redacción, el Convencional Oscar Paciello.
Se
va a leer por Secretaría el inciso 6).
CIUDADANO SECRETARIO: Artículo 98.-
De las Reglas Relativas a la Discusión en Particular. El inciso 6) dice: El nuevo texto propuesto a la Comisión
durante la discusión, deberá presentarse por escrito. Si ella no lo acepta, se votará en primer
término su despacho, y si este es rechazado, el nuevo artículo o artículos,
serán considerados en el orden en que hubiesen sido propuestos.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra el ciudadano Convencional
José Félix Fernández Estigarribia.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
FELIX FERNANDEZ ESTIGARRIBIA: Ahora en este momento, ciudadano Presidente,
y solicito un momento la atención de la Convención. En este momento ya no es una cuestión
procesal solamente, se vuelve una cuestión de fondo.
Ciudadano
Presidente: en el momento en que se iba
a votar, y usted lo sabe, yo le dije menos el inciso 8), porque en ese caso, y
aplicando el procedimiento que acaba de leer el ciudadano Secretario, se tenía que
haber votado el despacho de Comisión, hasta el inciso 7), y dejar aparte el
inciso 8), porque nosotros nos encontrábamos, los ciudadanos Convencionales, en
una situación difícil. Aceptar todo,
votar en contra del despacho de Comisión, era rechazar la primera parte del
Artículo y los siete primeros incisos.
En
este caso, ciudadano Presidente, se tenía que haber votado el despacho de
Comisión hasta el inciso 7); el último inciso, se vuelve a votar primero el
despacho de Comisión, y después el agregado, si no tuvo mayoría.
Incluso,
ciudadano Presidente, señalarle al ciudadano Presidente, y él me asintió, hasta
el inciso 7), donde había la diferencia.
Yo
creo que esa es la práctica, porque los ciudadanos Convencionales nos
encontrábamos con que en no votar todo el texto del Artículo, rechazábamos
todo, por lo tanto esa es la interpretación correcta del Parlamento.
Por
otro lado, ciudadano Presidente, y con todo respeto a la discusión anterior, en
que no me quise meter, lo normal en los Parlamentos, el Presidente de la
Comisión, representa la Comisión.
Este
avance dentro de la Comisión Redactora ha sido que ello por consenso no
considera que la palabra "Subpresidente" o de su
"Vicepresidente," en su caso, nos representan. Cuando el Presidente acepta el dictamen, se
constituye es un despacho de Comisión, con la libertad de los ciudadanos
Convencionales, en este caso de la minoría, de decir sí, pero en minoría yo
sostengo el anterior despacho de Comisión, si vamos a aplicar estrictamente el
procedimiento parlamentario.
Por
las consideraciones expuestas, ciudadano Presidente, considero que usted, con
el sentido democrático que ha impreso a estas deliberaciones, dé por aprobado
hasta el inciso 7). Le pido la
colaboración a los miembros de la Comisión de Redacción en este punto, y
votemos sólo ahora el último inciso del Artículo. Gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE:
Vamos a llevar a votación.
Quienes
estén de acuerdo por el despacho de Comisión del inciso 8), se servirán
levantar la mano, sin el agregado: Minoría.
INTERRUPCION...
CIUDADANO CONVENCIONAL...:
Pido la palabra, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE:
La Presidencia ha puesto a votación, y han levantado la mano, quieren volver a
repetir para que se aclare.
Se
va a votar el inciso 8) tal cual vino del despacho de Comisión, sin ningún
aditamento. No entra el concepto de
"dictadura".
Se
va a leer por Secretaría.
CIUDADANO SECRETARIO: "La Condena a toda forma de colonialismo
e imperialismo. Y la otra propuesta
dice: la condena a toda forma de
dictadura, colonialismo e imperialismo".
CIUDADANO PRESIDENTE: Se lleva a votación primero el despacho de
Comisión.
Quienes
estén por su aprobación, se servirán levantar la mano. No hay apreciable mayoría, se va a hacer por
fila.
Quienes
estén por el despacho de Comisión se servirán ponerse de pie:
Fila 1: no
están.
Fila 2: 2
votos.
Fila 3: 5
votos.
Fila 4: No
hay.
Fila 5: No
hay.
Fila 6: No
hay.
Fila 7: 2
votos.
Fila 8: 8
votos.
Fila 9: 15
votos.
Fila 10 y restantes: 8
votos.
La mesa: 2
votos.
En total cuarenta y tres votos: Minoría.
Se
va a votar el agregado que se va a leer por Secretaría. Es el mismo texto, con el concepto de
"dictadura".
CIUDADANO SECRETARIO: "La condena de toda forma de dictadura,
colonialismo e imperialismo".
CIUDADANO PRESIDENTE: A votación.
Quienes estén por el mismo se servirán levantar la mano: Mayoría.
APROBADO.
Queda
aprobado en consecuencia el agregado.
Orden
en la sala. Se ruega silencio, por favor.
Se
pasa al siguiente artículo.
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
138.- Existen dos propuestas:
La propuesta N°
1, del Proyecto Base.
Título:
De la Renuncia a la Guerra.
Texto: "La
República del Paraguay renuncia a la guerra.
Esta declaración es compatible con los derechos y obligaciones en su
carácter de miembro de la Organización de las Naciones Unidas y de la
Organización de Estados Americanos, o como parte en tratados de
integración".
Propuesta N°
2,
Rubén Melgarejo Lanzoni, Manfredo Ramírez Jou, Bernardino Cano Radil y otros.
Título:
De la Renuncia a la Guerra.
Texto: En el material se ha introducido una pequeña
modificación. El nuevo texto dice así:
"La República del Paraguay renuncia a la guerra, pero justifica la legítima defensa nacional"; es la
modificación. "Esta declaración es
compatible con los derechos y obligaciones en su carácter de miembro de las
Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos, o como parte en
tratados de integración". La única
modificación aparente es la palabra o la frase, "pero justifica la
legítima defensa nacional".
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración de la plenaria.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Oscar Paciello, Presidente de la Comisión
de Redacción.
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO: Ciudadano Presidente: quiero informar que en el espíritu de la
Comisión Redactora estuvo en todo momento el de que Paraguay renunciaba a la
guerra y concretamente a la guerra de agresión y de conquista. Peor todo el texto de la Constitución nos
habla, ya hemos aprobado ayer el servicio militar, de que el Paraguay no
renuncia a su defensa.
De
manera que me parece sumamente apropiado acoger la especificación que ahí se
hace, porque su única virtualidad es precisar mejor el contenido del texto, no
se varía absolutamente en nada, y es la razón, ciudadano Presidente, por la
cual abreviando tiempo, pienso, salvo que algún miembro de la Comisión
Redactora manifieste un criterio contrario, que deberíamos acoger la modificación
sugerida, y votar inmediatamente el artículo con esa modificación, es decir, el
Paraguay renuncia a la guerra, salvo en el ejercicio de la legítima defensa
nacional. Muchas gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Carlos Villagra Marsal, por la Comisión de
Estilo.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
VILLAGRA MARSAL: Gracias,
Presidente.
Aquí
es evidente que se ha deslizado un error, una omisión y así, en efecto, está en
el respectivo Diario de Sesiones. Hay
que agregar acá, en el segundo párrafo, tanto en uno como en otro proyecto,
"esta declaración es compatible con los derechos y obligaciones del
Paraguay, en su carácter de miembro".
Del Paraguay. Hay que agregar esa
preposición y el sustantivo. Y asimismo,
desde luego, está en el Diario de Sesiones.
Es un simple error. Y también en
las Subcomisiones, exactamente. Gracias,
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Es
un error material, del que por Secretaría se toma nota, y queda subsanado.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Rubén Melgarejo Lanzoni, como proyectista.
CIUDADANO CONVENCIONAL RUBEN
MELGAREJO LANZONI: Gracias,
ciudadano Presidente.
Las
expresiones del Presidente de la Comisión Redactora ahorran la exposición de
cuál es el espíritu de los proyectistas con respecto a la propuesta N°
2. Aquí lo que nosotros queremos
magnificar es el hecho de que se renuncie a la guerra de agresión o de
conquista, pero salvando siempre la legítima defensa nacional. Y quiero aportar el siguiente dato con
respecto al Artículo 232, inciso 7), sobre las atribuciones del Presidente de
la República, que dice así: "En
caso de guerra externa y, previa autorización del Congreso, declarar el estado
de defensa nacional". O sea que
tiene una estrecha relación con el artículo.
Si es que la mayoría de los Convencionales apoyan nuestra propuesta N°
2, desde ya, agradecer la adhesión de los miembros de la Comisión Redactora,
con respecto a esta salvedad que se hace, el de establecer que nuestro país va
a justificar, en el caso de que atenten a su soberanía o a su integridad
territorial, de que el Paraguay, en ese caso, no renuncia a la guerra, sino
que, por el contrario, legitima su defensa nacional y su integridad
territorial.
En
homenaje a la brevedad del tiempo, solicito, si es que no existen otros
oradores, que se pueda someter a votación a fin de agilizar las
deliberaciones. Gracias, ciudadano
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Antes
de ceder la palabra a otro ciudadano Convencional, la Presidencia aprovecha
esta oportunidad para iniciar también un procedimiento bastante favorable. Si existe algún miembro de la Comisión
Redactora que se oponga, entonces, que levante la mano o que lo diga, de tal
suerte a poder corregir fácilmente esto en una votación rápida de los miembros
de la Comisión Redactora, para que sea o no despacho de Comisión.
¿Existe
en la sala algún miembro de la Comisión Redactora que se oponga a este
agregado, a la inclusión, digamos, de este texto? No hay oposición. Entonces, hace parte del despacho de
Comisión, y queda como proyecto único, el Proyecto Base.
Se
va a llevar a votación. Hay un orador.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional José Ismael Candia.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
ISMAEL CANDIA: Gracias,
ciudadano Presidente. ¿Tengo la palabra
Presidente?
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
ISMAEL CANDIA: Gracias,
ciudadano Presidente.
La
inclusión de esta fórmula, evidentemente, en su intensión es absolutamente
sana, pero no es precisa, Presidente. La
legítima defensa nacional no implica una guerra defensiva. La guerra defensiva es una de las formas de
la legítima defensa nacional, y aquí lo que nosotros queremos precautelar es
que el Paraguay, en caso de agresión externa, pueda defenderse en una guerra
defensiva. Eso es técnicamente lo que se
quiere, pero la formulación del agregado no es del todo precisa; de manera que ésta es una cuestión que debe
merecer una atención especial en la Comisión de Redacción o de Estilo, y hacer
una formulación precisa de la terminología;
porque, repito, reitero, la legítima defensa nacional es un concepto
mucho más amplio que el de la guerra defensiva, que es lo que se pretende
precautelar en este caso. Gracias,
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
En
este momento, es sobre un aspecto sustantivo la discusión, así que va a tener
que ofrecerse a varios Convencionales.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Rodolfo Gill Duarte.
CIUDADANO CONVENCIONAL RODOLFO
GILL DUARTE: Gracias,
ciudadano Presidente.
Nuevamente,
con todo el respeto que me merecen mis colegas miembros de la Comisión de
Redacción, y en el artículo anterior aprobado, también encontré el mismo
defecto de contradicción; en este Artículo 138, para mí, aparece nuevamente una
contradicción flagrante. No podemos
renunciar a la guerra y, al mismo tiempo, seguimos con el TIAR y otros convenios
de obligaciones internacionales que, en un momento dado, nos va a llevar a la
guerra.
Entonces,
no entiendo muy bien, ciudadanos Convencionales, estas contradicciones en las
cuales vamos cayendo en estos artículos tan importantes en nuestra Carta Magna
futura. Pero, por esa misma razón, me
parece que la propuesta N°
2, está un poquito mejor que la básica, porque ahí especifica que somos
contrarios a la guerra de agresión y de conquista. Y, obligado por la circunstancia, aceptaría
que en defensa legítima de nuestra soberanía, podemos verdaderamente esgrimir
las armas, para defender al país. Pero
vuelvo a repetir, evidentemente, desde mi punto de vista, existen
contradicciones fundamentales en este Artículo 138, ciudadano Presidente. Muchas gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Oscar Paciello.
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO: Ciudadano
Presidente: quiero explicar, si es
posible, cuáles son los criterios que han presidido la redacción de este
artículo.
Ciertamente
que hay una vocación pacifista de parte del pueblo paraguayo, pero, como
miembro de la Comunidad Jurídica Internacional, no puede segregarse y aislarse
del cumplimiento de determinadas obligaciones que impone el Sistema de
Cooperación Interamericano y la propia pertenencia a la Organización de las
Naciones Unidas. Justamente, eso es lo
que implica que el Paraguay no se desvincula de sus compromisos internacionales
en materia de la preservación de la paz a nivel mundial. Si nosotros hubiésemos optado por la
enunciación de que el Paraguay, en ningún caso, iría a la guerra, cualquiera
que sean sus modalidades, automáticamente, entonces, nos colocaríamos en la
situación de Suiza. Y es difícil para un
país subdesarrollado como el nuestro renunciar a la cooperación en el orden
pacífico que presta la Naciones Unidas, la Organización de Estados Americanos,
la Organización Mundial de la Salud y demás, que justamente prestan esa
colaboración, cooperación y asistencia, teniendo en cuenta la contrapartida de
los Estados vinculados a esa organización en orden al mantenimiento de la paz.
En
consecuencia, lo que se ha analizado con mucho detenimiento, -inclusive, se ha
recibido la cooperación de expertos del Derecho Internacional, facilitados por
nuestra Cancillería, que hizo llegar un documento muy valioso a la Comisión
Redactora- se ha considerado, entonces, todo esto como un imperativo para esta
Constitución, en el sentido de no segregar al Paraguay de su condición de
miembro, con todas sus obligaciones, de la Comunidad Jurídica
Internacional. Este es el aspecto que se
tiene en cuenta en al segunda parte del párrafo. Ahora, cuanto la Comisión Redactora quiso
tener bien explícito, es que, por sí y ante sí, el Paraguay no asumiría, en
ningún caso, la condición de un país agresor, o llevar la guerra por los
motivos que fueren. Entonces, esa es la
razón también, por la cual hemos considerado, hemos recogido el asesoramiento
aquí de las personas que pudieran orientarnos, y es que se ha acogido esa
frase, "que salvo en ejercicio de la defensa nacional", que no
implica, -concuerdo plena y cabalmente con el ciudadano José Ismael Candia- que
no implica necesariamente el enunciado de una simple guerra defensiva, que es
una cosa cuando que la estrategia en un momento dado, en aras de la defensa
nacional, puede determinar otro tipo de conducta, por lo cual no podríamos
limitar a nuestro Estado.
Desde
luego, incluye totalmente el concepto de defensa nacional, el concepto de
guerra defensiva, Queda así patente, en este artículo, la vocación pacifista
del país, que, en fin, es una declaración, hasta si se quiere teórica, que
contiene nuestra Constitución, pero que servirá, con su sentido propedeútico,
para inculcar valores de paz a nuestros conciudadanos, y sobre todo, a la niñez
y a la juventud; o sea, esta vocación pacifista encuentra, en este texto
constitucional, una reafirmación. Nada
más, ciudadano Presidente. Muchas
gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Por
Secretaría, se va a dar lectura a la lista de oradores inscriptos.
CIUDADANO SECRETARIO: Ciudadanos
Convencionales Bernardo Villalba, José Félix Fernández Estigarribia, Armando
Espínola, Antonio Salum Flecha, Carlos Villagra Marsal y Manuel Peralta.
CIUDADANO PRESIDENTE: La Presidencia
declara cerrada la lista de oradores.
Declarada
cerrada la lista, ofrecemos la palabra al ciudadano Convencional Bernardo
Villalba. Sustancialmente, sobre el
fondo de la cuestión.
CIUDADANO CONVENCIONAL
BERNARDINO VILLALBA: Gracias,
ciudadano Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: en realidad, el tema en
discusión es que el Paraguay renuncie a la guerra de agresión y de
conquista. Es por eso que, antes de ser
reformulada la propuesta N°
2, a mi concepto, era mucho más claro y pertinente, al objeto que nos trata, y
no la reformulación en sí.
Otro
tema que quiero dejar librado a la Comisión de Estilo, es la segunda parte de
este artículo, en donde dice: "Esta declaración es compatible con los
derechos y obligaciones del Paraguay".
Se entiende que es una explicación de la renuncia a la guerra que hace
la República del Paraguay. También da a
entender, como si fuese el fundamento del objeto principal de este artículo,
cosa que no está bien hacerlo en el mismo artículo y dentro de la propia
Constitución. No es quizás ese el
sentido, sino el sentido que le dio el Presidente de la Comisión Redactora, que
es que el Paraguay acepta y sigue aceptando, y se compromete a aceptar los
dictados de las organizaciones internacionales, de las cuales el Paraguay es
miembro. Es por eso que, al decir es
compatible, no es la mejor redacción, y quizás, la Comisión de Estilo pueda
mejorar esto y dar a entender el espíritu de lo que aquí se quiere en la letra
del artículo. Muchas gracias, ciudadano
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional José Félix Fernández Estigarribia.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
FELIX FERNANDEZ ESTIGARRIBIA: Gracias,
ciudadano Presidente.
Con
respecto a esta discusión técnica, si tuviésemos que ser estrictos, tal vez
tuviésemos que suprimir todo el artículo, pero, ya que estamos en este tema,
creo que la propuesta de la Comisión Redactora y el agregado previsto es
absolutamente compatible con las normas del Derecho Internacional que nos
rige. No comparto actualmente ese
criterio que se hizo de dividir la guerra, en guerra defensiva y guerra
ofensiva. Desde que somos miembros de
las Naciones Unidas, ese concepto está terminado. La guerra está proscripta por las Naciones
Unidas y la única expresión que se admite es la de la legítima defensa.
Se
han citado en esta Convención textos como las Naciones Unidas, la Carta de la
O.E.A., o el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca. Expresamente se lo mencionó como TIAR. En el Artículo 7°,
leo, con su permiso ciudadano Presidente, dice textualmente: "En caso de conflicto entre dos o más
Estados Americanos, sin perjuicio del derecho de legítima defensa, de
conformidad con el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas". O sea que, la Constitución está siguiendo la
terminología exacta que hoy acepta el Derecho Internacional.
Por
otra parte, ciudadano Presidente, este es un artículo de fondo generoso. Se inspiró en el proyecto del Partido
Colorado, que sostenía la tesis de la neutralidad perpetua. La propia Cancillería Nacional advirtió los
problemas técnicos que podía traer tan bella declaración. Declarar la neutralidad perpetua nos creaba
problemas con nuestras obligaciones como miembros de la Organización de las
Naciones Unidas, como miembros de la Organización de Estados Americanos y como
país firmante del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca. En ese sentido, y por consenso, se reformuló
este artículo, pero nada más importante para la política internacional del
Paraguay, que una expresa condena a la guerra, guerra en el sentido
general. Como tenemos obligaciones
surgidas de esos mismos instrumentos, como una resolución del Consejo de
Seguridad nos podría obligar a adoptar ciertas disposiciones, de carácter
bélico, es que tiene el agregado puesto a continuación, y las modificaciones
sugeridas por algunos eminentes ciudadanos Convencionales, son técnicamente
compatibles.
Quiero
solamente mencionar ciudadano Presidente, que algunos conflictos
internacionales de trascendencia mundial, que se produjeron en los últimos
tiempos, se hicieron sin declaración de guerra.
Cito, ciudadano Presidente, la guerra de Corea, que se hizo sin declaración
de guerra; la guerra entre Irán e Irak, siete años de conflicto, se hizo sin
declaración de guerra; la guerra del Golfo Pérsico, se hizo sin declaración de
guerra, y la guerra entre árabes e israelíes, que son cuatro conflictos,
también se hace sin declaración de guerra.
Puedo mencionar otros ejemplos que ahora no me vienen a la memoria.
Creo
que esto es una incorporación importante para la política internacional del
Paraguay. Nos reingresa a una sociedad
internacional civilizada, damos un ejemplo.
Es la última Constitución que se está haciendo en la humanidad, y
esperemos que este artículo inspire a otras Constituciones futuras, prohibiendo
definitivamente tan abominable acto.
Gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Armando Espínola.
CIUDADANO CONVENCIONAL ARMANDO
ESPINOLA: Gracias, ciudadano
Presidente.
Acerca
del artículo y del agregado que se propone, tengo entendido, ciudadano Presidente,
que como miembro de las Naciones Unidas, en todas sus declaraciones, otras
organizaciones internacionales, y desde el pacto Bryan-Kelog en 1928, la
palabra "guerra" siempre lleva implícito el acto de agresión y
conquista. La guerra ha sido declarada
ilegal por todas las organizaciones internacionales, y el reiterar guerra de
agresión y conquista es un pleonasmo, es tautológico, es una repetición. En realidad, creo que este artículo, como
vino de la Comisión Redactora, es bastante claro, y por eso apoyo esta
moción. Muchas gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Antonio Salum Flecha.
CIUDADANO CONVENCIONAL ANTONIO
SALUM FLECHA:
Gracias, ciudadano Presidente.
Solamente
algunas precisiones sobre el agregado que se quiere hacer a este Artículo 138,
de los términos de "agresión y de conquista".
Creo
que estos términos están adecuados con la idea que se quiere plasmar. En primer lugar, quisiera responder a la intervención
de uno de los preopinantes, en el sentido de que no se debe preocupar cuando se
habla de las obligaciones internacionales que derivan de los compromisos del
Paraguay, tanto de la O.E.A. en relación al TIAR, como con las Naciones Unidas,
porque aquí uno de los principios que acabamos de aprobar en el Artículo 137
dice: "La solidaridad y la
cooperación internacional", lo cual dice claramente que el Paraguay, una
vez suscripto un compromiso, como lo tiene con las Naciones Unidas y con la
OEA, los debe cumplir.
Y
con relación a la precisión de agresión y de conquista, quiero señalar que esto
es realmente compatible, porque no hay que olvidar que en 1932, cuando comienza
la guerra con Bolivia, el Paraguay fue agredido por Bolivia, y entonces, se vio
obligado, un año después, en 1933, a declararle la guerra para evitar que
Bolivia siguiera recibiendo ayuda de otros países latinoamericanos, alegando,
entonces el Paraguay, que era conveniente que estos países se declararan
oficialmente neutrales. De manera que en
este caso, lo que el Paraguay renuncia, concretamente, es a "la guerra de
agresión y de conquista", y no está mal que en un momento dado, el
Paraguay, como el caso de Bolivia, se vea obligado a declarar la guerra a un
Estado, precisamente, para beneficiarse de la ayuda internacional, y evitar que
los agresores potenciales puedan recibir impunemente ayuda sin que las
protestas del Paraguay sean tenidas en cuenta.
Nada más, ciudadano Presidente; con estas ideas, para aclarar el
problema que se ha suscitado.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Carlos Villagra Marsal.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
VILLAGRA MARSAL: Gracias, Presidente.
Entiendo
que los proyectistas de la propuesta N°
2, no incluyeron, en definitiva, la locución de agresión y de conquista. ¿No es así?
No, no está incluida. Perdone el
diálogo. De manera que quedó, entonces,
el agregado que comienza con la conjunción adversativa, "pero justifica la
legítima defensa nacional".
Propondría
a los proyectistas, para salvar en parte ese deseo de precisión del
Convencional José Ismael Candia, que nos atengamos nada más que al principio
genérico de legítima defensa, suprimiendo el calificativo de nacional. Creo que, paradójicamente, al admitir ese
principio como lo demás -está admitido en el plano individual en esta
Constitución y en todas- al agregar legítima defensa solamente, no legítima
defensa nacional, ya se incluye el hipotético, eventualísimo caso de que el
Paraguay, siendo agredido, deba hacer el papel, o desempeñar el papel de
atacante. Creo que, y me parece que el
Convencional José Félix Fernández Estigarribia también está de acuerdo en ello,
que si los proyectistas suprimen "nacional", quedaría perfectamente
bien con esta conjunción adversativa:
"La República del Paraguay renuncia a la guerra, pero justifica la
legítima defensa", y sigue el segundo párrafo. Gracias, Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: La Presidencia se permite llamar la atención,
sin abrir opinión en el sentido de, que esa terminología está en correlación
con lo manifestado para atribuciones del Poder Ejecutivo, Artículo 237, inciso
7), que, justamente, por no admitir la guerra, el Ejecutivo puede declarar el
estado de defensa nacional. Solamente
advierte sobre eso.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Manuel Peralta.
CIUDADANO CONVENCIONAL MANUEL
PERALTA: Gracias, Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: realmente pedí la
palabra, no para dictar una cátedra sobre este tema, no es de mi especialidad,
pero, por el título que ponemos, es que queremos renunciar a la guerra. Si realmente esa es la intención, creo que la
legítima defensa no hace falta redactarla.
Nosotros sabemos que el más pacifista del mundo, cuando es agredido,
busca forma de defenderse, porque eso es un derecho propio y existe
naturalmente en el hombre y con mayor razón en el país: en un país debe existir eso. Si nuestra voluntad es de expresar la
renuncia a la guerra, y ayer también, de las discusiones que surgió, y hoy
nuevamente, da la sensación de que cada vez hay mayor cantidad de ciudadanos
que no están de acuerdo con la guerra, y creo que incluso muchos militares hoy
en día ya no tienen suficiente creencia en la guerra, cree más en hacer
comercio o cualquier otra cosa, pero no en la guerra.
Por
eso yo quisiera que, de ser posible, ciudadano Presidente y los ciudadanos que
intervinieron en la redacción, no acepten más otro término que así como está
expuesto realmente, de tal manera que se manifieste la voluntad de esta
Constituyente de que del Paraguay de renuncia a la guerra. Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Por
Secretaría se va a hacer un relatorio porque existiría...
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Rubén Melgarejo Lanzoni.
CIUDADANO CONVENCIONAL RUBEN
MELGAREJO LANZONI: Gracias,
ciudadano Presidente.
La
sugerencia emitida por el ciudadano Carlos Villagra Marsal es aceptada por los
proponentes de la Propuesta N°
2. Y voy a dar lectura, a fin de ajustar
con la Secretaría, cómo es el artículo que proponemos a los Convencionales.
"La
República del Paraguay renuncia a la guerra, pero justifica la legítima
defensa. Esta obligación es compatible
con los derechos y obligaciones del Paraguay en su carácter de miembro de la
Organización de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos,
o como parte en Tratados de Integración".
Muchas gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE: Ciudadano
Convencional: con toda la buena voluntad
que me anima desde luegoa esta Constituyente, hemos salido un poco del
Reglamento, porque ya había aceptado el Presidente de la Comisión y después la
Presidencia pidió sí algún miembro de la
Comisión Redactora estuviese opuesto y no hubo ninguno. Inclusive, por Secretaría, se puede
hacer un relatorio de una frase que
habría aceptado el ciudadano Convencional Oscar Paciello.
Vamos
a hacer este breve relatorio para ver sí tenemos un poco de claridad, buscando
siempre la verdad y lo mejor que podamos llevar adelante.
CIUDADANO SECRETARIO: Ciudadano
Presidente: en su primera intervención el Presidente de la Comisión Redactora
había admitido la frase "la República del Paraguay renuncia a la guerra
salvo en ejercicio de la defensa nacional", esa fue en su primera
intervención y se puso a consideración y la Comisión Redactora no ha tenido
ninguna oposición interna. Así es que
este el texto que se acoge en la Comisión Redactora. No sé si el Presidente de la Comisión puede
aseverar esto.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Oscar Paciello.
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO: Realmente, ciudadano Presidente, esta es una
cuestión de estilo. Y yo le suplicaría
acá a nuestro internacionalista, el ciudadano José Félix Fernández Estigarribia
que, en cooperación con el Presidente de la Comisión de Estilo, encuentren la
frase más feliz. Sabemos todos el
espíritu y por eso la Comisión Redactora lo ha acogido. El Paraguay en ningún caso va a asumir una
actitud agresiva ni beligerante, simplemente renuncia a la guerra, pero no
renuncia para el supuesto de tener que defender la heredad nacional, que es
cuanto se ha manifestado en todos los artículos precedentes.
Por
eso, ciudadano Presidente, suplico, pasemos directamente a votación con ese
espíritu, y encomendemos a la Comisión de Estilo que encuentre la frase más
feliz para este fin. Muchas gracias,
ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Muchas gracias, ciudadano Convencional. Así
se hará. Se va a dar una última lectura
y luego llevamos a votación.
CIUDADANO SECRETARIO: La Propuesta N°
2, los Convencionales proponentes la retiran, entonces queda como texto único
sujeto a la Comisión, a la modificación que pueda..., ¿como?, y sí, el
concepto, pero la Propuesta N°
2 se retira. Queda como propuesta única
la propuesta de la Comisión Redactora.
Dice
así: "La República del Paraguay
renuncia a la guerra salvo en ejercicio de la defensa nacional. Esta declaración es compatible con los
derechos y obligaciones del Paraguay en su carácter de miembro de la
Organización de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos,
o como parte en Tratados de Integración".
CIUDADANO PRESIDENTE: La Presidencia,
entonces va a llevar a votación el texto acogido por la Comisión Redactora, que
conceptualmente se refiere a la legítima defensa, cuya redacción final queda a
cargo de la Comisión de Estilo.
Los
que estén por la aprobación, se servirán levantar la mano.
MAYORIA. Queda aprobado en consecuencia el artículo.
APROBADO.
Se
pasa al siguiente artículo.
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo 139. Proyecto Base. Propuesta única.
Título.
Orden Jurídico Supranacional.
Texto:
"La República del Paraguay en condiciones de
igualdad con otros Estados admite un Orden Jurídico Supranacional que garantice
la vigencia de los derechos humanos, de la paz, de la justicia, de la
cooperación y del desarrollo en lo político, económico, social y cultural. Estas decisiones sólo podrán ser adoptadas
por la mayoría absoluta de cada Cámara del Congreso".
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración, el
proyecto único.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Víctor Hugo Sánchez.
CIUDADANO CONVENCIONAL VICTOR
HUGO SANCHEZ:
Ciudadano Presidente, honorable Convención: me asalta una duda respecto a este artículo
porque en su primer párrafo evidentemente se hace una afirmación de un
principio, de que la República del Paraguay admite un Orden Jurídico Supranacional,
etc. Pero en su segundo párrafo esa
afirmación, ese principio tiene sin embargo un condicionamiento, lo cual hace
que eventualmente lo que se esta afirmando en el primer párrafo pueda ser
nuevamente modificado por decisión mayoritaria de las Cámaras. En consecuencia, si es evidente que existe
una contradicción como a primera vista parece, yo sería partidario de que se
suprima el segundo párrafo de este artículo.
Nada más.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene el uso de la
palabra el ciudadano Convencional Evelio Fernández.
CIUDADANO CONVENCIONAL EVELIO
FERNÁNDEZ AREVALOS: Tal vez se haya incurrido en una
interpretación un tanto equivocada de este precepto. Lo que se establece en el primer parágrafo es
que nuestro país admite un Orden Jurídico Supranacional, siempre que tenga por
objeto garantizar la vigencia de los derechos humanos, de la paz, de la
justicia, de la cooperación y el desarrollo en lo político, económico, social y
cultural. Evidentemente, el precepto
está orientado a posibilitar la forma de cooperación integrativa, que una
especie dentro del género de cooperación internacional y que tiene como
característica básica el hecho de que cierta competencia y atribuciones se
transfieren a organismos de carácter extranacional o supranacional.
Pero
como se tratan de decisiones de importancia y para evitar que pudiera darse el
caso en que fueran tomadas esa decisiones a la ligera, se establece un
condicionamiento especial que es que las decisiones sobre esta materia sólo
podrá ser adoptada por mayoría absoluta de cada Cámara del Congreso; ese es el
motivo: posibilitar, habilitar al
Paraguay a su integración a sistemas de Organización Jurídica Supranacional,
pero condicionando las decisiones a una mayoría calificada que impida
decisiones que puedan ser, o apresuradas, o motivadas por contingencia política
coyunturales. Nada más, ciudadano
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano convencional Antonio Salum Flecha.
CIUDADANO CONVENCIONAL ANTONIO
SALUM FLECHA: Gracias,
ciudadano Presidente.
Suscribo
totalmente lo que acaba de decir el preopinante y solamente en este caso
quisiera agregar que habiéndose reunido recientemente en nuestro país el
Parlatino, y siendo uno de sus propósitos que los integrantes del Parlatino en
el futuro próximo, puedan ser elegidos directamente Diputados o Senadores del
mismo, mediante elecciones directas, simultáneamente con las elecciones que se
hacen en cada país de Senadores y de Diputados, el Paraguay en virtud de este
artículo estaría en condiciones, ya, de cumplir oportunamente una vez que lo
resuelvan ambas Cámaras del Congreso por mayoría absoluta para que esta
situación pueda acontecer también en nuestro país y pasar en su oportunidad sus
Parlamentarios Latinoamericanos a ocupar sus bancas en condiciones de ser
elegidos directamente por el pueblo.
Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Federico Callizo.
CIUDADANO CONVENCIONAL FEDERICO
CALLIZO: Gracias, ciudadano Presidente.
Solamente,
ciudadano Presidente y ciudadanos Convencionales, para resaltar muy
enfáticamente la importancia de la incorporación de esta norma en la
Constitución.
Creo,
en las puertas del siglo XXI y dada las características de la conformación del
mundo actualmente, que este artículo coloca a Paraguay en una posición
sumamente moderna y en condiciones de
afrontar los grandes desafíos que se presentan en el orden de la integración en
el campo Internacional.
Creo,
ciudadano Presidente, que el Orden jurídico Supranacional es un progreso dentro
del concepto de la solidaridad del hombre y de la humanidad; es una forma de
establecer parámetros en que el hombre deja de lado su nacionalismo para
insertarse en un orden internacional en que los derechos humanos son
reconocidos como de carácter internacional.
Con
respecto al segundo párrafo, ciudadano Presidente, creo que es oportuno, porque
en esta forma se está dando una garantía más en manos del Parlamento, que
refuerza la posibilidad de que los pasos que dé el país, el Paraguay, en el
orden establecido, sean con las debidas garantías que se necesitan en un tema
tan transcendente como éste. Nada más,
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional José Félix Fernández
Estigarribia.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
FELIX FERNANDEZ ESTIGARRIBIA: Gracias, ciudadano Presidente.
Para
apoyar enfáticamente este artículo, que incorpora a Paraguay a la vanguardia de las naciones
civilizadas. Con esta disposición
constitucional, Paraguay podrá ingresar a aquellos acuerdos de integración de
carácter regional o de carácter americano que sean necesarios para el
desarrollo futuro del país.
Con
este artículo, ciudadano Presidente, nos incorporamos como felizmente recién
nos dijera el ciudadano Federico Callizo, al siglo XXI. Este va a ser un siglo
nuevamente de las luces, esa es la aspiración de todos los seres humanos que creen
en la bondad.
Ciudadano
Presidente: si algún país tiene el
derecho por su historia política de transformar aquella frase de Bolívar de
"hemos arado en el mar", en una nueva en que diga "estamos
arando la tierra americana", es nuestro país, el Paraguay. Porque, justamente, hemos regado nuestra roja
tierra paraguaya con la sangre de nuestros mártires, es que tenemos que votar
con convicción paraguaya, nacional y americana, un artículo tan importante,
para nuestro futuro, cuando los estudiosos de la Constitución paraguaya, que
van a venir en el futuro, encuentren este tema, tan bellamente escrito, y
sabrán que los Convencionales paraguayos apostaron por nuestro futuro. Gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional. Muy bien.
Tiene
el uso de la palabra el último orador, ciudadano Convencional Luis Alfonso
Resck.
CIUDADANO CONVENCIONAL LUIS
ALFONSO RESCK:
Gracias, ciudadano Presidente.
Yo
solamente he pedido la palabra para apoyar, elocuentemente y con orgullo, estos
dos últimos artículos, ciudadano Presidente.
Realmente
me siento feliz. Como paraguayo, ha sido
siempre la bandera que enarbolamos a lo ancho y a lo largo de nuestra castigada
América Latina, bajo el signo de los derechos humanos, la cooperación mutua, y
con ello, queda así solamente esta palabra que nos dijeron los Parlatinos. Hace unos días, hace poco tiempo en Caracas
llevóse a cabo un foro sobre la gran nación latinoamericana a la luz de estos
ideales.
Con
este artículo, abrimos el ancho portal y transitamos por este camino, y éste es
el camino conducente a la verdadera paz, ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales, por ello como paraguayos, nosotros, al consagrar estos
artículos, primero, el preconcepto de un país, simplemente guerrero,
internacionalmente, hoy, le rendimos tributo a la paz, al condenar la guerra.
El
país aislado, hoy abierto anchamente, con un corazón sensible y solidario para
que mancomunando esfuerzos, conquistemos la verdadera paz cimentada sobre los
derechos humanos. Gracias, ciudadano
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
La
presidencia va a llevar a votación.
Estamos en estadio de votación.
La
propuesta es única, de manera que los que estén de acuerdo con la aprobación,
se servirán levantar la mano: Mayoría,
queda aprobada el artículo en cuestión.
APROBADO.
Se
pasa al siguiente artículo, el Artículo 140.
CIUDADANO
SECRETARIO:
Capítulo III, De la Nacionalidad y de la
Ciudadanía. Artículo 140. Propuesta única, Proyecto Base,
Título:
El Artículo, De la Nacionalidad, natural.
Son de nacionalidad paraguaya natural:
1) Las personas nacidas en el
territorio de la República.
2) Los hijos de madre o padre
paraguayo que, hallándose uno o ambos al servicio de la República, nazcan en el
extranjero.
3) Los hijos de madre o padre
paraguayo nacidos en el extranjero, cuando aquellos se radiquen en la República
en forma permanente.
4) Los infantes recogidos en el
territorio de la República, de padres ignorados.
La
formalización del derecho consagrado en el inciso 3), se hará por simple
declaración del interesado, cuando éste sea mayor de 18 años. Si no los hubiese cumplido aún, la
declaración de su representante legal tendrá validez hasta dicha edad, quedando
sujeta a ratificación por el interesado.
Punto final del texto.
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración el texto único, base que no
tiene observación.
¿Se
va a llevar a votación, o hay alguna observación?
Se
va a llevar a votación. Hay una
observación.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional José Dolores Samaniego.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
DOLORES SAMANIEGO: ¿Tengo la palabra, ciudadano Presidente?
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra, ciudadano Convencional.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
DOLORES SAMANIEGO: Gracias, Presidente.
El
Artículo 2°, o sea el numeral
2) de este Artículo 140, evidentemente sufrió alguna alteración, error de
imprenta diríamos, porque cuando dice "los hijos de madre o padre
paraguayo", da la idea de que uno de ellos puede ser extranjero. Sin embargo, hallándose uno o ambos al
servicio de la República, siendo extranjero uno de ellos, mal podrían estar al servicio
de la República. Además en la Constitución
anterior, en la Constitución vigente, dice "los hijos de madre y padre
paraguayos". Yo por eso quisiera
una aclaración al respecto.
CIUDADANO PRESIDENTE: Se le da la palabra al ciudadano convencional
miembro de la Comisión Redactora, Evelio Fernández Arévalos.
CIUDADANO CONVENCIONAL EVELIO
FERNANDEZ AREVALOS: El defecto de la Constitución vigente, es
precisamente su falta de cobertura de todos los casos posibles.
Acá
hemos tratado de cubrir todas las posibilidades existentes.
¿Qué
puede ocurrir? Que una persona tenga una madre paraguaya, un padre austriaco, y
que la madre esté al servicio de la República, o a la inversa. Puede ser que el padre sea paraguayo, la
madre austriaca, y que el padre esté al servicio de la República, entonces,
para cubrir todas las hipótesis, se tuvo esta redacción, que es la única que
permite hacer conservar el carácter de nacional paraguayo al hijo de esa
persona cuyo padre o madre, paraguayo, uno de ellos, o ambos, estén al servicio
de la República. Nada más, ciudadano
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Tadeo Zarratea.
CIUDADANO CONVENCIONAL TADEO
ZARRATEA: Gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: quiero hacer una
consulta a la Comisión Redactora, y de paso, también, llamar la atención de la
Comisión de Estilo sobre el 4) inciso.
Creo que se refiere a los infantes recogidos en la República.
A
mí me parece poco feliz ese término "recogido", ciudadano Presidente.
Me gustaría que dijera, por ejemplo,
"los infantes hallados en la República", o cualquier otro sinónimo,
pero la palabra "recogidos en la República", a mí no me satisface. Tengo entendido que no es un término
preciso. Además, pareciera que
inclusive, se puede introducir niños por esa vía. Muchas gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Se pasa a la Comisión de Estilo, se traslada
esa preocupación a la Comisión de Estilo.
Si
estuviesen algunos de los miembros, si no están, de todas maneras, se toma nota
en Secretaría.
Puede
que se refiera a los hijos de expósitos, podría ser. De manera que, es cuestión de Comisión de
Estilo, para que determine.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Cecilio Alejandro Osorio.
CIUDADANO CONVENCIONAL CECILIO
ALEJANDRO OSORIO: Gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
lejos de ser constitucionalista, encuentro por primera vez la
oportunidad para expresar también mi inquietud.
En este artículo, en el inciso 3), leo que "los hijos de madre o
padre paraguayo nacidos en el extranjero, cuando aquellos se radiquen en la
República en forma permanente, son también ciudadanos de nacionalidad
natural".
Para
mí es muy peligrosa esta declaración. Creo
que algo más se le debe agregar a ese inciso.
No propongo, pero pido a la Comisión Redactora que tenga un poco en
cuenta mi deseo.
Tengo
entendido que una persona nacida en el extranjero, que haya prestado su
servicio militar obligatorio en el extranjero, que haya prestado servicio
político de trascendencia en el extranjero, no puede volver al Paraguay como
ciudadano de nacionalidad natural. De
ahí, pues, yo creo, que aquella persona que ha prestado dicho servicio en el
país desde su nacimiento, debe solicitar la ciudadanía por naturalización; ya
no puede ser de nacionalidad natural, porque tiene derechos muy transcendentes.
De
manera que mi inquietud es trasladar a la Comisión, a ver si no le puede
agregar, en el 3) inciso, "que no haya cumplido o prestado servicio
militar en el país de su nacimiento u ocupado cargo político de
trascendencia. Nada más, ciudadano
Presidente, gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE:
Tiene la palabra el ciudadano Convencional Evelio Fernández, por la Comisión
Redactora.
CIUDADANO CONVENCIONAL EVELIO
FERNANDEZ: La
preocupación del preopinante fue atendida en el Artículo 147, y atiende más, o
guarda más vinculación con el "ejercicio de la ciudadanía".
"Se
suspende el ejercicio de la ciudadanía por adopción de otra nacionalidad, salvo
reciprocidad internacional, por incapacidad, etc., etc." Es cierto que en estos casos es imposible que
se ejerza simultáneamente ambas ciudadanías.
Pero
acá estamos hablando de otro tema, estamos hablando de la nacionalidad y,
entonces, la objeción que nos manifiesta el preopinante, a mi juicio, pierde
sustento. De hecho en la Constitución
del '67 se establece exactamente lo mismo.
De manera que, en países como el Paraguay , que tiene una diáspora tan
pronunciada, hay que facilitar el hecho de los nacidos en el exterior, pero de
padre o madre paraguayos, a que puedan recuperar, diríamos así, su nacionalidad
natural.
Por
otra parte, en el final, en el parágrafo final del artículo, se establece un
sistema de formalización de ese derecho consagrado en el inciso 3), es decir,
que "se hará por simple declaración del interesado, cuando éste sea mayor
de diez y ocho años y, si no lo hubiera cumplido aún, la declaración de su
representante legal tendrá validez hasta dicha edad, quedando sujeta a la rectificación
por el interesado". Quería señalar,
por último, que, muchas veces, el paraguayo que está en el exterior se ve
obligado a prestar servicio militar. No
es un acto voluntario. Se ve constreñido
a hacerlo. Y si decide, eso sí,
voluntariamente, venir a su país y vivir en él, entonces no veo por qué, tal
como ya lo establecía la Constitución del '70, la del '40 y la del '67, no
pueda tener la nacionalidad paraguaya.
Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene el uso de la palabra el último orador
inscripto, el ciudadano Convencional Luis Lezcano Claude.
CIUDADANO CONVENCIONAL LUIS
LEZCANO CLAUDE:
Ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales: nada más para formular una pregunta a la
Comisión Redactora en el sentido de, si en el procedimiento que se prevé en el
último párrafo del Artículo 140, no tiene que estar también incluida la situación contemplada en el
inciso 2) de este Artículo 140, es decir,
la simple declaración del interesado o la del representante legal en caso de
que este no tenga diez y ocho años. De
manera que este último párrafo diría "la formalización del derecho
considerado en los incisos 2) y 3)" y no solamente, como dice,
"inciso 3)". Quiero formular
esta pregunta a la Comisión Redactora.
Gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE: Se traslada al ciudadano Convencional miembro
de la Comisión Redactora, Evelio Fernández Arévalos.
CIUDADANO CONVENCIONAL EVELIO
FERNANDEZ AREVALOS: De acuerdo con normas aplicadas en forma consuetudinaria,
en todos los países, prácticamente el hijo de padre o madre de una nacionalidad
determinada que esté al servicio de la República, se inscribe directamente en
la respectiva Embajada, o Consulado, como nacional, de manera que no hace falta
ninguna formalización de derecho alguno posteriormente.
Es
por eso que no se contempla la hipótesis 2) en parágrafo final. Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Agotada
la lista de oradores, la Presidencia va a llevar a votación. Estamos en estado de votación.
Se
va a llevar a votación el único texto, Proyecto Base.
Quienes
estén de acuerdo con el Artículo 140, se servirán levantar la mano: Mayoría. Queda aprobado, en consecuencia, el mismo.
APROBADO.
Se
pasa al siguiente Artículo 141.
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
141. Propuesta única. Proyecto Base.
Título del Artículo 141. De la Prohibición
de Privar la Nacionalidad Natural.
Texto: "Ningún
paraguayo natural será privado de su nacionalidad, pero podrá renunciar
voluntariamente a ella".
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración, la propuesta única.
Quienes
estén de acuerdo, se servirán levantar la mano:
Mayoría. Queda aprobado,
en consecuencia, el Artículo 141.
APROBADO.
Se
pasa al siguiente Artículo.
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
142. Propuesta única. Proyecto Base.
Título del artículo: De la
Nacionalidad con Naturalización.
Texto: "Los
extranjeros podrán obtener la nacionalidad paraguaya por naturalización si
reúnen los siguientes requisitos:
1) Mayoría de edad;
2) radicación mínima de tres años en el
territorio nacional;
3) ejercicio regular en el país de alguna
profesión, oficio, ciencia, arte o industria;
4) buena conducta, establecida en la ley"
Punto
final del artículo.
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración, el texto que acaba de
leerse, Proyecto único. No existen
observaciones.
Hay
un ciudadano que pide la palabra.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Eusebio Ramón Ayala.
CIUDADANO CONVENCIONAL EUSEBIO
RAMON AYALA:
Ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales: nosotros hemos tratado, en Capítulo anterior
respecto De los "Menores", y creo que los menores tienen el derecho a
ser protegidos en todos los aspectos. En
ese sentido, creo que este Artículo 142, en su inciso 1) podría ser perjudicial
para el interés de los menores, porque exige la mayoría de edad.
Pongamos
un simple caso. Cuando algunos padres se
radiquen en la República, con carácter permanente, optan por la naturalización
y sin embargo sus hijos, que viven con ellos, no van a poder tener la
nacionalidad por naturalización, lo cual les acarrearía un gran problema.
Creo
que, inclusive, en el artículo anterior, cuando se estaba tratando de la
nacionalidad natural, se había llegado a un acuerdo razonable en cuanto a la
formalización del derecho consagrado en el inciso 3), que dice "se hará
por simple declaración del interesado cuando éste sea mayor de diez y ocho
años. Si no los hubiese cumplido aún, la
declaración de su representante legal tendrá validez hasta dicha
edad". Creo, ciudadano Presidente
que, por esos motivos, y protegiendo los intereses de los menores, tendríamos
que suprimir el inciso 1) en cuanto a la exigencia de la mayoría de edad para
optar por la nacionalidad por naturalización.
Obviamente,
que cualquier procedimiento sobre adquisición o opción de la nacionalidad así
como sobre la suspensión de la ciudadanía, el que tiene la competencia
exclusiva es el Poder Judicial. Luego,
creo que vamos a tener las debidas garantías respecto a esta cuestión. Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Víctor Hugo Insaurralde.
CIUDADANO CONVENCIONAL VICTOR
HUGO INSAURRALDE: Ya prácticamente el preopinante dio la misma
opinión mía, ciudadano Presidente.
Paso. Muchas gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene el uso de la palabra el ciudadano
Convencional Diógenes Martínez.
CIUDADANO CONVENCIONAL DIOGENES
MARTINEZ: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales: quiero aportar una
experiencia personal en este tema.
Cuando fungía la función de Fiscal General del Estado, era lamentable la
cantidad extraordinaria de nacionalizaciones de ciudadanos orientales. Creo que este plazo, de tres años, es
sumamente ínfimo, con relación a lo que debiera requerirse para adoptar la
nacionalidad paraguaya.
Evidentemente,
nuestro país se ha convertido en un corredor para ciudadanos de otras latitudes
que no tienen su ingreso normal y legal, fundamentalmente, en los Estados
Unidos y en varios países de Europa. Y
ese es un motivo sumamente preocupante para los paraguayos. Tener que diariamente presenciar y suscribir
nacionalizaciones de ciudadanos, principalmente, orientales, que masivamente se
benefician con este régimen.
Propondría
a la Comisión Redactora que este plazo de tres años se eleve a cinco años, por
lo menos. Es una proposición concreta
que hago a la Comisión Redactora, y pido disculpas porque, estando allí
adentro, yo no estaba cuando se trató este artículo. Muchas gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Evelio Fernández.
CIUDADANO CONVENCIONAL EVELIO
FERNANDEZ: Apoyo
el proyecto tal cual fue propuesto por la Comisión Redactora.
En
primer lugar, y contestando las observaciones de un preopinante, quiero
destacar el hecho de que la exigencia de la mayoría de edad, para la
nacionalidad por naturalización, es perfectamente legítima. Y que esa situación no es la misma que la que
está contemplada en el Artículo 50 para la nacionalidad natural.
Y
una persona que adopta otra nacionalidad realiza un acto sumamente importante,
y tan importante, que requiere capacidad, discernimiento, y solamente los
mayores de edad, se supone, gozan de
capacidad y discernimiento para adoptar esa decisión de tanta transcendencia.
Es
cierto que puede darse el caso en que un padre hubiese obtenido la nacionalidad
paraguaya por naturalización y que sus hijos, por ser menores, no puedan, a su
vez, adoptar esa nacionalidad paraguaya.
Ese hecho es inevitable, de acuerdo con el criterio que ha sustentando
la Comisión Redactora, pero no genera en la actualidad los problemas que de
antiguo se ofrecían en el campo internacional.
La
dificultad fundamental que existía antes se suscitaba sobre todo para los
viajes. ¿Qué ocurría? El padre naturalizado paraguayo obtenía su
pasaporte nacional como ciudadano, en tanto que los hijos debían obtener
pasaporte de los Consulados o Agentes Diplomáticos de los países de los cuales
eran nacionales. Pero esos problemas se
han solucionado, prácticamente, en forma total, por dos motivos. Primero,
porque se ha agilizado el sistema de otorgamiento de pasaportes y, en
segundo lugar, porque, en casos extremos, se otorgan pasaportes nacionales a
extranjeros.
De
esa manera, en la eventualidad de que por razones especiales, como por ejemplo,
la nacionalidad, desde China Continental no fuera posible obtener un pasaporte
de ese país, se otorga un pasaporte paraguayo al extranjero, que posibilita su
viaje. Esa es la única dificultad que se
podría plantear, porque, teniendo radicación los padres, y siendo nacionales
los padres también, es obvio que los niños, sus hijos, también tendrán
radicación definitiva en el país, aunque conserven su nacionalidad extranjera.
No
creemos conveniente ampliar la posibilidad de la obtención de la ciudadanía por
naturalización por la simple decisión de los padres, porque consideramos que tiene que ser una
decisión iluminada por una meditación, por la capacidad que solamente la
mayoría de edad otorga.
En
cuanto a la preocupación de otro preopinante respecto de la radicación mínima
de tres años, no comparto. Pese a
compartir sí los propósitos que la animan, no comparto sin embargo esa
tesitura. Hay que recordar que en la
Constitución anterior se requería solamente dos años para la obtener la
nacionalidad paraguaya por naturalización.
Acá se ha elevado a tres años y, consecuentemente, hoy día, unido ese
hecho a los medios que existen de información y de comunicación, me parece que
tornan el problema, bien de tipo
administrativo, o de obtención de información adecuada y no una cuestión de
fondo.
Consiguientemente,
soy partidario de la aprobación in extenso de este artículo. Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Por
Secretaría se pasará lista a los oradores inscriptos.
CIUDADANO SECRETARIO: Ciudadanos Convencionales Tadeo Zarratea,
Juan Francisco Elizeche, Carlos Alberto González, Cayo Gwynn, Oscar Paciello y
Nilda de Marín.
CIUDADANO PRESIDENTE: La Presidencia declara cerrada la lista de
oradores.
Prosigue
el uso de la palabra.
Tiene
el uso de la misma el ciudadano Convencional Tadeo Zarratea.
CIUDADANO CONVENCIONAL TADEO
ZARRATEA: Gracias, ciudadano Presidente.
Honorables
Convencionales: en primer lugar, voy a
ratificar dos posturas ya señaladas en esta Convención.
La
primera, que un preopinante pide la reconsideración del inciso 1) para abrir la posibilidad de que los menores
opten por la naturalización, es decir, por la nacionalidad paraguaya por naturalización. Eso es para mi hasta insólito, ciudadano
Presidente, porque la naturalización es un hecho personalisimo, es un hecho que
pivota sobre la autonomía de la voluntad.
Necesariamente, se requiere la mayoría de edad.
Un
menor no tiene personalidad jurídica como para realizar un acto de tamaña
naturaleza. Este es un acto
personalísimo de suma importancia y gravedad en la vida del ciudadano. Más bien estoy en la tesis de que habría que
cerrar, digo, ir ajustando los mecanismos para que la naturalización de los
extranjeros cumpla con la función debida, porque en nuestro país no la cumple,
ciudadano Presidente.
En
ese punto, estoy plenamente de acuerdo con la opinión de un preopinante, que
voy a tener que nombrarlo, el ciudadano Convencional Diógenes Martínez, en el
sentido de elevar el plazo para la naturalización de los extranjeros.
Ciudadano
Presidente: en muchas oportunidades he
sentido pena por el Fiscal General del Estado y por la Corte Suprema de
Justicia, y digo pena porque realmente no tienen tiempo para administrar
justicia para los paraguayos. Porque la
mitad de su tiempo lo dedican a los orientales.
La Corte Suprema de Justicia, en este momento, ciudadano Presidente,
está abarrotada de orientales que están solicitando la naturalización. Y el Fiscal General del Estado tiene una pila
inmensa, -y el Convencional Diógenes Martínez habla con conocimiento de causa-
una pila inmensa de expedientes que despachar.
Prácticamente,
esto ha venido a ser un negocio de los orientales, en el sentido de obtener la
nacionalidad paraguaya para ingresar a otros Estados con mayor nivel de
vida. Y es una inmensa pena que sentimos
como paraguayos, ciudadano Presidente, una situación como ésta. Porque la naturalización, y repito, pivota
sobre la autonomía de la voluntad y es un acto personalisimo, consciente,
voluntario de una persona mayor de edad, que, por una razón poderosa, hace una
opción en su vida, que va a hacer una sola vez y responde esto a lo que se
llama la identificación cultural con un pueblo.
Porque una es la nacionalidad antropológica del ciudadano y otra es la
nacionalidad jurídica. Es el caso de los
indígenas, por ejemplo, que tienen una nacionalidad antropológicamente
diferente a la paraguaya pero jurídicamente son paraguayos.
Lo
mismo sucede con los extranjeros que deben llegar a la conclusión de
naturalizarse por identificarse con este pueblo en su cultura, en su historia,
en su, digamos, ecología humana.
Por
eso, ciudadano Presidente, concuerdo con el preopinante, de alzar el plazo por
lo menos a cinco años, porque esto se ha convertido en un negocio vil que nos
duele como paraguayos. Gracias.
APLAUSOS...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Juan Francisco Elizeche.
CIUDADANO CONVENCIONAL JUAN
FRANCISCO ELIZECHE: Muchas gracias,
Presidente.
En
primer lugar quiero manifestar mi total acuerdo con el artículo tal cual viene
de Comisión en cuando hace a la mayoría de edad, por las razones ampliamente
expuestas que hacen fundamentalmente al discernimiento y a la voluntad de
asumir una decisión tan importante como es la adopción de un nacionalidad.
En
segundo término, quiero referirme a la propuesta de aumentar los años de
radicación mínima para otorgar la naturalización. Yo quiero manifestar mi respetuoso disenso
con quien propuso aumentar el número de años, tomando como experiencia el poder
judicial. Con la misma experiencia y de
constancias personales, yo quiero hablar de que en el Poder Judicial se ha
amañado la mayoría de las naturalizaciones de los ciudadanos orientales,
¿como? Generalmente amañando los años de
radicación y las entradas en los propios sellos de los pasaportes, primer
problema.
Segundo
problema, que se ha constatado en el Poder Judicial que se han otorgado cartas
de naturalización sin expedientes, se han firmado las sentencias de
naturalizaciones sin expedientes donde obren los antecedentes, es decir, esa
experiencia yo creo que es la experiencia de, digamos, lo ilegal o lo
negativo. Ahora tenemos que mirar
nosotros el lado positivo de extranjeros que verdaderamente viven en nuestro
país, y un tiempo de tres años es bastante considerable máxime cuando se habla
del requisito del ejercicio regular en el país de alguna profesión, oficio,
ciencia arte o industria. Nuestro país debe aceptar y promover los aportes de
personas extranjeras con estas habilidades o capacidad para enriquecer nuestra
propia cultura y propugnar nuestro desarrollo sin inmigración extranjera, es
muy difícil que podamos nosotros desarrollarnos en corto tiempo.
Es
bien conocida la importancia de la inmigración en países como la Argentina, el
Brasil, fundamentalmente por sus ventajas con países con costas marítimas. Nuestro país, un país mediterráneo, necesita
también el concurso de ciudadanos extranjeros para su desarrollo con estas
habilidades, y con esta decisión, y con una permanencia fehacientemente
demostrada de tres años, no como hasta ahora se hizo por simple certificación
en la comisaría del lugar.
Entonces,
esa cantidad de expedientes yo considero que fue una de las lacras de la
administración anterior. No sé desde
cuándo viene esa lacra en nuestro Poder Judicial que me parece que ahora está
bastante controlado en la justicia. Por lo tanto, considero que tres años es
suficiente. Gracias.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano
Convencional.
Se
ruega a los ciudadanos Convencionales que están afuera, se dignen a retornar a
ocupar sus respectivos asientos, porque se va disminuyendo paulatina y
progresivamente el nivel de quórum, y también sería lamentable tener que
suspender por tal motivo. Por eso les
ruego a todos los que están afuera, tengan a bien reincorporarse.
Seguidamente
tiene el uso de la palabra el Dr. Carlos Alberto González.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
ALBERTO GONZALEZ: Ciudadano Presidente,
ciudadanos Convencionales: he hecho perder tiempo buscando el micrófono. No tengo, a todo lo que se ha dicho, no tengo
nada nuevo que aportar. Creo que no se
debe hablar en ese caso, y no lo hago.
Gracias.
APLAUSOS...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el Convencional Cayo Gwynn.
CIUDADANO CONVENCIONAL CAYO
GWYNN SAFSTRAND: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales: seré breve sólo para
adherirme a la propuesta de uno de los preopinantes en el sentido de que el
plazo para obtener la ciudadanía nacional paraguaya es muy corto, por lo tanto
propongo concretamente, ciudadano Presidente, que el plazo mínimo para obtener
la ciudadanía paraguaya sea por lo menos de 5 años. Esto lo digo, ciudadano Presidente, al solo
efecto de que si tenemos un corto tiempo para tomar la ciudadanía nacional
estaríamos dando oportunidad a cualquier ciudadano del mundo que venga a tomar
nuestra ciudadanía y por lo tanto creo que cualquiera que quiera obtener esta
ciudadanía en primer lugar tendría que por lo menos saber sus costumbres, saber
qué es lo que se tiene acá dentro del país y una vez que sepa en totalidad y
quede consciente de optar por la ciudadanía nacional, entonces ahí se le puede
conceder. Tengo entendido que los 5 años
por lo menos sería el mínimo para que estos ciudadanos puedan saber la
costumbre nuestra y por ese medio puedan optar nuestra ciudadanía. Nada más, ciudadano Presidente. Muchas gracias.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias,
ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Oscar Paciello.
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO: Muchas gracias ciudadano Presidente.
Ciudadano
Presidente: creo que el artículo tal
cual ha sido radicado debe mantenerse.
Concuerdo con el Dr. Martínez y con algunos ilustrados preopinantes en
la permisividad que actualmente existe en materia de nacionalización, pero ello
se debe en primer lugar a los términos de que aquí ni por asomo se cumple con
la Ley 471 de migraciones.
El
que llega acá, automáticamente es radicado; no tenemos el más mínimo control de
frontera y, aunque le pongamos 20 años, desde que no hay controles, de manera
que me van a aparecer personas que llegaron ayer como si lo hubieran hecho 20
años atrás. Creo que ahí no radica el
problema, sino en que efectivamente funcionen los organismos de seguridad del
Estado y en esas condiciones se acuerde radicación a la persona que
efectivamente viene a trabajar, porque acá se le da permiso de entrada al
primero que pasa, lo cual no es apropiado entra la gente con visa de turista y
después nadie le hace ningún seguimiento.
Yo no conozco ningún caso en que en este país se haya expulsado a
alguien porque ha trascurrido el término que le dieron para permanecer en el
país en condición de turista.
De
manera que el problema no radica en el texto constitucional, puesto que aquí,
en la Argentina, simplemente hay mucha más facilidades aparentemente para
nacionalizarse. Allí se exige un plazo
de 2 años y la nacionalización la otorga un juez federal, ni siquiera tiene que
ir a la Corte como es nuestro caso, que acaso sea la causa por la cual se dan
estas corruptelas porque en la Corte, como es una responsabilidad compartida
por varios miembros, normalmente nadie examina estos expedientes, sino que, si
firmó el Presidente que a lo mejor le trajo el secretario, ya firman todos los
demás y acá nadie...
INTERRUPCION...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Por favor, ciudadanos Convencionales, se le
ruega prestar atención al orador, tema tan importante próximo a definirse, se
les ruega a todos...
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO: Acá nadie revisa nada, ciudadano Presidente;
si en forma efectiva quedara jurídicamente probado que quienes solicitan
nacionalización ejercen una industria, arte o profesión, no tendríamos
problemas, porque la persona que ejerce una industria, arte o profesión está
definitivamente arraigada en un país.
Pero como esa es una probanza que normalmente no se da, ni siquiera la
posesión del idioma, resulta que entonces... aunque le pongamos la fecha de
antigüedad no va a funcionar, ciudadano Presidente.
Creo
que por eso este nuestro artículo tiene un justo término medio y tres años es
un tiempo más que suficiente para que si una persona manifiesta realmente esa
intención, se nacionalice. Hay más. Se dan casos, ciudadano Presidente, en que al
país realmente puede convenir la nacionalización de una persona, cuando como en
otras épocas se fomentaban migraciones hacia el país de personas y elementos
calificados. Voy a poner un ejemplo muy
claro. En el Uruguay, ¿cómo se formó la
sinfónica uruguaya del Sodre?
Sencillamente fueron, contrataron profesores que no debían pasar más de
30 años y solteros en sus países de orígen.
Lógico, vinieron; al cabo de 1 año se casaron todos y empezaron a
ejercer y hoy por hoy tienen una excelente sinfónica con todos ciudadanos
nacionalizados, o sea, que esto del término es muy relativo, ciudadano
Presidente. Por eso ante la disparidad
de criterios aquí enunciadas, yo no tengo otra alternativa que solicitar, como
lo hago, la aprobación del texto tal cual proviene de la Comisión Redactora.
Aparte
de que el requisito de la capacidad para el ejercicio de un acto jurídico tan
trascendente como la nacionalización cae por su propio peso, no podemos
legislar en función a excepciones.
Muchas gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano Convencional.
La
próxima, que es la penúltima, es la ciudadana Convencional Nilda de Marín,
tiene el uso de la palabra.
CIUDADANA CONVENCIONAL NILDA DE
MARIN: Gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: estoy viendo que en la
Constitución de 1967, en el Artículo 27, inciso 1), la radicación de tres años
es la condición para acceder a la naturalización. En el inciso 2), dice: ejercicio continuado de alguna profesión,
oficio, ciencia, arte, o industria en el país, y el inciso 3, buena
conducta. Si bien es cierto que nuestro
país necesita del concurso de profesionales extranjeros con un oficio
calificado o que ejerza la ciencia, arte y más aún industria en el país, porque
nos daría mano de obra que bien hace falta, sin embargo, tres años me parece
muy corto dado que no precisamente estos profesionales o el concurso de este
tipo de personas extranjeras es lo que abunda en nuestro país, más bien la
cantidad de extranjeros que están en nuestro país son del tipo de los
orientales a quienes se refería un preopinante y en ese sentido los orientales
sobre todo, no hubiera querido mencionarlos, están en forma indiscriminada en
cantidad acá.
No
nos ayuda en absoluto trayendo una profesión.
Generalmente son aventureros, comerciantes, que no solamente vienen a
restar trabajo y oportunidad de trabajar a nuestros compatriotas sino que
vienen a explotar económicamente en base a una obra, mano de obra barata. En este momento, no solamente el Ministerio
de Justicia y Trabajo está dedicando atención a otros problemas sino que específicamente
tiene que estar destacando inspectores en Bonanza y en los centros comerciales
abarrotados de estos extranjeros para
estar constatando el pago por debajo del salario mínimo legal a sus
empleados paraguayos.
Entonces,
a mi me parece que nosotros tenemos que precautelar y salvaguardar un poco, por
lo menos, la dignidad y el respeto que se merecen nuestros connacionales. Estos vienen no solamente a usar el Paraguay
como corredor o trampolín para saltar al Canadá o a los Estados Unidos, sino
que vienen a expoliarnos de nuestro dinero, a restarnos posibilidades de
trabajo, y en tercer lugar, a estafar prácticamente a los paraguayos que están
trabajando con ellos y sin ningún respeto a nuestra Ley. De paso también esto promueve la corruptela, porque
sabemos muy bien que es muy cierto, esto que dijo el preopinante, el
Convencional Paciello, pero si él mismo está diciendo que en el Uruguay por un
contrato X, han venido los alemanes y ahora tienen una orquesta de Cámara de
primer nivel, a mí me parece que con este futuro nuevo, nosotros queremos
instaurar en nuestro país, ya no tenemos que dar ahora nosotros, por derrotados
en la aplicación de la Ley, a mí me parece que tenemos que aspirar también a la
dignificación de nuestro país en base al cumplimiento de la Ley y sobre todo
ahora que vamos a tener... aspiramos a la descentralización, yo creo que las
autoridades departamentales tienen que poner demasiado celo en el cumplimiento
de la Ley, porque de lo contrario cada departamento va a ir empobreciéndose en
base al concurso de estos comerciantes aventureros, resaltando mano de obra
bien pagada a los habitantes de cada departamento, embolsándose el dinero y
permitiendo que estos extranjeros en estas condiciones se embolsen dinero
paraguayo y lleven después a invertir en otro país.
A
mi me parece que tenemos nosotros que apostar aquí por el celo en el
cumplimiento de la Ley. Entonces desde
ese punto de vista sean dos, sean tres, cualquiera el tiempo que se ponga acá
si vamos a partir ya desde el hecho de que no se va a cumplir la Ley, entonces
no hay que poner ni siquiera el más mínimo plazo.
En
tercer lugar, el inciso 3) establece buena conducta, a mí me parece que la
inauguración de las balaceras por las calles de Asunción trajeron justamente estos
orientales, buena conducta precisamente no observan estos ciudadanos; entonces
a mí me parece, ciudadano Presidente, justificada la propuesta del Convencional
Diógenes Martínez, de que por lo menos se establezcan 5 años para la
naturalización de los extranjeros. Los
que vienen de buena fe a prestar su concurso por nuestro desarrollo y progreso,
desde luego, 5 años es muy corto para ese tipo de personas porque saben que un
trabajo sacrificado y honesto lleva su tiempo para rendir frutos y vale la pena
sacrificarse por ese tiempo para adquirir la naturalización en nuestro país.
Por
eso, no estoy de acuerdo con la propuesta integral de la propuesta de la
Comisión Redactora y propongo claramente que se vote inciso por inciso; que la
moción de la Comisión Redactora, el Despacho de Comisión Redactora se vote
inciso por inciso y que sea 5 años el mínimo que se establezca para acceder a
la naturalización a los extranjeros que vengan a nuestro país. Gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadana Convencional.
Antes
de cederle la palabra al último orador, solamente quisiera hacer una aclaración
muy saludable con todo respeto y particularmente para la Comisión de
Estilo. La palabra o la denominación de
orientales es discriminativo, si se va a circunscribir a Coreanos y Chinos,
porque también orientales son los del Medio Oriente y los del Cercano Oriente,
Arabes, Israelíes, así que tendríamos que llamar por sus respectivos nombres. Una aclaración muy oportuna.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Eusebio Ramón Ayala, con lo cual
clausuramos la lista y pasaremos a votación.
CIUDADANO CONVENCIONAL EUSEBIO
RAMON AYALA:
Ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales: había propuesto la supresión del artículo del
inciso 1), respecto a la mayoría de edad y he escuchado algunas
fundamentaciones en contra. Sin embargo,
creo que hemos redactado esta Constitución con espíritu amplio. Tal es el caso
que en el Artículo 39, cuando hablamos del derecho al tránsito y a la
residencia, decimos que el ingreso de los extranjeros sin radicación definitiva
en el país será regulado por la Ley y considerando las Convenciones
Internacionales sobre la materia, y seguidamente garantizamos la presencia de
los extranjeros con radicación definitiva, al decir que ellos podrán ser
obligados a abandonar el Paraguay solamente en virtud de sentencia judicial.
Otro
de los argumentos que hemos escuchado es en cuanto a la política de
inmigración, pero yo creo que esa es una cuestión de hecho que no podemos
solucionar a través de una Constitución.
Respecto
a que es un acto personalísimo que uno tiene que tener discernimiento,
libertad, intención, o voluntad, etc, creo que los hijos de los extranjeros
radicados en el país tienen, me parece, deben tener, por lo menos, la misma
capacidad o el discernimiento de aquellos hijos de madre o padre paraguayos
nacidos en el extranjero cuando aquellos se radiquen en la República en forma
permanente y que se les permite que a partir de los 18 años puedan ellos mismos
solos, manifestar su intención de ser paraguayos naturales y antes de esa edad
por sus representantes legales. Creo que
estamos haciendo una discriminación respecto a los menores; además, en el
inciso 4), cuando hablamos de la nacionalidad natural, decimos que tienen
nacionalidad natural los infantes recogidos en el territorio de la República de
padres ignorados, es decir, entonces llegamos a la paradoja de que aquellos que
tienen padres acá y que quieren que sus hijos tengan una nacionalidad y sean
menores, no lo pueden, pero, sin embargo, a aquellos infantes recogidos en el
país le otorgamos sin tener en cuenta su consentimiento, su libertad, etc, la
nacionalidad paraguaya natural y no simplemente la naturalización. Quería puntualizar
estas cuestiones, ciudadano Presidente.
Yo
apoyo la moción de la compañera preopinante en el sentido de que se vote
párrafo por párrafo para que se pueda dar lugar a que uno pueda votar en el
inciso 1) por la supresión o no del artículo y respecto al Artículo 2°,
donde dice radicación mínima de 3 años en el territorio nacional que hubo ya
dos preopinantes que mocionaron, yo apoyo esa idea y no estoy en contra como
miembro de la Comisión Redactora. Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Una moción de privilegio, ciudadano
Presidente....
CIUDADANO PRESIDENTE: Terminó la lista de oradores. Hay una moción de privilegio.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Armando Espínola.
CIUDADANO CONVENCIONAL ARMANDO
ESPINOLA:
Ciudadano Presidente: lamentablemente
algunos de los que me precedieron en el uso de la palabra han incurrido en
consideraciones de corte racista, discriminatorio y quiero mocionar que en
desagravio a todas esas consideraciones nos reiteremos que en este país y en
esta Convención no existe ningún tipo de discriminación de ningún origen...
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Ha terminado la lista de oradores. La presidencia va a llevar a votación el único
proyecto existente que es el Proyecto Base, de la Comisión Redactora, no
corresponde que se haga párrafo por párrafo porque no existe otro proyecto
modificatorio. Todas las propuestas han
sido solamente expresiones de deseo que no se han formalizado en su oportunidad
a través de los 30 minutos antes de la sesión como lo estatuye el Reglamento,
de manera que la presidencia va a llevar a votación el texto íntegro así como
está de la propuesta N°
1, Proyecto Base. No existe otra
opción.
Los
que estén de acuerdo, se servirán levantar la mano. Mayoría.
Queda
aprobado el texto del Artículo 142.
Ahora se pasa al tratamiento del otro Artículo 143.
APROBADO
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
143. Propuesta Unica - Proyecto
Base
Titulo: "De
la Nacionalidad Múltiple"
Texto: "La
nacionalidad múltiple podrá ser admitida mediante tratado
internacional o por reciprocidad de rango constitucional entre los Estados del
natural de origen y del de adopción".
CIUDADANO PRESIDENTE: Propuesta Unica. No existe observación. La presidencia va a llevar a votación.
Quienes
estén de acuerdo, se servirán levantar la mano.
Mayoría.
Queda
aprobado el texto del Artículo 143.
APROBADO
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
144 Propuesta Unica - Proyecto
Base
Titulo:
"De la Pérdida de la Nacionalidad"
Texto: "Los
paraguayos naturalizados pierden la nacionalidad por la ausencia injustificada
en la República por más de 3 años, declarada judicialmente o por la adquisición
voluntaria de otra nacionalidad".
CIUDADANO PRESIDENTE: Proyecto único sobre el que no existe
observación. La presidencia va a llevar
a votación.
Quienes
estén por su aprobación, se servirán levantar la mano. Mayoría.
Queda
aprobado el artículo en cuestión.
APROBADO
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
145 Propuesta Unica - Proyecto Base
Titulo: "De
la Nacionalidad Honoraria"
Texto: "Los
extranjeros que hubiesen prestado servicios eminentes a la República podrán ser
honrados por Ley del Congreso con la nacionalidad honoraria".
CIUDADANO PRESIDENTE: Proyecto único. No existe observación. La presidencia lleva a votación.
Quienes
estén de acuerdo, se servirán levantar la mano.
Mayoría.
Queda
aprobado, en consecuencia, el Artículo 145.
APROBADO
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
146, Propuesta Unica - Proyecto Base
Titulo:
"De la Ciudadanía"
Texto: Son ciudadanos:
1- Las personas de nacionalidad paraguaya
natural desde los 18 años de edad.
2- Las personas de nacionalidad
paraguaya por naturalización después de 2 años de haberla obtenido.
CIUDADANO PRESIDENTE: Con el agregado que... es un error material
no existe otro proyecto alternativo; sí existe alguna observación. La presidencia va a llevar a votación el
proyecto único.
Quienes
estén de acuerdo, se servirán levantar la mano.
Mayoría.
Queda
aprobado el Artículo 146.
APROBADO
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
147 Propuesta Unica - Proyecto
Base
Titulo: "De
la Suspensión del Ejercicio de la Ciudadanía"
Texto: "Se suspende
el ejercicio de la ciudadanía:
1- Por adopción de otra
nacionalidad, salvo reciprocidad internacional.
2- Por incapacidad declarada en
juicio que impida obrar libremente y con discernimiento.
3- Por hallarse cumpliendo condena judicial, con
pena privativa de libertad.
La suspensión de la ciudadanía concluye al cesar
legalmente la causa que la determina".
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración el proyecto único. Si no hay oposición, la presidencia lleva a
votación.
Quienes
estén de acuerdo, se servirán levantar la mano.
Mayoría.
Queda
aprobado el texto del 147.
APROBADO
CIUDADANO
SECRETARIO: Artículo
148. Existen 2 propuestas.
PROYECTO BASE: Propuesta N°
1.
Titulo:
"De la Competencia Exclusiva del Poder
Judicial"
Texto: "La Ley
establecerá las normas sobre adquisición y adopción de la nacionalidad así como
sobre la suspensión de la ciudadanía. El
Poder Judicial tendrá competencia exclusiva para entender en estos casos".
Propuesta
N° 2. Proyecto propuesto por el Convencional
Marciano Torales.
Titulo:
"De la Competencia Exclusiva del Poder Judicial"
Texto: "La Ley establecerá las normas sobre
adquisición, recuperación, es la innovación de la propuesta y opción de la
nacionalidad así como sobre la suspensión de la ciudadanía". El resto del proyecto es igual al Proyecto
Base.
CIUDADANO PRESIDENTE: A consideración de la Plenaria.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Oscar Paciello.
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO: Encuentro, ciudadano Presidente, muy oportuna
la sugerencia del Convencional Marciano Torales. He visto, por ejemplo, en esta materia, y
concretamente, en la Ley de Ciudadanía Argentina, que la persona que se
encuentra en esta situación, tiene que cumplir ciertos trámites y requisitos
para volver a ser incluida en el Registro Cívico Nacional, o cosa similar. Entonces, pienso que, efectivamente, la ley
debe prever que aquella persona que está excluida en su condición de ciudadano
encuentre un mecanismo para recuperar la ciudadanía, y, en ese sentido, me
parece muy sana la previsión, y, si no hay alguna objeción de algún otro
compañero de la Comisión Redactora, creo que bien se puede dar por admitida
esta observación y, en su consecuencia, hacer despacho único de esto y llevar,
inmediatamente, el artículo a votación.
Muchas gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Si
ningún miembro de la Comisión Redactora se opone, esto también sería objeto de la Comisión de Estilo,
en lugar de recuperación, posiblemente, sea readquisición, porque se adquiere
la ciudadanía. Y pasará a Estilo,
entonces.
En
consecuencia, la Presidencia lleva a votación inmediata.
Quienes
estén de acuerdo con el Proyecto de la Comisión, se servirán levantar la
mano. Aprobado por mayoría.
APROBADO.
Ciudadanos
Convencionales: en vista de que el
trabajo ha sido sumamente fructífero y estamos llegando al mediodía, la
Presidencia se permite pasar a un cuarto intermedio hasta la hora 14:00, de
manera que pedimos que, por favor, sean puntuales, y se agradece la
colaboración de todos los Convencionales.
A la hora 14:30.
Se
levanta la sesión.
CUARTO INTERMEDIO.
CIUDADANO PRESIDENTE: Honorable Convención, ciudadanos
Convencionales: habiendo quórum de más
de ciento diez Convencionales, se reanuda la sesión.
Antes
de pasar a la prosecución del estudio en particular del texto constitucional,
la Presidencia advierte que se encuentra en la sala el ciudadano Convencional
Miguel Angel Rodas Ruiz Díaz, que es suplente, y que en el día de la fecha se
otorgó permiso, por el tiempo que resta a la Convención, al ciudadano
Convencional Emilio Cubas Grau. En
consecuencia, el ciudadano Convencional Miguel Angel Rodas Ruiz va a prestar
juramento ante esta Magna Asamblea, por lo que la Presidencia ruega a los
presentes ponerse de pie.
Rogamos
silencio.
Ciudadano
Convencional Miguel Angel Rodas Ruiz Díaz, ¿juraís ante Dios y el pueblo
desempeñar con fidelidad y patriotismo el cargo de Convencional de la
República?
CIUDADANO CONVENCIONAL MIGUEL
ANGEL RODAS RUIZ DIAZ: Sí, lo juro.
CIUDADANO PRESIDENTE: Si así no lo hiciéreis, Dios y el pueblo
os lo demanden. Muchas gracias.
APLAUSOS...
Ciudadanos
Convencionales: ha terminado el Capítulo
referente a la Nacionalidad y la Ciudadanía, de manera que, antes de proseguir
el siguiente Capítulo IV, la Presidencia ofrece la palabra a quien desee
hacerlo.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Federico Callizo.
CIUDADANO
CONVENCIONAL FEDERICO CALLIZO: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales: en representación de la
bancada del P.L.R.A., Partido Liberal Radical Auténtico, vengo a solicitar la
reconsideración del Artículo 119.
No
creo que sea oportuno recordar los antecedentes de cómo se viene en plantear
esta reconsideración. No creo que sea
conveniente abundar en mayores detalles.
Creo que todos los Convencionales, están contestes en aceptar la
posibilidad de reconsiderar este artículo, artículo que, por lo demás, encierra
una norma sumamente importante para que los ciudadanos Convencionales puedan
expresar sus puntos de vista sobre el mismo y llegar, posteriormente, a una
conclusión que sea, realmente, la más democrática, la que más convenga a la
Constitución que se va a forjar y al país que está expectante ante lo que
resuelva esta Convención.
Concretamente,
ciudadano Presidente, planteo la reconsideración del mencionado Artículo.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Siendo
una moción de reconsideración, la Presidencia va a hacer dar lectura, por
Secretaría, al artículo pertinente del Reglamento, Artículo 85.
CIUDADANO SECRETARIO: Artículo 85.-
Moción de Reconsideración: Es
moción de reconsideración toda propuesta que tenga por objeto rever una
resolución de la Convención, sea en general o en particular. Las mociones de reconsideración se tratarán
inmediatamente después de planteadas y requerirán para su aprobación mayoría de
2/3 de votos, no pudiendo repetirse en caso alguno.
CIUDADANO PRESIDENTE: En consecuencia, la Presidencia va a llevar a
votación el pedido de reconsideración como establece el Reglamento y, al mismo
tiempo, recuerda que la misma debe tener mayoría de 2/3 de votos presentes.
Tiene
la palabra, para referirse al pedido de reconsideración, el ciudadano
Convencional José Ismael Echagüe.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
ISMAEL ECHAGUE: No,
Presidente. Quiero...
INTERRUPCION...
CIUDADANO PRESIDENTE: Entonces, la reconsideración se tratará
inmediatamente.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE ISMAEL
ECHAGUE: Presidente:
pido la palabra.
CIUDADANO PRESIDENTE: Quienes estén...
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
ISMAEL ECHAGUE:
Presidente: pido la palabra, por
favor.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra, ciudadano Convencional. Se
la había ofrecido anteriormente. Es para
que se expida si está de acuerdo o no con la reconsideración, nada más.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
ISMAEL ECHAGUE:
Ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales: quiero oponerme a la reconsideración del
Artículo 119.
Ciudadano
Presidente: quiero creer que se afirma
con esto lo que se está diciendo en los pasillos de esta Convención, desde el
inicio del mismo, ciudadano Presidente, que esta Convención no llegará a su
término y que quedará vigente, otra vez, la Constitución de 1967.
Ciudadano
Presidente: me opongo a la
reconsideración del Artículo 119.
Gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra el ciudadano Convencional
Oscar Paciello.
Se
advierte que la reconsideración no estriba todavía en ninguna discusión sobre
el fondo de la cuestión.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Oscar Paciello.
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO: Ciudadano Presidente: con prescindencia de algunas manifestaciones
aisladas, la cuestión ha sido considerada en el seno de la bancada de la
Asociación Nacional Republicana y, disciplinadamente, fiel a sus tradiciones y
sus principios, ha acordado cuanto su líder ha asignado en un documento
solemne. De manera que, cualesquiera que
fueran las consecuencia, cualesquiera que fueren las palabras de pasillos y
extra pasillos, acá estamos para honrar a nuestra palabra, ciudadano
Presidente, y solicito se lleve a votación, de inmediato, la cuestión. Muchas gracias.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: La Presidencia va a llevar a votación
inmediatamente el pedido de reconsideración.
Quienes
estén de acuerdo con el pedido de reconsideración, se servirán levantar la
mano. Mayoría de 2/3. Reúne la mayoría.
En
consecuencia, se ha hecho lugar a la reconsideración y tienen derecho los
ciudadanos Convencionales a inscribirse como oradores sobre el tema. El tema en discusión es el Artículo 119.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional José Nicolás Morínigo.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
NICOLAS MORINIGO: No.
Era sobre el tema anterior que ya fue considerado.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra el ciudadano Convencional
Benítez Florentín. No está.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Domingo Laíno.
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO: Ciudadano Presidente...
INTERRUPCION...
CIUDADANO PRESIDENTE: Se ruega a los ciudadanos Convencionales
prestar atención y poner un poco de tranquilidad en esta etapa en que vamos a
escuchar atentamente a los oradores, para luego definir la situación.
Tiene
la palabra. Prosiga ciudadano
Convencional.
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO: Gracias, ciudadano Presidente.
He
sostenido el criterio invariable de que los miembros de la Comisión Redactora
debieran tener prioridad para analizar, opinar y discutir en la plenaria,
porque ellos, antes, ya habrían estudiado, profundizado, analizado, masticado
los proyectos presentados ante el plenario.
Pero esta vez, ciudadano Presidente, quisiera romper con esa regla,
porque el tema que se discute hace relación a cuestiones fundamentales. Una cuestión fundamental: el voto, y otra cuestión fundamental:
paraguayos radicados fuera del territorio nacional.
Hay
veces, ciudadano Presidente, en que el hombre habla analizando, razonando. Habla con la cabeza. Esta vez, yo diría que mi reflexión rebasa el
análisis, rebasa la cabeza y llega hasta el sentimiento, hasta el corazón,
profundo, porque estoy hablando como desterrado. Y aquí quisiera recordar, especialmente, al Convencional
Luis Alfonso Resck, con quien compartí el destierro. Destierro, arrancarlo al hombre de sus
raíces, de su tierra por la fuerza y ponerlo fuera del territorio
nacional. Y allí, con el Convencional
Resck, trabajamos, visitamos, alentamos a los compatriotas. Conocemos el mapa del exilio político y
económico paraguayo, conocemos a los compatriotas de Posadas. Ellos son Colorados, Liberales, Febreristas,
Independientes, Democristianos, ex militares.
Conocemos Overá, visitamos Jardín de América, recorrimos Guanda,
llegamos hasta puerto Yguazú; Misiones Argentina está regado de paraguayos;
mujeres, y hombres, y niños, y jóvenes.
Visitamos también Clorinda, y Formosa, y toda esa provincia; el Chaco,
provincia Argentina, Resistencia, multitud de paraguayos. Más allá, Buenos Aires, gran Buenos Aires,
donde están radicadas también tantas familias paraguayas. Ellos no son de la clase A, no son los de
arriba; son plomeros, carpinteros, piseros, albañiles, pintores, hombres
laboriosos, trabajadores manuales.
Visitamos más allá de América Latina.
Llegamos a Nueva York y allí también encontramos a un gran contingente
de paraguayos. Fuimos a sus
apartamentos, sufrimos con ellos la angustia de ser perseguidos por no tener
los documentos legalizados. A estos
paraguayos no podemos negarles el derecho a votar, en un texto de la
Constitución Nacional, ciudadano Presidente.
Es
imposible admitir esta triste realidad que pareciera estar viviendo la
Convención Constituyente, ahora mismo, en Paraguay. Sería una mancha negra, una mancha penosa en
la Constitución de 1992.
Ciudadano
Presidente: la pregunta crucial creo que radica en esta cuestión fundamental,
¿por qué estos paraguayos fueron al exterior y viven en el exterior? Y yo diría que en el pasado cercano, muchos
fuimos desterrados porque no tolerábamos la dictadura, la opresión, la
arbitrariedad en nuestro país. Por eso
fuimos los expulsados políticos. De ahí
recuerdo a mi gran amigo Luis Alfonso Resck, de la Democracia Cristiana, de
intachable conducta, un peregrino de la libertad. Y otros, fueron expulsados por el modelo
económico injusto. Un modelo económico
que no otorga posibilidad de trabajo a nuestros conciudadanos. Ellos fueron expulsados por las muchas cosas
malas que se hizo dentro del gobierno nacional y en relación a la política
económica y social. Fueron expulsados
por este mecanismo económico injusto, que, muchas veces, estaba siempre al
servicio de los poderosos y nunca al servicio de los más necesitados. Y dentro de este contexto, debo referirme,
principalmente, a lo que mucho se mencionó aquí, ciudadano Presidente, porque
tiene una relación directa. Alguien que
está a mi derecha, no lo menciono, decía que aquí se verificó una gran Reforma
Agraria, una Reforma Agraria Integral.
Yo le diría que sí. Tanto abarcó
esa Reforma Agraria, que al propio dictador nicaragüense Anastasio Somoza
Debaile, a un dólar por hectárea, se le vendió un gran latifundio del
territorio nacional. Ocho mil hectáreas
a su propio nombre, otras ocho mil hectáreas a nombre de su ex ministro de
Hacienda, y ocho mil hectáreas más a un representante de su guardia de
seguridad, testaferros ambos de Anastasio Somoza. Veinticuatro mil hectáreas para el dictador
nicaragüense. Realmente, las medidas de
Reforma Agraria, llegaron muy lejos.
Pero
hay más, ciudadano Presidente. No sé
quién fue. No sé si el líder del bloque
en mayoría decía que, bastaba revisar la zona de Encarnación hasta Ciudad del Este,
para admirar todo lo que se verificó en esa región territorial, que parecía no
ser Paraguay esa región, señalando con ello que la Reforma Agraria tuvo un
suceso, tuvo un gran éxito. Y estoy de
acuerdo, ciudadano Presidente. No parece
Paraguay. El territorio, dicen que es
paraguayo, pero sus propietarios ya no son nacidos en este país. Se habla japonés, inglés, portugués, se habla
cualquier lengua, menos nuestra lengua. Para
ellos sí se realizó una gran Reforma Agraria.
Reforma Agraria, tiene por objetivo elevar la calidad de vida, el
ingreso per cápita, y creo que estos prósperos que viven entre Encarnación y
Ciudad del Este, realmente, están viviendo momentos de prosperidad, momentos de
progreso, momentos de desarrollo. Pero
esta Reforma Agraria se realizó, no precisamente para los hijos de esta patria,
sino para aquellos nacidos en otros países, en otras latitudes. Los hijos de esta patria, en la medida que
ingresan aquellos, son expulsados del país.
Reforma Agraria para los no nacidos dentro del territorio nacional, y la
antirreforma para nuestros conciudadanos paraguayos. Y el precio fue la expulsión. Buscar un puesto de trabajo en Posadas, en
Overá, en la Argentina, en Resistencia, en el Chaco, en Clorinda, en Formosa,
en donde sea.
Ciudadano
Presidente: creo que estas son
realidades, son verdades inobjetables.
Más, aquí mismo tengo un testimonio, todavía más elocuente y evidente: la Contraloría Financiera de la Nación
publica un documento muy importante que dice:
"La Contraloría Financiera de la Nación informó al Juez Nelson Mora
respecto a serias irregularidades constatadas en dependencias del IBR,
existencia de planilleros, concesión de varias hectáreas de tierra a personas
que no se dedican a agricultura y pérdida de varios millones de dólares en la
época del señor Juan Manuel Frutos".
Y aquí están las fotos de los sujetos de la Reforma Agraria. Lo veo a Carlos Podestá, robusto, gordo. No parece un campesino. Lo veo a José Apleyard...
INTERRUPCION...
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Moción, ciudadano Presidente.
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO: ...con un rostro muñecoide, que no aparenta
ser un campesino necesitado. Aparecen el
General Johanssen y el General Clebs.
INTERRUPCION...
CIUDADANO PRESIDENTE: Por favor, si escuchamos al orador.
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO: ...y otros tantos, demostrando que,
efectivamente...
CIUDADANO PRESIDENTE: Ciudadano Laíno, la Presidencia también...
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO:
...aquí la Reforma Agraria...
CIUDADANO PRESIDENTE:
Ciudadano Convencional...
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO:
... no se realizó y fue el motivo de la expulsión de tantos paraguayos que
había en el exterior....
CIUDADANO PRESIDENTE:
Ciudadano Convencional...
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO:
...y a esos hombres del exterior, nosotros no le podemos privar de ejercer...
CIUDADANO PRESIDENTE:
Ciudadano Convencional: una interrupción de la Presidencia, por favor.
Nos
gustaría que se limite al tema en cuestión, fundamentalmente, y a evitar las
alusiones personales a fin de evitar cualquier susceptibilidad que pueda
irritarnos y llevarnos, otra vez, a un impasse innecesario. Yo le agradezco su colaboración.
Prosiga
en el uso de la palabra.
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO:
Comprendo, ciudadano Presidente.
Así
lo haré. Sólo quise vincular nuestro
modelo económico injusto que ha expulsado, por ese motivo, a tantos paraguayos
que viven en el exterior. Pero voy a
señalar, ciudadano Presidente, que en dictadura importan las botas y, en
democracia, importan los votos. Estamos
tratando un tema referente al voto de conciudadanos que viven fuera del país.
En
democracia, el poder del ciudadano se expresa en el voto. El voto adquiere un supremo valor y, por
ello, ciudadano Presidente, desde el texto constitucional no podríamos, de
ninguna manera, privar a conciudadanos que viven fuera del país, a ejercer
el...
INTERRUPCION...
CIUDADANO PRESIDENTE: Orden en la sala para escuchar al orador.
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO: Se ha dicho, ciudadano Presidente, que estos
conciudadanos que viven en el exterior no contribuyen económicamente para la
nación paraguaya. Quiero que pasen
revista a zonas y a regiones de Caraguatay, de Alfonso Loma, Alfonso Tranquera,
1° de Marzo, San José
Obrero, van a ver tantas viviendas; tantas viviendas levantadas en esos
lugares, viviendas financiadas con dinero que llegan desde Norteamérica. Es el producto del trabajo de nuestros exiliados
económicos de aquella latitud. Mucha es
la contribución que ellos realizan. Una
vivienda ejerce un efecto multiplicador en el campo económico. Están los piseros, los pintores y tantas
otras actividades industriales que, evidentemente, trabajan para levantar una
vivienda. Ellos remesan dinero
permanentemente para sus hijos o sus padres, sus familias y hermanos. Ellos contribuyen, de manera poderosa
también, a la economía del país.
Otros
señalaban que aquellos exiliados políticos o económicos ejercitaban actividades
guerrilleras. Los han tratado de
subversivos y bandoleros. Ciudadano
Presidente, quiero señalarle que aquellos hombres jóvenes que estuvieron
alistados en las guerrillas del 59 y del 60, son Febreristas y Comunistas, pero
en un 90% afiliados al Partido Liberal Auténtico, integrantes y militantes del
Club Liberal Alón. Creo que es un
orgullo para los paraguayos haber tenido un puñado de jóvenes que ofrendaron
sus vidas para luchar por las libertades, para luchar por la democracia, para
luchar por los derechos humanos, ciudadano Presidente. Y, si nosotros negamos ese derecho a la
rebelión, a la que apelaron históricamente aquellos jóvenes paraguayos desde el
exterior, entonces, debiéramos negar también el derecho al General Rodríguez y
a ese puñado de militares que también apelaron a las armas para destituir al
tirano de la patria.
Ciudadano
Presidente: debemos ser justos. Es un momento histórico el momento que se
vive en esta Constituyente. No podemos
negar el voto a los ciudadanos paraguayo que viven en el exterior. Ellos no son ni subversivos, ellos no son ni
maleantes, ellos fueron patriotas que ofrendaron sus vidas para luchar por la
libertad y por la democracia. Ellos se
merecen nuestro respeto y, así como el General Rodríguez, creo yo, que escribió
una página con letras de bronce, primero, por su actitud, por su rebeldía, por
su gestión armada para derrocar a la dictadura, creo que Juan José Rotela,
aquel Capitán de la libertad perteneciente al Partido Liberal Radical Auténtico,
escribió varias páginas con letras de oro, porque ha sabido ofrendar su vida
por la libertad, por la democracia, por la justicia del Partido Liberal Radical
Auténtico. Muchas gracias, Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: La Presidencia, antes de ceder la palabra al
ciudadano Convencional Carlos Podestá, por haber sido aludido personalmente, se
va hacer el deber de que se lea, por Secretaría, el Artículo 10 del Reglamento,
para el buen gobierno y manejo de esta sesión.
CIUDADANO SECRETARIO: Artículo 10.-
Forma de hacer uso de la palabra y prohibiciones: El Convencional, al hacer uso de la palabra,
se dirigirá siempre al Presidente o a los Convencionales en general, y deberá
evitar, en lo posible, designar a estos por sus nombres. Las discusiones serán enteramente
libres. Quedan prohibidas las alusiones
irrespetuosas y ofensivas.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra el ciudadano Convencional
Carlos Podestá, por haber sido aludido.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
PODESTA: Gracias, ciudadano Presidente.
Honorable
Convención: el Convencional preopinante
está profundamente equivocado cuando, al aludirme, refiere a que en aquel
momento no era sujeto de la Reforma Agraria.
Está muy equivocado. Además,
cuando eso, era flaco.
APLAUSOS...
Ciudadano
Presidente: El Convencional Domingo
Laíno miente a esta Convención, como ha venido mintiendo a todo el país, cuando
afirma que a Somoza se le habría vendido tierra a un dólar la hectárea. En aquel momento, y para conocimiento de
todos, las tierras que fueron transferidas al grupo Somoza, a 700 kilómetros de
la Capital, en un lugar donde no existía una sola finca, se le había
transferido a 10 dólares la hectárea, que, posteriormente, después del
asesinato de Somoza, su grupo transfirió al precio de 4 dólares la hectárea al
Fondo Ganadero, donde existe hoy una estación experimental. El preopinante, en conclusión, es un gran
mentiroso. Muchas gracias.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE:
Tiene la palabra el ciudadano Convencional Juan Benítez Florentín.
CIUDADANO CONVENCIONAL JUAN
BENITEZ FLORENTIN: Gracias.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
agradezco, en primer lugar, la gentileza de la Presidencia de concederme
la palabra pese de no haber estado en el momento de estar inscripto.
Quiero,
ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales, hacer uso de la palabra, y lo
primero que diría es que me causa satisfacción que la mayoría de esta
Convención, que aprobara un artículo con el cual discrepamos democráticamente,
permitiera a través de un dialogo de la clase política, esta reconsideración.
Pienso que es un signo de cultura cívica la
posibilidad de que podamos, quienes no pudimos hacer uso de palabra en
oportunidad anterior, hacerlo en este momento para presentar algunos argumentos
y apelar a la razón.
Voy
a tratar de apelar a la razón. Es
posible que este discurso, estas palabras para un hombre pesimista puedan
llevar a la consideración de que es nada mas que el derecho al pataleo como se
dice vulgarmente, porque la cosa está sentenciada por 100, o mas votos. Pero yo
soy un hombre incorregible en mi esperanza en la razón, creo en el valor de la
palabra. Por algo, un evangelio tan
magnífico como el de San Juan, manifiesta que al principio era el verbo; creo en
el valor del verbo, creo en el valor de la razón y voy a hacer unas
meditaciones sobre todo para aquellos Convencionales del Partido Colorado que
votaron por un artículo que condiciona el derecho del voto a la residencia de
los paraguayos en el país.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales: la argumentación de fondo sobre este tema fue dado por el líder de la
bancada oficialista del Partido Colorado, el Convnecional Oscar Paciello,
perdón que lo cite. Hizo
fundamentalmente una argumentación de tipo jurídico, y yo diría mas, no
solamente jurídico, sino de derecho comparado. El líder de la bancada
oficialista orilló sistemáticamente a hacer todo tipo de consideración de otro
orden, de orden emotivo o de tipo político.
Considero
que debía centrarse el tema en consideraciones de tipo jurídico. Estoy recordando su exposición, y vino
preparado con una enorme cantidad de folletos, de fotocopias, impresionantes
por su erudición, para sostener que en casi todos los países de América Latina
y otros países de otros Continentes, los ciudadanos, para votar, deben seguir
en el país; pero lo que olvidó el líder de la Bancada Colorada es que todas sus
citas se refirieron al derecho positivo, a las leyes electorales, a Códigos
electorales, a leyes de segundo nivel. Muy excepcionalmente, quizás, citó
alguna que otra Constitución, pero en todo el derecho comparado Constitucional
y me estoy refiriendo a la razón de los Convencionales del Partido Colorado, no
vamos a encontrar disposiciones que proscriban expresamente, que prohíban
expresamente que nacionales que no residen en ese país, tengan el derecho al
voto. Todas ellas, en un porcentaje impresionante que no viene al caso citar,
todas ellas remiten la solución del problema del voto del ciudadano que radican
en el exterior a la ley electoral, a la ley del segundo nivel, porque, con
mucha sabiduría, este es un tema que no solamente depende de consideraciones de
tipo jurídico, sino también de tipo político, de tipo histórico y de tipo
fáctico.
La
posibilidad real de implementar la medida inclusive es un tema que solamente
puede ser considerado en los Parlamentos.
La norma constitucional, el derecho constitucional comparado no
prescribe, no se remite concretamente a normas especificas del voto de los
nacionales que radican en el exterior.
Eso es lo que nos dijo el líder de la bancada del Partido Colorado, que,
en una forma, tratando de impresionar, impresionó evidentemente; fue
impresionante la cantidad de citas mostrando inclusive las fotocopias, pero lo
que no dijo es que son todas citas de leyes electorales.
Partiendo
de esta base, ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales, lo sostenido por
el líder de la bancada oficialista viene precisamente a reforzar una tesis
contraria a la que el defiende, porque el líder de la bancada oficialista
defiende que en la propia constitución se esté legislando sobre una prohibición
expresa del voto de los conciudadanos que radican en el exterior, cuando que
todas sus citas estarían mas bien avalando la tesis de que este tema no debe
ser propio de la normativa constitucional, sino propio de la normativa de
segundo nivel, es decir, propio de la redacción de leyes que están a cargo del
Parlamento. Su propia argumentación va
en contra de la moción N°
1, del Proyecto Base que expresamente establece una prohibición de que los
paraguayos que radican en el exterior deben votar, primera argumentación.
Pero
además, ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales, nosotros venimos a
esta Convención Nacional Constituyente con un proceso pre electoral previo, en
que los Partidos Políticos y Movimientos sociales independientes hemos hecho
nuestra propuestas constitucionales a la ciudadanía y, en base a esas
propuestas constitucionales, en base a proyectos constitucionales, proyectos de
constitución que hemos aprobado orgánicamente, institucionalmente nuestro
Partido Político, hemos pedido el favor de la ciudadanía, a favor de nuestros
candidatos, a nuestro favor para que nos votaran en esta Constitución. Y el
Partido Colorado tuvo su proyecto de Constitución y así también el partido
Radical Auténtico y el Movimiento Constitución para Todos y en base a ese
proyecto, además de esto de trabajo en primer lugar y otras cosas que no vienen
al caso mencionar, pero supongo que en base a ese proyecto o a esos proyectos,
la ciudadanía concurrió el 1°de
diciembre a depositar el voto, y a través de ese voto, a establecer la forma
cualitativa y cuantitativa en que se compone esta constituyente. En base a ese
proyecto, supongo yo, el Partido Colorado, teniendo 122 Convencionales, habrá
convencido mucho mejor ese proyecto del Partido Colorado que el proyecto del
Partido Liberal Radical Auténtico y de Constitución para Todos, para establecer
esta relación cuantitativa que existe en este momento en esta Constituyente.
Y
el proyecto del Partido Colorado no establece en ningún momento una prohibición
a nivel constitucional que impida el voto de los paraguayos al exterior. El proyecto del Partido Colorado, votado por
el pueblo colorado a través de su constituyente, de su nomina de candidatos,
establece lisa y llanamente que son ciudadanos paraguayos aquellos que han
cumplido 18 años de edad, pero no proscribe expresamente el derecho de voto de
los conciudadanos del exterior, dejando el tema librado a la ley electoral. Por
lo tanto, parece una incongruencia, una inconsecuencia que, después del primero
de diciembre, se introduzca en el proyecto N°
1 una proscripción a nivel constitucional, que no fue sometida en ningún
momento en el proceso preelectoral al pueblo paraguayo en el momento en que se
elegían los representantes constituyentes.
Por
lo tanto, ese es un segundo razonamiento.
Es más, no hay proyecto constitucional de ningún Partido que haya
establecido ni expresa, ni tácitamente, ningún tipo de proscripción del voto de
los paraguayos del exterior. Pero hay más, ciudadano Presidente; sabemos cuál
es la situación histórica que ha atravesado nuestro país; tenemos cicatrices
que queremos definitivamente sanar en esta constituyente, cicatrices que datan
de nuestros conflictos de 1947 en adelante.
Y
resulta, ciudadano Presidente y honorable Convención, que precisamente por ese
motivo, para la sociedad paraguaya es
altamente sensible este tema de la reincorporación del éxodo paraguayo al exterior.
Y la clase política representada en el Parlamento Nacional ha sido sensible a
esta inquietud, y quiero recordar a los ciudadanos Convencionales del Partido
Colorado, porque confío que, pese a los murmullos, a algunos les llegará mi
palabra, sigo confiando en la razón.
Quiero
recordarles que en este Parlamento tan maltratado, tan desacreditado por
algunos sectores, se ha dado un paso positivo de toda la clase política,
liberales, colorados, febreristas representada en ese Parlamento, en el sentido
de dar una posibilidad en el futuro de que nuestros conciudadanos puedan votar,
y así en el Artículo 367 del Código Electoral, en el Parlamento, se establece
que por un ley especial se podrá reglamentar la factibilidad de que los
paraguayos del exterior puedan votar.
Ciertamente,
somos plenamente conscientes de que existe una serie de problemas de tipo
logístico, de tipo fáctico que hacen difícil, pero ese no es un tema
propiamente de una Constituyente; es un tema que debe ser resuelto en el
Parlamento, en las leyes electorales, de modo a ir avanzando en este proceso de
reincorporación política y social de los paraguayos que viven en el exterior.
Y
el Parlamento dio un paso positivo, y resulta realmente paradójico que en esta
Constituyente, en que debíamos haber dado un paso adelante, hayamos dado un
formidable retroceso, consagrando constitucionalmente una prohibición que no
tiene por qué tener nivel constitucional, y que significa incluso un retroceso
para el propio código electoral que hemos sancionado colorados, liberales y
febreristas, de común acuerdo en el Parlamento.
A
qué quiero llegar, ciudadanos Convencionales.
Que votaron a favor de esta reconsideración y que votaron por el
artículo, por el agregado que hiciera la Comisión Redactora al proyecto del
Partido Colorado, ese agregado que dice "siempre que tengan su residencia
en el país".
Quiero
llegar a la conclusión de que sería absolutamente incoherente, desde el punto
de vista jurídico, porque no es materia constitucional de acuerdo al derecho
comparado. Sería absolutamente incoherente desde el punto de vista político,
sería un retroceso a este proceso, sería imprudente establecer a nivel
constitucional, porque eso es lo que estamos debatiendo acá, una prohibición
que no estuvo en el proyecto del Partido Colorado, que no votó el pueblo
colorado, porque quiero hacerle una pregunta ¿qué hubiera sucedido, pudieran
tenido la misma cantidad de votos que tuvieron el 1°
de diciembre si hubieran dicho claramente en su proyecto constitucional de la
Junta de Gobierno, lo que dice el proyecto base, el proyecto N°
1, de la Comisión? Es una pregunta que
le hago en conciencia.
Ciudadano
Presidente: quiero decir que me dicen
que igual hubieran tenido, y es posible da la impresión que algunos consideran
que no se paga nunca un costo político, da la impresión. La soberbia hace que algunos crean que no se
pagan costos políticos, es posible. A
veces un slogan, a veces un número, una campaña con muchos dólares pueden
salvar algunos errores políticos.
Pero
quiero que mediten serenamente los Convencionales del Partido Colorado, si vale
la pena seguir apostando a costos políticos, por una cláusula constitucional
prohibitiva que no estuvo en su proyecto y que la prudencia tantas veces
invocada en esta Convención por el líder
de bancada del Partido Colorado, que la prudencia tantas veces invocada como en
el caso de la propiedad privada y la reforma agraria, no hacen mucho mas
conveniente que este tema no sea establecido, esta prohibición, esta
proscripción injusta, esta proscripción dolorosa no sea establecida a nivel
constitucional y se deja a la sabia y prudente negociación de la clase política
en el Parlamento, la resolución, la factibilidad en le futuro, inclusive en un
proceso de transición, no digo que inmediatamente pueda implementarse todo el
voto de todos los paraguayos del exterior. Pero la prudencia indica, la
prudencia invocada muchas veces por el líder de la bancada del Partido
Colorado, indica que es mucho mas saludable que la clase política, que está en
el Parlamento, donde tiene la mayoría del 66%en convivencia y en dialogo con la
oposición, pueda estudiar esta factibilidad y no establecer a nivel
constitucional esta dolorosa
proscripción.
Por
eso, ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales de la bancada mayoritaria
de esta Constituyente, sigo pensando, tengo fe en que algunos habrán de
meditar, no diría solamente del costo político sino sobre la necesidad de que
no establezcamos a nivel constitucional algo que no estuvo en la mente de los proyectistas
del Partido Colorado, algo que no fue
aprobado por el Partido Colorado y algo que la prudencia, la savia prudencia
indica que debe deferirse al Parlamento Nacional, tal como ya está establecido
en el artículo 367 del Código electoral.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales del Partido Colorado a quienes agradezco
la atención que me han brindado en esta exposición: tomando las palabras de Convencionales del
Partido Colorado que se han apoyado en el proyecto del Partido Colorado, pido
el apoyo para que se proscriba y no se vote en el Proyecto Base la disposición
que establece la condición de la residencia para el voto de los paraguayos que
se proscriba, que se evite esa
proscripción consecuente con lo que han manifestado Convencionales del
propio Partido Colorado y dejemos esto, ciudadano Presidente y ciudadanos
Convencionales , para que la ley electoral pueda resolver en la mejor forma
posible para dar posibilidad a los ciudadanos del exterior. Muchas gracias. Agradezco al Presidente por
la deferencia de concederme algunos minutos extra y espero que el verbo alguna
vez vuelva a campear por sus fueros en esta Constitución. Muchas gracias.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE:
Gracias, ciudadano Convencional.
Por
secretaria, la Presidencia va a dar lectura a la lista de oradores inscriptos.
Ciudadanos Convencionales Estanislao Llamas, Luis
Alfonso Resck, Emilio Camacho, Victor
Hugo Insaurralde, José Nicolás Morinigo, Evelio Fernández, Rodolfo Gill, Carlos
Mateo Balmelli, Juan Manuel Peralta, Benjamin Fernández, Federico Callizo,
Jorge Dos Santos, Domingo Benjamín, Ismael Echague, Victor Manuel NUñez, Luis
Garay,Eduardo Rodríguez, Miguel Abdon Saguier, Esteban Caballero, Carlos
Avalos, Aníbal Saucedo Rodas, Ricardo Franco Lanceta, Domingo Laíno, Timoteo
González Galván, Euclides Acevedo,Diogenes Martínez y Gonzalo Quintana,.
CIUDADANO PRESIDENTE:
La Presidencia declara cerrada la lista de
oradores.
Queda
cerrada la lista de oradores. La
Presidencia recuerda que los oradores tienen 10 minutos para su exposición y
que, dada la larga lista de oradores, tendremos que ser inflexibles en el
cumplimiento de dicho tiempo, por lo que ruega brevedad y concreción en cuanto
a los fundamentos.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Estanislao Llamas.
CIUDADANO CONVENCIONAL
ESTANISLAO LLAMAS: Ciudadano Presidente,
ciudadanos Convencionales: he escuchado
las palabras de los dos Convencionales que me precedieron en el uso de la
palabra.
No
han aportado nada ni jurídica ni constitucionalmente al tema que estamos
debatiendo, pero ha dicho uno de ellos que se fundaba en la razón. Me viene a la memoria el dicho de un viejo
constitucionalista que había manifestado alguna vez: "siempre me he preguntado por qué ha
fracasado la libertad en mi patria".
El mismo se había contestado "porque se le ha exigido a las
constituciones mas de lo debían dar, porque las veces que se redacta la
Constitución no se la cumple y se quiere aplicar la propia constitución en
beneficio de sus propios intereses".
Y
tercero, cuando se saca una Constitución de su cerebro se hace una Constitución
imaginaria para pueblos imaginarios, y cuando estos hombres se convierten en
Constituyentes, entonces, lo que gobierna es la imaginación y no la razón.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
el problema que nos está atrayendo aquí es una palabra
"radicado", el Artículo 119, y voy a tratar de hacer un análisis
jurídico y constitucional de esta palabra. En primer lugar, en el Artículo 117,
nosotros definimos al sufragio como un derecho, deber y una función pública.
Derecho que tiene cada ciudadano de expresar su voluntad a través del voto, y
al decir derecho estamos diciendo interés, señores. Y ese derecho y esa
obligación y esa función pública tiene una serie de procedimientos que deben
ser cumplidos para que pueda llegar a su finalidad, y nosotros aquí los
constituyentes le hemos rodeado a ese derecho de una garantía, y esa garantía,
señores, está en el artículo en la parte del poder judicial donde hemos creado
la justicia electoral, y le hemos dado las atribuciones que debe tener toda
estructura del Estado.
Ahora
bien, ciudadanos, ¿hasta dónde llega la soberanía de un Estado? Llega hasta su limite, señores; llega hasta
sus limites con otros países, y hasta donde puede llegar la jurisdicción de
esta justicia electoral: no puede ir mas
del Estado soberano, señores; debe tener su imperio, su jurisdicción dentro del
territorio nacional y nosotros estamos haciendo una Constitución para el
territorio paraguayo, ciudadanos, para que la justicia sirva acá, para que se
aplique la justicia acá, para que el ciudadano pueda gozar del bien común
dentro del territorio paraguayo, dentro del territorio nacional. Ahora bien, algunos, llevados quizás por un
sentimentalismo, también nosotros queremos que los paraguayos del exterior
expresen por medio del voto su opinión.
Pero ¿cómo podemos extender, esta justicia electoral al extranjero, cómo
podemos hacer que las leyes electorales paraguayas tengan vigencia en el
extranjero, cómo podemos hacer para castigar un delito electoral cometido en el
extranjero? Entonces, ahí sí estaríamos
creando los ciudadanos de primera y de segunda, el ciudadano extranjero con
derecho y el ciudadano paraguayo con derecho a obligación y responsabilidades
sometido a una ley, y eso no es cierto.
La palabra "radicado" el sentido que se le quiere dar a esta
palabra es lo que ha motivado la confusión de los amigos.
Y
creo que, analizándolo bien, reflexionado esta palabra, podemos llegar a un
entendimiento. Si analizamos algunos
contextos de la Constitución, algunos dicen que no, pero creo que está bien
este Artículo 39 donde habla que el paraguayo puede cambiar de residencia, de
domicilio, ausentarse de la república y volver a ella es un artículo que
podemos aplicarlo a esta parte de la explicación del concepto
"radicado". También el artículo que hemos expuesto esta mañana donde
se habla sobre la ciudadanía y en la que no se contempla la pérdida de
soberanía por estar radicado en el extranjero.
Entonces
nosotros no podemos venir acá a darle una interpretación de lo no tiene la
Constitución señores, y yo me voy a permitir leer un fallo de una Corte
Americana en donde habla sobre la interpretación de la Constitución y dice así:
No es inoportuno recordar que en materia
de interpretación las Constituciones rigen, se rigen por principios más
amplios que la aplicable a la interpretación de las leyes. Y que entre los primeros, predominan el cánon
de que las disposiciones constitucionales dictadas en salvaguardia de un
principio fundamental de derecho político, o para protección de la libertad de
los ciudadanos, no debe dar solo una estricta inteligencia basada en el sentido
literal de la palabra en que están redactados, sino que deben atenerse al objeto
primordial con que fueron dictados y al principio que le sirvió de
fundamento".
Y
en este contexto, ciudadanos, la palabra "radicado", para nosotros
debe ser interpretada como una forma que el ciudadano paraguayo venga a
someterse a una jurisdicción electoral, que nosotros por Constitución lo
estamos proclamando, ciudadanos, y no otra cosa, ciudadanos.
Entonces,
¿dónde está la prohibición del ciudadano paraguayo, al decirse que se le
prohíbe votar? ¿Constitucionalmente,
dónde está la prohibición, ciudadanos?
¿En qué artículo estamos viendo esta prohibición?, ciudadanos? ¿Si la palabra "radicado", no
significa el hecho de estar residiendo en este país, sino significa venir a
someterse, a la justicia electoral paraguaya?
Esa
es la pregunta, ciudadanos, eso es lo que yo quiero poner bien en claro, en
este momento, en esta asamblea, en que se le está acusando al Partido Colorado
de querer cercenar los votos de los paraguayos residentes en el
extranjero. Y eso no es cierto,
ciudadanos. Es más, ciudadanos, aquí ha
hablado el preopinante de que nosotros hemos agregado esta palabra
"radicado", y nosotros, ciudadanos, nuestro proyecto, ha sido
cercenado de punta a pértigo, ciudadanos.
Y acá, los Constituyentes Colorados hemos aceptado eso, ciudadanos, como
una verdad. Y no hemos discutido, ni nos
hemos retirado de aquí, ciudadanos, hemos aceptado lo que ustedes han querido
poner dentro de esta Constitución, ciudadanos.
Y entonces, ¿dónde está nuestra dictadura? ¿Sónde está, ciudadanos,
nuestra tiranía en esta Constitución?
Hay
que ser consecuentes, ciudadanos, y creo que en este momento esa palabra
"radicado" está manifestando lo que verdaderamente, procesalmente y
constitucionalmente tiene que ser. Nada
más, ciudadano Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional, por haber
hecho uso de ocho minutos.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Luis Alfonso Resck.
CIUDADANO CONVENCIONAL LUIS
ALFONSO RESCK:
Gracias, ciudadano Presidente.
Honorables
Convencionales: en primer término,
quisiera invitar a mis conciudadanos Convencionales, a brindarme la
satisfacción generosa de escuchar estas breves palabras, así, como los he
escuchado siempre, y he tratado de evitar que al orador se le
interrumpiera. Es un derecho, que me
asiste y una responsabilidad de los Convencionales.
Les
ruego encarecidamente, y reitero, ciudadano Presidente, creyéndome con
suficiente fuerza a esta altura de mi existencia, sin embargo, tal vez, ante la
trascendencia de la temática abordada, me siento pequeño, me siento muy
sensible, por ello ruego, más allá de mi ego, esta consideración, porque traigo
sobre mis hombros una historia preñada de dolores, y entre esos dolores están
mis hermanos allén de las fronteras; allí todos, en la rica gama de variados
matices, han sido compañeros más allá de nuestro común origen, nuestro común
destino, en una empresa también común, la empresa de abrir una puerta, retornar
a la patria, y liberar al pueblo.
Entonces,
ciudadano Presidente y honorables Convencionales, estoy más allá de los límites
electorales, incluso, más allá de la frontera de mi Partido. Hablo, tal vez, más allá de la simple
posición de un Convencional del pueblo, como un paraguayo más, como un hijo de Ñandeyara,
que me hace hermano de vosotros. Y acá
tras agradecer conceptos anteriormente vertidos respecto a mi humilde persona,
rescato uno, referido al verbo y a la luz de ese verbo con mayúscula, exalto
por encima de todo, el derecho natural, que es la filosofía que me inspira, y
que voy a hablar, tal vez veinte y cinco siglos atrás, repitiendo la palabra de
Sócrates, cuando decía que no hay derecho positivo que tenga validez, si el
mismo no se asienta sobre el derecho natural, y yo ya proclamo mi rebeldía, si
en el mañana derechos naturales vitales, fundamentalmente inherentes al ser
humano, se violan; proclamaré, precisamente, mi resistencia, porque ahí está la
razón de ser que inspiró a los redactores de la Declaración Universal. Y apelo en primer término, ciudadano
Presidente, y distinguidos Convencionales a ese derecho natural, a ese derecho
del hombre concreto que transita por el azaroso camino de nuestra historia, a
ese Colorado, Liberal, Febrerista, Comunista, Independiente, Democristiano que
me han pedido precisamente hacerme eco de sus justas aspiraciones.
Y
escuchádme bien; días antes de comenzar esta honorable Constituyente, estuve
precisamente, ciudadano Presidente, en la Seccional Colorada de Buenos Aires,
sin con ello tener derecho alguno de entrometerme en asuntos internos, cuando
unos y otros me reiteraban esta misión de defender su derecho como ciudadano
también de primera, como cualquiera. No
podemos admitir ahora esta clasificación absurda de ciudadanos de primera y
ciudadanos de segunda.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
justamente, a más de esta razón fundamental del derecho natural,
creyendo en el hombre, porque el hombre se hizo carne, y habitó entre nosotros;
redimió al hombre, y creo en la redención del hombre. Por eso siempre me he opuesto a la pena de
muerte, por una razón de principios, pero, hay también una razón jurídica; los
juristas que me han precedido, como un líder, están en mejores condiciones que
yo de esgrimir estos argumentos, y es que en ellos vamos a reconocer solamente
obligaciones, prestar servicios, etc., pero no le vamos a reconocer
correlativamente, el derecho correspondiente, o es que vamos a remontarnos a la
época de los absolutistas en que solamente eran súbditos, sujetos a
obligaciones y no de derechos. Ellos
contribuyen.
Recuerdo
que el director del Hospital de Clínicas leyó la hermosa carta dirigida por un
centenar de médicos que honran al Paraguay en los Estados Unidos su aporte para
el Hospital de Clínicas. Una suerte de
servicio de cooperación, de una patria lejana, moralmente, se hace extensiva
con sus brazos generosos, en actitudes solidarias, ciudadano Presidente. Por otra parte, hay una razón política, y
aquí estoy, humildemente entre vosotros.
Han ido en un éxodo trágico, jamás registrado en la historia de la América
Latina, según los estudios socio-políticos.
Muchos
quedaron, otros volvieron, porque pudimos volver. No todos tienen la suerte, porque se han ido
jóvenes, incluso, repito, colorados. No
lo digo para mover vuestra conciencia, ni conmover vuestro corazón, lo digo
porque es una realidad tangible. Se
casaron, tienen hijos, están viviendo su Paraguay allí, con sus angustias y sus
esperanzas, tanto como nosotros, si no más.
Ya no pueden retornar, lógicamente.
Las
otras son razones políticas, sociales y económicas, pero es la hora, ciudadano
Presidente, en que aún prevalecen bajo el signo de la injusticia social, la
discriminación, en la administración pública, los privilegios, y aún, como
consecuencia, la corrupción.
Por
lo tanto, carentes de fuente de trabajo, y originario ello de estas
consecuencias, ¿cómo van a volver? ¿Qué
se les puede ofrecer? No fueron porque
han querido. Sin embargo, están
suspirando ahora, con nosotros, con el corazón palpitante al unísono, porque se
sienten paraguayos. Y son paraguayos, a
pesar de todos los pesares; muchos no pueden volver, han querido volver, y uno
va junto a ellos, sobre todo en Argentina se ha mencionado muy bien acá, y se
encuentra con que es un Paraguay vivo más allá de sus fronteras, su tradición cultural,
su identidad, y hay entre nosotros, algunos paraguayos que pueden, o
confirmarme, o negarme. No hay un sólo
paraguayo que yo sepa, que haya renunciado a su nacionalidad, pese, ese pese, a
que de ello derivaría una suerte de interesantes consecuencias favorables para
los mismos. No hay un sólo paraguayo,
ello demuestra, realmente, ese amor al terruño, y ese espíritu de nacionalidad
paraguaya.
Entonces,
la causa no es de ellos, no podemos decir, con un criterio simplista, que
vengan, ¿Cómo van a venir? Han
intentado, muchos han retornado y en un número mayor.
Ciudadano
Presidente: permitídme, aún dentro de
los límites del tiempo, terminar con algunas consideraciones a mi juicio muy
importantes, ciudadano Presidente. Hay
una razón humana, no podemos nosotros solamente a la luz de la fría
racionalidad, desconociendo según Descartes, la voluntad del hombre, el corazón
que siente, si hasta Ñandeyara puso pasión a su obra para darle un impulso
gigantesco de creatividad.
Creo
que nuestra sensibilidad es honda, ciudadano Presidente. Es un signo característico del paraguayo, su
hospitalidad, su generosidad. Su
solidaridad tiene su fuente en el amor y queremos consagrar con esta
Constitución la civilización del amor, y la civilización del amor; no reconoce
rencores ni resentimientos, ni razones electorales. Perdonádme, si estoy equivocado. Aquí fundamentalmente hay una razón sin
razón, que es, precisamente, la causa electoral.
Y
por último, ciudadano Presidente, leí emocionado y llorando las palabras de De
Gaulle en el Africa en el Arco de Triunfo, cuando Peten le decía vengase usted
acá a luchar con nosotros ante la acusación de haber entregado la familia
inmortal, aquí esta su patria, y le contesta De Gaulle, la patria está dónde
esta el hombre.
CIUDADANO PRESIDENTE: Ciudadano Convencional: se han cumplido los diez minutos, con el
debido respeto.
CIUDADANO CONVENCIONAL LUIS
ALFONSO RESCK: ¿Dónde esta el hombre francés? La patria paraguaya está dónde esta el hombre
paraguayo, con su corazón, con su inteligencia, con su voluntad, que le
reconozcamos su derecho legítimo a coparticipar en este proceso para erradicar
definitivamente los vicios del pasado heredado y construir la patria nueva que
tanto queremos. Muchas gracias,
ciudadano Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Emilio Camacho.
CIUDADANO CONVENCIONAL EMILIO
CAMACHO: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales: haré uso de la palabra
persuadido del valor de la razón, entendiendo que la política es esencialmente
negociación y pacto, porque si no estaríamos demás en esta Convención y habría
que dar lugar a los poderes fácticos, a los factores de poder.
Creo
en argumentaciones y desmentidos, brevemente intentaré ubicar el lugar en que a
mí criterio corresponde la calidad de ciudadano y el derecho al voto.
Una
Constitución no debe hacer otra cosa que decir claramente; ¿cómo se es
ciudadano?, ¿Cuándo se es mayor de edad?
Y consagrar el derecho al voto de todos los paraguayos. Nosotros ya hemos establecido quienes son
ciudadanos. Por lo tanto, no podemos
caprichosamente y con dos palabras negar ese derecho a miles de compatriotas,
cuyo único motivo para ser castigado con la exclusión al derecho al voto, es su
residencia en el extranjero.
En
segundo lugar, quiero insistir en que el proceso electoral, el procedimiento
electoral, es materia de ley y no de constitución. Las características propias
de un proceso electoral, hoy mismo estamos presenciando cómo se quiere
modificar nuestro Código Electoral, nos indica que no podemos congelar en la
Constitución la exclusión de los ciudadanos.
Y digo exclusión, porque uno de los fundamentos de la legitimidad del
Estado democrático es la inclusión de todos los ciudadanos. Por eso en un Estado democrático, la
violencia siempre esta proscrita, la violencia siempre es delito, porque la
democracia incluye a todos no puede excluir porque construye su impacto
político y social. Esa legitimidad
democrática es la que debemos reivindicar por esta Convención, y entender que
no es tarea nuestra decir que no pueden votar los que están radicados en el
extranjero, porque eso es lo que esta Convención va a realizar en el día de
hoy.
No
me voy a referir a ninguna bancada, a un ningún partido o movimiento político;
voy a insistir en la necesidad de, por lo menos, preservar el derecho de que
todo paraguayo tiene el legítimo derecho de elegir a quienes regirán su
destinos, y a quienes regirán los destino de su país.
Se
citó en una sesión anterior una amplia legislación, pero como ya lo expreso
claramente un preopinante, es ese nuestro argumento, que es materia de ley
electoral, es materia de legislación común, es materia de tarea del Congreso, y
no de una Convención Nacional Constituyente.
Se citó también la Constitución Española, y solamente quiero recordar
que el Artículo 68, Inciso 5) de la misma, no solamente otorga el derecho de
votar a todo español en pleno ejercicio del derecho político, sino ordena que
el Estado debe remover los obstáculos que impiden la votación de los españoles
que residen en el extranjero. Dice
textualmente; "son electores inelegibles todos los españoles que estén en
pleno uso de sus derechos políticos. La
ley reconocerá y el Estado facilitará el ejercicio del derecho en sufragio a
los españoles que se encuentran fuera del territorio de España".
Y
nosotros no pedimos ni siquiera este segundo párrafo, pedimos que se diga: "que todo paraguayo en ejercicio de sus
derechos políticos, tiene el derecho elemental, básico, esencial de participar
en la formación de las autoridades de su pueblo". Por ese motivo, ciudadano Presidente, es que
me permito apoyar la Propuesta N°
2 que escueta, precisamente como debe hacerlo una Constitución, dice en su
segundo párrafo: "Son ciudadanos
electores los paraguayos sin distinción de sexo o religión que hayan cumplido
los diez y ocho años de edad". Las
excepciones se establecen en materia de Legislación común.
Finalmente,
ciudadano Presidente, quiero insistir en que la aplicabilidad, los ejemplos
dados precisamente nos indican que esta Convención no debe cargar sobre sus
hombros con una responsabilidad que va a ser muy pesada, no para nadie en
particular, muy pesada para una Convención Nacional Constituyente, porque vamos
a hacer, y pido, porque puedo equivocarme, que
me digan o digan los futuros oradores, si existe una Constitución en el
mundo que proscribe el voto de los extranjeros.
Eso
no puede cargar sobre la espalda de esta Convención; eso, de ninguna manera,
podemos permitir que esta Convención, que esta introduciendo instituciones
genuinamente democráticas, radicalmente democráticas, como el Referéndum, como
la iniciativa popular, como el Defensor del Pueblo, como la integración
regional de las Cámaras, por un artículo de nuevamente argumentos de aquellos
sectores tan interesados en prestigiar, no solamente a una clase política, sino
en desprestigiar a las instituciones representativas, porque en el fondo se
busca con crítica generalizadas desprestigiar a la representación, eliminarla y
dejarla en vacío, y que ahí entren solamente los poderosos, y ese espacio no
podemos ceder a nadie, y ese espacio pasa por una legitimidad intachable,
indudable.
La
Convención Nacional Constituyente reunida en 1992 no puede dar un argumento
más, no puede decir que aquí hemos proscrito el voto de los paraguayos con una
frase, hasta si se quiere elegante, donde se pide solamente la radicación en el
territorio nacional. Y recuerdo que esto
surgió de un debate poco feliz cuyas características ya fueron recordadas
anteriormente y, por lo tanto, me ahorra comentarlo. Y no figuraba, porque no es una materia de
ley, sino incluso de administración, es una materia administrativa, deben
implementarse los padrones en el extranjero, deben hacerse las inscripciones;
es una materia que evidentemente no merece el rango constitucional.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
pido que se vote por la Moción N°
2, porque no hace otra cosa que repetir lo que dice nuestra Constitución, lo
que dice el derecho Constitucional comparado, no el derecho comparado, lo que
dice el derecho constitucional comparado, y dejar a quienes corresponde esta
tarea, a los legisladores, a las administraciones que establezcan los
mecanismos.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
estoy persuadido de que en el debate éste, que vamos a darle la altura
que requiere una Convención Nacional Constituyente, vamos a escuchar muchos
argumentos, pero hay una carga que no debe soportar esta Convención, y es la
proscripción de los compatriotas en el extranjero, en el derecho a votar,
porque el Paraguay es un país de diáspora.
Y cité exprofeso el ejemplo de España, porque también fue una transición
construida sobre la destrucción de una dictadura que exilió a miles de
españoles, y en el Paraguay también existieron muchos compatriotas que, contra
su voluntad, fueron obligados a vivir en el extranjero.
En
este acto de reparación histórica, ni siquiera pedimos que se incorpore un
nuevo principio al derecho constitucional paraguayo; pedimos que se siga
diciendo lo de siempre, que tienen derecho al voto todo los ciudadanos
paraguayos. Muchas gracias, ciudadano
Presidente.
APLAUSOS....
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional. Hizo uso de ocho minutos.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Víctor Hugo Insaurralde.
CIUDADANO CONVENCIONAL VICTOR
HUGO INSAURRALDE: Gracias, Presidente.
Yo
no voy a referirme sobre la parte legal de este artículo, sino mas bien voy a
ser referencia también, ciudadano Presidente y ciudadanos Convencionales, a lo
que había dicho el primer orador con respecto a hablar con el corazón; creo que
es muy importante. El primer orador dijo que hablaría con el corazón y lo hizo
realmente; me impresionó, ciudadano Presidente, porque ha hablado solamente de
odio y de rencor, ha hablado de envidia y egoísmo, ciudadano Presidente, y eso
es por lo visto lo que tiene dentro de su corazón.
APLAUSOS...
Ciudadano
Presidente: voy a hablar también, pero
voy hablar con el mas profundo sentimiento, porque no solamente los amigos de
la oposición han sufrido en carne propia el destino del destierro y la opresión
de la dictadura; no queramos confundir; todos hemos sido víctimas de esa
situación.
En
1973, hoy mi finado padre, en aquel entonces, autoridad en nuestro municipio,
ha sido también desterrado al vecino país de la Argentina, y él ha sido
desterrado porque ha defendido los derechos, no de un correligionario, sino
porque ha defendido los derechos de un amigo afiliado al Partido Liberal.
Eso,
ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales, le ha costado a él el exilio y
ha tenido que ir a barrer las calles de Buenos Aires; sin embargo, ciudadano
Presidente, eso no ha hecho mella en su espíritu, ha tenido que soportar vivir
bajo la carpa, en barrios pobres de Buenos Aires, y le ha llevado siete años
para poder volver a vivir en su tierra querida y ha vivido solamente ya tres meses;
luego Dios lo ha llevado a su lado.
Ciudadano
Presidente: esos siete largos años le
han hecho reflexionar en mucho; luego de siete años de sacrificio ha vuelto a
tener un pedazo de tierra del que lo han despojado en su vida; se ha hecho de casa en Buenos Aires y ha
tenido que dejar todo de lado, para volver a radicarse nuevamente en su país
para luchar por la democracia y por los derechos humanos.
APLAUSOS...
Nosotros
los hijos, lo hemos acompañado en aquella penosa circunstancia, y hemos vuelto
a nuestro país porque pensábamos y queríamos también un Paraguay mejor, un
nuevo Paraguay, un Paraguay que tenga que respetar los derechos de cada
uno. Y, ciudadano Presidente,
simplemente quería dar este ejemplo para aquellos compañeros Convencionales que
tanto están hablando de que hay muchos compañeros paraguayos residentes en el
exterior que quieren tener el derecho al voto.
Y
quisiera transmitirle a cada uno de ellos esta penosa situación que hemos
pasado, pero que, sin embargo, nos ha fortalecido para volver a nuestro país y
luchar codo a codo, con los que estaban acá, para llevar adelante este nuevo
Paraguay. Muchas gracias, ciudadano
Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional, ha hecho uso
de siete minutos.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional José Nicolás Morínigo.
CIUDADANO CONVENCIONAL JOSE
NICOLAS MORINIGO: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales: quiero dar la imagen de
cómo veo esta Convención. Creo que estamos
todos en una misma barca y que en esta barca nuestro objetivo es tratar de
redactar la mejor Constitución posible, y que, si ella se hunde, nos hundimos
todos: liberales, colorados e
independientes.
Por
lo tanto, ciudadano Presidente y ciudadanos Convencionales, quiero hablar no
simplemente como un miembro deConstitución Para Todos, sino, fundamentalmente,
como ciudadano paraguayo. Quiero hablar,
de manera tal que podamos rescatar el sentido del diálogo, que muy prontamente
y muy radicalmente se rompe en esta Convención Nacional Constituyente. No es posible que la clase política no sea
capaz de escucharse y no es posible que la clase política tenga que plantear
cuestiones que se presentan con un criterio político partidario, cuando el
problema hace referencia, fundamentalmente, a un problema de la ciudadanía, a
un problema de la historia y a un problema del futuro de esta sociedad
paraguaya.
Ciudadano
Presidente y ciudadanos Convencionales:
lo que estamos tratando aquí, el problema con el cual nos estamos
enfrentando es sencillamente éste: ¿Es útil y lúcido incluir en la Constitución
una cláusula que restrinja a la ciudadanía la posibilidad del voto a la
radicación en el territorio nacional?.
Ese es el problema al que tenemos que responder, y nosotros estamos
contestes, y todos los que estamos acá, que, obviamente, hay problemas y hay
cuestiones técnicas y operativas que pueden limitar ciertamente esas
posibilidades del voto en un momento determinado y en una coyuntura específica
y en el momento concreto; pero, lo que no podemos admitir y con lo cual no
estamos de acuerdo, es que se incluya en la Constitución Nacional una cláusula
que restringe el derecho y que restringe la ciudadanía a una cuestión de
residencia territorial. Eso es un error
teórico, eso es un error político y eso es un error ético.
El
concepto de ciudadanía es fundamental para la democracia. La ciudadanía es el elemento fundamental que
permite construir las sociedades modernas.
Y la ciudadanía que implica participación y protagonismo es,
esencialmente, un concepto político y ese concepto político en las democracias
modernas tiene un eje fundamental que es el voto. Si nosotros restringimos, estamos,
simplemente, planteando arbitrariamente la creación de ciudadanos de primera y
de segunda categoría, que no tenemos derecho a hacerlo. Ya puede venir la ley, ya pueden,
posteriormente, los legisladores, analizar las situaciones concretas para dar
respuestas a las situaciones concretas, pero no es absolutamente admisible que
en una Constitución que pretende ser libertaria, que pretende abrir un nuevo
modelo y una nueva forma de vida para la sociedad paraguaya, estemos, de
entrada, restringiendo y estableciendo exclusiones en el concepto de
ciudadanía. Esto es grave. Esto no solamente es grave, esto es, para
aquellos que están defendiendo esta tesis, un error político. Es, fundamentalmente, un error político.
Y
no lo digo con intención de que ustedes cambien su opinión o no lo hagan,
cuando alguien les dice, también, como acá se estaba hablando, efectivamente,
desde el fondo del corazón, que los errores políticos son graves, cuando se
pretende construir la democracia y en un período de transición.
Esta
Convención Nacional Constituyente tiene una gran cantidad de factores adversos,
porque no hemos respondido a los grupos de presión, y esos grupos de presión
están trabajando en contra de esta Convención, y en este momento, lo que nos
interesa, es darle un sentido de profunda alteración de toda la forma en que,
hasta este momento, esto hemos vivido en la vida política paraguaya, y eso
implica, por favor, reconocer que aquellos que están fuera de este país no
están porque así lo quieren voluntariamente, sino que están por criterios
políticos y por factores económicos más allá de la patria y de la tierra donde,
estoy seguro, que también quieren vivir.
Ciudadano
Presidente y ciudadanos Convencionales:
creo que el Presidente de la Comisión Redactora, en un momento dado,
había señalado que el derecho se funda y responde a la realidad social. Si el derecho se funda y responde a la
realidad social, debemos preguntarnos cuál es la realidad de la sociedad
paraguaya y cuál es la realidad de los paraguayos que están fuera de este país. Y esa realidad nos va a indicar que la
diáspora paraguaya, esa dolorosa migración paraguaya hacia el extranjero es
producto, fundamentalmente, de nuestras luchas políticas y de nuestros
problemas económicos. En esta Convención
tenemos la posibilidad de cicatrizar definitivamente ese dolor inmenso de la migración
por cuestiones políticas.
Por
eso invito a los Convencionales del Partido Colorado a que mediten
profundamente esta realidad, y que hagamos, y que construyamos, y que,
definitivamente, podamos hacer juntos en esta barca, en la cual todos estamos
participando, la posibilidad cierta de dar un corte a la historia anterior de
este país, para reconocer a los compatriotas que están fuera y a no limitarles
y categorizarlos como ciudadano de segunda categoría.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
esta es la razón por la cual creo que la propuesta N°
2, que recoge la propuesta presentada en el anteproyecto del Partido Colorado,
es una alternativa viable, y creo, ciudadanos Convencionales, que el futuro de
este país depende, fundamentalmente, de que seamos capaces de dejar de lado
nuestras inquinas, de dejar de lado nuestros criterios facciosos, de dejar de
lado el fanatismo, para abrir una ancha avenida hacia la vida democrática en la
sociedad paraguaya. Muchas gracias,
ciudadano Presidente.
Aplausos...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional. Hizo uso de ocho minutos. Gracias.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Rodolfo Gill Duarte.
CIUDADANO CONVENCIONAL RODOLFO
GILL DUARTE:
Ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales: estamos viviendo en un momento interesante de
esta primera Constitución auténticamente democrática en nuestro país, el
Paraguay. Los preopinantes arguyeron que
el artículo del Proyecto Base cercena los derechos ciudadanos, e incluso,
algunos fueron más allá y han proclamado que se está cercenando el derecho a la
nacionalidad. Nosotros, sinceramente,
creemos que esos argumentos no corresponden a la realidad y a la verdad. El primer orador, en esta tarde, y otros
presentes aquí, compatriotas con quienes he compartido mi largo exilio, nos
están dando la razón en el sentido de que, todos aquellos paraguayos que
quieran venir a luchar por sus verdades como un medio legítimo que la
democracia nos acuerda, estamos sentados aquí en esta Constituyente. No quiero citar nombres, pero todos los
conocemos, y nuestra presencia aquí, después de más de treinta años de largo
exilio, es una demostración de que los paraguayos, a partir de la revolución
libertadora del 3 de febrero, no tenemos ninguna clase de restricciones para
trabajar por nuestros ideales, por nuestros programas.
Hay
tres factores que intervienen en un proceso electoral, factores limitantes,
podríamos llamar. Primero, la edad que
establece el Código Electoral respectivo.
El
segundo factor, es también lo establecido en la ley, por conciudadanos que han
sufrido penas que los inhiben de sus derechos ciudadanos en forma temporal, sin
que esto sea perjuicio, para que después, recobrado ya y haber penado lo que la
justicia le ha asignado, pueda recuperar sus derechos ciudadanos.
Y
el tercero es quizás lo más importante en esta discusión, en esta tarde, es la
vecindad del elector. Aquí, ciudadanos
Convencionales, no estamos cercenando el derecho de la ciudadanía, no estamos
negando el voto a ninguno de nuestros compatriotas. Así estén en el Africa, en Europa, en
Latinoamérica, ellos pueden venir al Paraguay a cumplir con los requisitos del
Código Electoral vigente y hacer uso de sus votos ciudadanos. Y el hecho de que él permanezca fuera y no
pueda hacer uso de sus derechos ciudadanos, no significa que le estamos sacando
la nacionalidad. Todos aquellos
compatriotas que quieran seguir siendo paraguayos por su libre y espontánea voluntad, estén donde estén,
seguirán siendo paraguayos y el Estado paraguayo los reconocerá como tal.
Por
eso, ciudadanos Convencionales, también aquí quisiera hacer mención de que, en
la democracia, el factor decisivo es el voto, y estoy totalmente de acuerdo con
ese concepto. Y a nosotros, los colorados,
a veces con ligereza nos tildan de mbareté y antidemocrático, y el hecho de que
en esta tarde la bancada colorada en pleno haya aceptado la reapertura de este
debate es una demostración de que los colorados somos auténticamente
democráticos, porque cuando se interrumpió esta sesión, ciudadano Presidente y
ciudadanos Convencionales, habíamos hecho uso del ejercicio del voto y una
mayoría acordó el levantamiento del debate por suficiente ilustración. Y nuestros compatriotas componentes de otras
bancadas no quisieron aceptar el veredicto del voto y se retiraron. Pero aún así, esta tarde, ciudadano
Presidente y ciudadanos Convencionales, todos los aquí presentes, tenemos la
más absoluta libertad para esgrimir nuestros derechos, sin cortapizas ni
limitaciones de ninguna naturaleza.
Son
estas reflexiones las que quiero traer en esta tarde, ciudadano Presidente y
ciudadanos Convencionales. Podemos
seguir discutiendo, esgrimiendo nuestras verdades, nuestras verdades, a veces,
que no son de ninguna manera las verdades totales, porque siempre he creído,
queridos compañeros, que en la confrontación de nuestras verdades parciales
encontraremos la verdad verdadera. Y eso
nos posibilita la democracia, y en ese ejercicio, esta tarde, estamos aquí
escuchando los interesantes argumentos de los ciudadanos Convencionales.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
vuelvo a repetir que todos los paraguayos tienen la absoluta libertad de
acercarse aquí, inscribirse en los padrones respectivos y ejercer su derecho
del voto. Nadie le está negando a ningún
paraguayo ese ejercicio del voto. Y
hemos dejado, ciudadano Presidente, y muchos aquí conocen, valores muy
preciados para algunos, para venir a luchar juntamente con nuestros
compatriotas, por que alguna vez, en un tiempo no muy lejano, tengamos en
nuestro país una verdadera democracia, en que todos los paraguayos, sin
distinción de ninguna naturaleza, podamos convivir en paz, en concordia,
respetándonos mutuamente y esgrimiendo nuestras propias banderas, sin ninguna
cortapiza.
Ciudadano
Presidente: agradezco la atención que me
han dispensado mis compañeros Convencionales, pero desde ya, me ratifico por el
Proyecto Base que ha presentado el líder de nuestra bancada y líder y
Presidente de la Comisión Redactora a la consideración de esta Convención, en
la cual estamos trabajando por un Paraguay mejor. Muchísimas gracias.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Convencional Carlos Mateo Balmelli.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
MATEO BALMELLI:
Ciudadano Presidente: me opongo
que en la norma constitucional esté legislada esta discriminación en relación a
los paraguayos radicados en el extranjero.
Creo que, -lo he dicho en una ocasión-esta Constitución es una unidad,
debe constituirse en una unidad que debe estar perfectamente
sistematizada. Esto quiere decir,
sistematizar quiere decir crear un sistema donde las partes son
interdependientes y las mismas no deben contradecirse sino que deben corresponderse. En el caso de que aprobemos el artículo de la
Comisión Redactora, estaríamos cayendo en, o sea, estaríamos aprobando una
norma constitucional que contradice este Proyecto Constitucional en varios de
sus articulados anteriores.
Quiero
citar, en primer lugar, el Artículo 1°,
que define al Paraguay como una República representativa.
En
segundo lugar, quiero citar el Artículo 45, que reconoce a todos los ciudadanos
paraguayos los derechos inherentes a la personalidad humana. Quiere decir que son derechos que no pueden
ser negados por leyes que lo reglamentan ni pueden ser negados por leyes
positivas. O sea, este articulado
estaría contradiciendo, en forma lisa y llana, dos articulados que definen el
telos y la finalidad de esta Constitución.
Ahora
bien, con respecto a los argumentos esgrimidos por el Presidente de la Comisión
Redactora, que hacían alusión a un criterio estricto y absoluto de la
territorialidad, quiero decir que se constituyen en argumentos de mera falacia,
porque esta misma Constitución, en su Artículo 63, ha relativizado el criterio
de la territorialidad absoluta al reconocer la jurisdicción de los tribunales
indígenas y el derecho consuetudinario de los indios, de los sistemas
indígenas. Así que, argüir para excluir
la participación de los paraguayos, el argumento, o sea el criterio de la
territorialidad absoluta, un criterio, digamos, de Estado- Nación perimido en
un proceso de integración regional y latinoamericana, me parece que no es
correcto en estos casos.
Con
respecto a los argumentos, también del Presidente de la Comisión Redactora,
repito lo dicho por el Presidente de mi Partido, el Convencional Juan Manuel
Benítez Florentín, en el sentido de que no citó una sola fuente que hace al
Derecho Constitucional. En todo caso, él
había citado Códigos electorales o leyes electorales, pero lo que él definió,
que todas estas leyes electorales contienen una cláusula que, obviamente, es
necesaria, estar inscripto en un
Registro Electoral, esto, desde ningún punto de vista impediría que una ley en
el futuro pueda habilitar un Registro Electoral en Buenos Aires. Así que tampoco es argumento, y recuerdo que
en aquel caso citó al Profesor Tita Nolen de la Universidad de Haidelbert, que
citaba solamente el hecho. Nolen decía
que es necesario que estén inscriptos y que se formen registros
electorales.
Con
respecto también al tema de la legislación electoral, quisiera decir que
tenemos algunos ejemplos de países vecinos que sí autorizan, vía electoral, el voto
de sus conciudadanos que habitan en el extranjero. Tenemos el caso de la Ley Argentina 24.007
del año '91, sancionada el 9 de octubre de 1991 y en vigencia desde el 5 de
febrero de 1992. Si leemos una
publicación del Diario ABC Color del 12 de agosto de 1989, la República
Federativa del Brasil convoca a sus ciudadanos que habitan en territorio
paraguayo a las elecciones de ese país.
Lo mismo, la Asociación Nacional Republicana, Partido Colorado y el
P.L.R.A. también reconocen como parte integrante de la voluntad política
paraguaya a los paraguayos residentes en el extranjero. Y eso está dado, por ejemplo, en el Artículo
47 del estatuto del Partido Liberal Radical Auténtico, y en el Artículo 22, i)
de la Asociación Nacional Republicana, estatuto que hoy en día se encuentra en
vigencia pero que todavía no está inscripto.
Pero, digamos, el propio Partido Colorado está reconociendo a los
paraguayos en el extranjero, al menos, a nivel interno o partidario a que participen
y colaboren en la formación de la voluntad política de este país.
Por
lo antedicho, ciudadano Presidente, por razones de sistemática jurídica y por
razones que hacen a tener un sistema jurídico libre de contradicciones y a
tener una norma constitucional en la cual estén ausentes las contradicciones
que desvirtúan sus telos y su finalidad, me parece que esta norma
discriminatoria no tiene que tener cabida.
Eso es todo.
APLAUSOS...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano Convencional.
Le
concedemos el uso de la palabra al ciudadano Convencional Juan Manuel Peralta.
CIUDADANO CONVENCIONAL JUAN
MANUEL PERALTA:
Gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: realmente, sobre este tema me interesó hablar, y aprovecho, por
ese motivo, de agradecerle a la bancada, en especial a su líder, al Presidente
de la bancada, de haber concedido la reconsideración, y también a todos
aquellos que, realmente, vinieron para escuchar los argumentos que nosotros
presentamos del por qué no queremos que constitucionalmente se establezca una
restricción al derecho de voto a los connacionales.
Quiero
significar que, primeramente, a mí me tocó también personalmente experimentar
muchas cosas desde muy joven lo que pasa en nuestro país. Cincuenta y nueve años areko ha upeagui
cuarenta y tres años adedica al servicio del sector social, al servicio de la
clase trabajadora y del campesinado de nuestro país y de los compatriotas en la
migración. De estos 43 años me tocó vivir 20 años fuera de nuestra Patria. Ha upeicha
avei, como algunos preopinantes, areko motivo muy desgarrador de lo que me
había pasado familiarmente en ese tiempo, pero no voy a contar eso, porque no
quiero que me arrebate la emotividad, sino quiero acudir a la racionalidad.
Quisiera
decirles a los compañeros Convencionales, que en realidad, a mi me parece que
estamos nosotros inaugurando un nuevo tiempo, una nueva etapa que necesitamos
todos hacerlo con grandeza. A mi me parece que en nuestro país, y por lo tanto,
hablar del país, hablar del Paraguay, tenemos que mirar en el hombre paraguayo.
No tiene sentido hablar del país cuando solamente vamos a mirarlo desde el
punto de vista geográfico o del punto de vista territorial. Tenemos que mirar
al país, al Paraguay, mirando a sus hombres, y los hombres paraguayos sabemos
que hemos vivido momento muy difícil, que son las causas de la gran cantidad de
connacionales fuera de nuestro país. Y de esas causas, todos, todos los
paraguayos somos responsables. Algunos tal vez en menor grado y otros en mayor grado,
pero todos, absolutamente todos, tenemos que pensar que somos responsables.
Así
como, a pesar de que ahora una parte decida impedir o quitarles este derecho
constitucionalmente a nuestros conciudadanos, de ello vamos a ser responsables
todos. No va a ser responsable solamente
una parte, porque estamos estableciendo a nivel constitucional. Por eso es que
quiero acudir a la conciencia de los compañeros y decirles lo que realmente
recogí y sentí en esta Magna Convención Constituyente, cuando pregunté cuáles
eran las causas de tanta resistencia, de por qué tanto se quiere poner a nivel
constitucional este requisito y por qué no se deja solamente a la ley. Alguien me dijo: resulta que el Partido
Liberal oñe abanderase peare ha oganase voto pea ha oipuruse politicape, ha,
entonces, no rome'emoai chupe la gusto. Ha otro he'i katu cheve: no, jaipuruna
argumento, mba'ereiko ñame'eta ichupekuera, porque ha'ekuera omoi umi
argumentoita ja'ea ko'ape. Pero na checonvencei, sinceramente, mamaveva koape.
Che ndaikua'ai mavapa orekota costo político favorable o desfavorable, mavape
obeneficiata tërä pa mamavape no beneficia mo'ai. La upea ndahaei la che
interesaba, pero sí, che ahejahaicha, che hermano kuera, haetevaicha cheve que
orekotaha petei costo socio-político, sicológico para esos ciudadanos
paraguayos que queremos integrar nuevamente en este nuevo proceso, en este
nuevo tiempo en que vivimos en nuestro país.
Adibuja'imita
pëëme mbaeichapa ahecha ko jajaposeva, ñaimoa vaicha cheve ko ñanegavo pe ñane
compatriota kuera ohovaekue ñane retágui amo teta ambuere oikó por necesidad
jaicuaa mba'erepa heta ma upea ja'e, oikotëvegui omba'apó. Ha'ete vaicha cheve umi nañdé irunguera, umi
ñandé rapicha inundado kuera koa'ga oïva hina osembava hoga gui, porque ou chupe
kuera pëteï y guazú ha ndicatui oviví hogape ha osé manté vaëra ha umiape
jaipeatava vaicha cheve hina cheve la i ciudadanía porque co'äga noirigüi
hogape, naipöraï cheve guarä ramo peva peicha ñamoi Constitucionpe, mba'egui
piko nda jahejainde la ley oñe encarga ha o estudia cada caso mba'eicha pa
añeté iporaveta oñeñatendé ko'ävä caso.
Ahenoi entero vevape porque arekó experiencia avei, ñandé jareko vaerá
presente especialmente nuestra clase dirigente, los políticos ha tal vez upepe
aiké ma avei chave.
INTERRUPCION...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Perdón, ciudadano Convencional, le estoy
avisando que ya se cumplió su tiempo, con todo respeto.
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Gracias, ya voy a terminar.
La
ñandé pueblo oikotëvë credibilidad, ha ndaikatuiko ya'e kuri la ñandé proyecto
kuerape nañamoiri kö'äva ha upei jajú ko'ape jajapó otra cosa totalmente
distinto ja que ni peteïva la propuesta kuerape ndo figurai pea kuri. Ipörä ngo ya devolve pe credibilidad al
ciudadano y al pueblo. Invito por eso a
los ciudadanos Convencionales, y especialmente a aquellos que se mantienen a
revisar su actitud y no dejar a nivel constitucional y buscar detrás de esas
propuestas que son muy similares la que están, pero me gusta la propuesta N°
2, en el sentido de que se establezca así en nuestra Constitución el derecho a
la ciudadanía nacional como elector
ciudadanos paraguayos. Muchas
gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias a usted, ciudadano Convencional.
Le
concedemos el uso de la palabra al ciudadano Convencional Benjamín Fernández
Bogado.
CIUDADANO CONVENCIONAL BENJAMÍN
FERNANDEZ BOGADO: Ciudadano Presidente, honorables
Convencionales: la coherencia se define
como la conexión o el enlace de unas cosas con otras y voy a plantear la
cuestión de manera bastante sencilla.
Todos estamos de acuerdo en que esta Constitución es un pacto hacia el
futuro, es un compromiso que nos hacemos para reivindicar antiguas y
postergadas aspiraciones y por eso, por esta misma razón es un compromiso con
las posturas, con las ideologías, ya sean personales o partidarios.
Todos
los proyectos de Constitución y quizás el colorado con mayor claridad postulan reglas bastantes simples y directas
con respecto a quiénes pueden hacer uso del sufragio como un modo de expresión
de su voluntad política. Todo paraguayo
mayor de 18 años cumplidos y con el simple requisito de haberse inscripto en el
registro electoral puede hacer uso de dicho sufragio, todos sin excepción
hablan de esos requisitos, todos los proyectos de Constitución.
Para
sorpresa de muchos, sin embargo, nos encontramos con un proyecto que solicita
la radicación para ejercer este derecho, primera incoherencia. Hemos prometido, argumentado, escrito que
íbamos a hacer una cosa y terminamos haciendo lo contrario.
Segunda
incoherencia. Ayer hemos otorgado
reconocimiento y ventajas económicas a los ex prisioneros de guerra bolivianos
y a sus descendientes. En una palabra,
hemos sido generosos con aquellos que quizás fueron, por razones de guerra, los
que terminaron con la vida de más de 30.000 paraguayos en el Chaco. Y en contraposición no tenemos la mínima
consideración con aquellos compatriotas que emigraron y seguirán emigrando, por
razones económicas, del país.
Pareciera
que para ser reconocido como condición de ciudadano y tener derechos y
privilegios hay que matar, herir, caer prisionero y quedarse a vivir en el
país, con los médicos sin campos de concentración, con los dictadores sin
dictadura, con los ladrones de guantes blancos, a los que se le han robado
aquí, inclusive los guantes, o verdugos ocasionales, les concedemos todo
incluso a este último le equipáramos en ventajas con aquel que defendió el
Chaco paraguayo. En una palabra, con los
extranjeros de mala fama todo, con los nuestros nada. Típica mentalidad isleña que reniega de su
compromiso continental.
Tercera
incoherencia. En este mismo lugar y ahí
donde usted se encuentra, ciudadano Presidente, se firmó un 26 de marzo de
1991, el Tratado de Asunción, que daba inicio al ambicioso proyecto del
MERCOSUR; en este mismo cuerpo edilicio funciona el único Ministerio de
Integración existente entre los cuatro países miembros del acuerdo. Dentro de 2 años habrá un arancel común, una
legislación común, una libre contratación de mano de obra, un fluir permanente
de los habitantes de un lugar a otro y, por supuesto, una nacionalidad
común.
Los
europeos, cuando firmaron el Tratado de Roma, establecieron el voto del
exterior de los miembros integrantes del pacto, que no era más que la
continuación de un viejo hábito en Europa.
Ni los franceses acordaron en dicha oportunidad del paso de las milicias
nazis por los Campos Elíseos, ni los alemanes se cerraron en un revanchismo
inútil cuando vieron la conveniencia de integrarse y de crecer.
Hace
unas semanas, el Tratado de Mastrix fue aún más lejos. Posibilita que el
europeo, en tanto miembro de la comunidad puede votar en el país donde se
encuentra residiendo. Lo que nosotros damos a los extranjeros después de vivir
5 años para elegir Intendente y Junta Municipal, los europeos le conceden para
elegir el Jefe del Gobierno del país diferente del cual ellos son originarios
para votar.
En
una palabra, ciudadanos, no seamos, obcecados defensores de nuestra
insularidad, de nuestro temor al futuro, de nuestro compromiso de integración,
no privemos constitucionalmente al país de un argumento que será la razón de
nuestro crecimiento y de nuestro desarrollo.
Así como hace un año firmábamos en este lugar el Tratado del MERCOSUR,
démosle un voto de confianza a la integración, permitiendo que la ley
interprete las variantes sobre el voto de los paraguayos en el exterior; no
seamos inmediatistas; pensemos en el futuro; la patria nos demanda, ciudadanos,
un compromiso con el mañana, no seamos incoherentes en este sitio con algo que
profundamente es apoyado por todos:
integrarnos para crecer y ser más prósperos; en una palabra, no seamos
incoherentes por tercera vez.
El
voto de los ciudadanos paraguayos en el exterior está definido en el Artículo
367 del Código electoral sancionado el 2 de marzo de 1990. Se tuvo 2 años y un poco más para
implementarlo. Si hubo razones que
implique este abandono y esta dejadez, no seamos nosotros cómplices de algo que
privará a muchos de la posibilidad de mantener el sentimiento paraguayo vivo y
vigilante. Esta es una cuestión de la
ley, y nosotros, como constituyentes, tenemos que asegurar la vigencia de esta
Constitución por sobre cualquier mezquindad ruin, torpe u oportunista. Debemos, en una palabra, ciudadano
Presidente, ser instrumentos de futuro y no herramientas de las sinrazones y de
la incoherencia. Gracias, ciudadano
Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Federico Callizo.
CIUDADANO CONVENCIONAL FEDERICO
CALLIZO: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales: en primer lugar, quiero señalar
que va a ser muy difícil superar las expresiones del preopinante en defensa del
sagrado derecho que tienen los paraguayos de ser ciudadanos.
Se
ha dicho aquí que se hace uso de palabra para apelar a la racionalidad. Yo hago uso de palabra, ciudadano Presidente,
para advertir que estamos a un paso de caer en la irracionalidad y en el
absurdo, el absurdo jurídico, el absurdo político y el absurdo humano. El absurdo jurídico se da, ciudadano
Presidente, en tanto en cuanto en el Artículo 146, votado esta misma mañana se
dijo son ciudadanos las personas de nacionalidad paraguaya natural desde los 18
años. Se debe retrotraer las páginas del
proyecto hasta el Artículo 119 para encontrar una expresión que entra de rondón
a limitar, no en el capítulo de la ciudadanía, sino que hablando de electores
se limita el derecho a estos ciudadanos de poder votar, de poder elegir.
No
voy a hacer referencia, para no pasar el tiempo asignado, a los otros
argumentos jurídicos magníficamente pergeñados y establecidos en la exposición
del preopinante, perdón que lo cite, Mateo Balmelli, pero al mismo tiempo es un
absurdo político, digo, es un absurdo político porque estamos desde la
constituyente pretiriendo a una enorme cantidad de conciudadanos que se han
visto obligados a salir de las fronteras de la patria y en lugar de atraerlos a
través del derecho que debe ser consagrado en esta Constitución, los estamos
alejando y estamos creando la famosa dicotomía de ciudadanos de primera y de
segunda categoría, de ciudadanos de un nivel y de otro nivel, ciudadano
Presidente.
Y
es un absurdo humano, ciudadano Presidente, porque no creo que se haya dado en
la historia o si se dió, se dió muy pocas veces, que un contingente humano esté
tan dispuesto a seguir siendo paraguayo.
Hay un clamor en todas las fronteras y más allá de las fronteras de
todos los círculos paraguayos, de todas las seccionales coloradas que están
constituidas en el exterior, de todos los comités liberales y círculos de otros
Partidos que claman por seguir siendo paraguayos.
Es
un honor ser paraguayos para ellos, y eso debemos respetar. No caigamos en esa
irracionalidad, ciudadano Presidente, el tiempo es corto, pero no puedo dejar
de referirme a algunos aspectos que hacen relación a la exposición que hiciera
el líder de la bancada colorada. No puedo olvidar las magníficas expresiones
del Convencional Oscar Paciello, perdóneme que lo cite amigo Paciello, cuando
en la Comisión de Redacción pedía el uso de la palabra brillantemente a
defender la Constitución del tribunal constitucional por ejemplo, cuando se
refería, por ejemplo a lo que debe ser el Colegio de Abogados con la
colegiación legal, a lo que debe ser la inconstitucionalidad o cuando hablaba
del derecho a la imagen.
Pero
no lo hemos escuchado al Convencional Paciello, ciudadano Presidente, en la
Comisión de Redacción, haciendo ninguna referencia a lo que él después cuando
ya esto quedó establecido como una obligación para la bancada del Partido
Colorado, él hizo la defensa acudiendo a su enorme y extraordinaria
facundia. Sus argumento, han sido
pomposos, ha recurrido a una gran cantidad de bibliografías de legislación de
segundo orden como lo señalara el Presidente del Partido Liberal Radical
Auténtico, el Convencional Benítez Florentín en su exposición.
Pero
en ese momento, hemos tratado de remontar el argumento más importante planteado
por quienes defendían este artículo en su redacción, que era el argumento de
que los paraguayos en el exterior no aportaban nada, no pagaban impuestos y
especies de ese tipo. Ningún argumento que no fuera de ese tipo, se esgrimió en
oportunidad de la discusión de la Comisión Redactora.
Por
lo demás, y repitiendo lo que otros Convencionales ya han expresado, quiero
señalar también lo siguiente: primero,
la Constitución de 1967, votada en medio de la existencia de presos políticos,
de Estado de Sitio, de deportados, no contiene una cláusula semejante.
Segundo,
el proyecto del Partido Colorado no contiene ese requisito.
Tercero,
ninguna de las Constituciones ni siquiera
los proyectos de Constitución, ni siquiera el
del Poder Ejecutivo contiene ese requisito.
Y
finalmente, ciudadano Presidente, ninguna de las constituciones por lo menos
que yo conozca contiene a nivel constitucional un requisito semejante.
Por
otra parte, y para terminar, ciudadano Presidente, quiero hacer referencia a
las comparaciones hechas por más de uno de los Convencionales colorados, en el
sentido de aclarar que solamente lo de residentes se refiere al hecho de que
los que no pueden votar estén en el extranjero, si eso, ciudadanos cruzan las
fronteras y se inscriben en el padrón electoral y vienen en el día de las
elecciones pueden votar y eso lo han manifestado y quiero que eso quede como
constancia en los registros de esta Convención Nacional Constituyente.
No
quiero dejar de señalar a este respecto que debemos recordar, ciudadano
Presidente, que con oportunidad de las elecciones del año 89 las fronteras de
la patria fueron cerradas y fueron cerradas para qué, para que no ingresaran
los paraguayos de Clorinda o de Posadas para depositar sus votos en las urnas
en la capital.
En
consecuencia, ciudadano Presidente, vuelvo a repetir, hagamos el esfuerzo de no
caer en la irracionalidad y votemos por excluir la cláusula que exige que los
paraguayos residentes en el extranjero no pueden votar sino haciéndolo, sino
constituyendo su residencia en el territorio patrio. Nada más, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Muchas
gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Jorge Dos Santos.
CIUDADANO CONVENCIONAL JORGE
DOS SANTOS: Muchas
gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: para ratificarme en la
propuesta N° 2, que no es en su
primer párrafo, sino la transcripción literal de lo que propone nuestro
partido, la A.N.R. en su proyecto de Constitución en el Artículo 71.
Ciudadano
Presidente: un preopinante ha hablado de
la coherencia y yo creo que la coherencia en nuestro país es una virtud muy
poco usada por los políticos. Yo, como
joven afiliado a un Partido que es democrático, entiendo que debemos buscar,
rescatar ese valor tan perdido en nuestros días y en la praxis política de
nuestro país.
Por
eso entiendo y me permito leer lo que manifiesta el estatuto de nuestro Partido
en cuya aprobación he participado en la Convención extraordinaria y que dice en
su capítulo 2°, Fines. Artículo 3°,
en su inciso a) son fines del Partido bregar por la vigencia irrestricta de los
Derechos Humanos, único fundamento sobre el que se construirá una sociedad
igualitaria, cuyo efecto propiciará la remoción de los obstáculos de orden
político, social y económico que la impiden.
Así
reza el inciso a) artículo 3°
de los fines de nuestro Partido. Por ahí
se nos ha acusado de ser desleales al Partido Colorado. Nada más falso, ciudadano Presidente, somos
absolutamente coherentes y leales al Partido Colorado, porque estamos siendo
consecuentes con lo que hemos prometido a esa gran masa de afiliados que nos ha
votado en el mes de diciembre, el 1°
de diciembre para ser más específico.
Por
eso, ciudadano Presidente, entiendo yo que no debemos dejarnos llevar por un
interés inmediatista, coyuntural; debemos recordar que esta Constitución debe
durar por muchos años. Por eso, para
finalizar, manifiesto, ciudadano Presidente y compañeros Convencionales, que
nos sometemos al veredicto de la historia y ratificamos la propuesta del Partido
Colorado para este Artículo 119. Muchas
gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Domingo Delvalle.
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
DELVALLE: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales: por la premura del
tiempo que nos conceden en el uso de la palabra, voy a hacer una aclaración en
honor a la verdad, a un correligionario y periodista, integrante como
Convencional de nuestra bancada. Ha
citado una norma que se ha impuesto en la Comunidad Económica Europea, en
comparación a lo que va a ser el Paraguay en la integración al MERCOSUR.
Distinguidos
Convencionales: es cierto, al Paraguay
se lo va a exigir en un futuro próximo a integrarse en un Estado supranacional
y habrá ocasiones en que los paraguayos deberemos de emitir nuestro voto en
forma conjunta con ciudadanos de otros países, pero ciudadanos Convencionales,
no es menos cierto que la nacionalidad de todos los paraguayos en alguna medida
deben ser precautelada y eso está internacionalmente reconocido así como lo
reconoce la Comunidad Económica Europea.
Ciudadanos
Convencionales: he vivido muchos años en
Europa y precisamente he sido testigo de muchas votaciones y en algunos casos
en donde específicamente en el país donde me tocó vivir, en Alemania, los
alemanes han tenido que votar por normas específicas integrantes de la
Comunidad Económica Europea y en ese caso yo creo que los colorados en ese
sentido hemos dado un gran paso en dar un rango constitucional para que los
paraguayos en el futuro podamos decidir libremente el destino de nuestra
Nación.
Me
decía algunos profesores, Delvalle nunca te equivoques en la historia. Hasta el año 1939, Carlos Casado de la
Argentina, dictada quién iba a ser el Presidente de nuestra Nación.
Ciudadanos
Convencionales: la historia nos
demuestra los grandes sinsabores que ha pasado esta nación para llegar a ser lo
que hoy es, en función de lo que quiere en un futuro cercano.
No
debemos soslayar que estamos frente a dos grandes monstruos, que a cualquier
precio nos quieren integrar a su Provincia o Estado. Si en alguna medida debemos de conservar
nuestra nacionalidad, este es el momento de consagrar quiénes somos realmente
los paraguayos y quiénes queremos el bien para nuestro país. Cuando alguien se levanta y pide un derecho,
yo consulto a la intelectualidad de mis compañeros Convencionales, si solamente
un derecho se puede reclamar, se dice que solamente en la Argentina hay 600.000
paraguayos.
En
esta pobreza de país si pudiera integrarse 20.000 0 25.000 paraguayos, médicos,
arquitectos, ingenieros, para colaborar en la agricultura, en la ganadería,
etc. ¿Eso no es posible acaso? ¿Por qué ellos no vienen a labrar su destino
en esta Nación, acaso la frontera está cerrada en este momento? Para que nuestros derechos realmente
ejercitemos en nuestro país, o seremos siempre paraguayos, paraguayas allí
cruzando la frontera.
APLAUSOS...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Ciudadanos Convencionales, vamos a hacer un
poco de silencio en la sala. Apelo, por favor, al respeto de los ciudadanos
Convencionales para que pueda seguir en el uso de la palabra el ciudadano
Convencional.
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
DELVALLE: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales: no nos ofendamos más
entre paraguayos pero quiero recordar una anécdota histórica que quede como
legajo de los colorados: el 22 de
octubre de 1931 un puñado de jóvenes se presentó frente al Palacio de Gobierno
pidiendo la defensa de su patria.
Ciudadanos Convencionales: en
defensa de su patria cayeron también jóvenes y en ese sentido nosotros debemos
de una vez por todas decir que esta Nación debe ser libre y soberana en su
destino. Muchas gracias, ciudadano
Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Muchas gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Ismael Echagüe.
CIUDADANO CONVENCIONAL ISMAEL
ECHAGUE: Gracias, ciudadano Presidente.
INTERRUPCION...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Ciudadanos
Convencionales: orden en la sala, por
favor. No vamos a darle el uso de la
palabra, no inicie su exposición antes de que los ciudadanos Convencionales no
hagan silencio. Muy bien, adelante.
CIUDADANO CONVENCIONAL ISMAEL
ECHAGUE: Gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: como había manifestado
un preopinante, me he de manifestar en los mismos términos, pero es un joven
colorado que también en su momento ha conocido igual que muchos opositores los
sinsabores de una persecución cuando se desataba, no solamente sobre la
oposición paraguaya en los inicios de los años 1987, hasta el despertar del
golpe del 2 y 3 de febrero.
Mucho
se ha dicho y se ha hablado con relación a este polémico artículo, el Artículo
129, que estamos a punto de votar y de promulgar en esta Carta Política, en esta
Constitución que ha de servir como marco jurídico a nuestra República del
Paraguay.
Vengo,
ciudadano Presidente, vuelvo a repetir, para apoyar en todos sus términos el
Artículo 119, que está siendo propuesto por la Comisión Redactora, y recordarle
al mismo tiempo que no podemos en esta Constitución crear una nueva clase de
paraguayos. Por ello, quiero recordar a ese efecto el Artículo 333 y siguientes
de la ley N° 1/90, del Código
Electoral, que define y estipula los tipos de delitos electorales y sus penas y
en el Artículo 335 del mismo cuerpo legal en forma expresa y taxativa que me
permito recodar a los ciudadanos Constituyentes, estatuye los delitos
electorales no son excarcelables. Esta
afirmación de la ley, a partir de la promulgación de esta Constitución, se
convertiría,
ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales, en letra muerta.
Con
qué medios contaría el Estado para castigar o punir a los infractores de lo estipulado como delito
electoral. Señores: al institucionalizar
el voto en el amplio sentido de la palabra en el extranjero, todos aquellos
mercaderes de la política se estarían
rebuscando en el exterior y ¿Quienes controlarían, quiénes fiscalizarían
y quiénes castigarían a estos infractores?
Al apoyar la propuesta N°
2, ciudadanos Constituyentes, estamos dando vía libre a la asunción al gobierno
de la República de quienes pueden llegar a ella en base al fraude y a la
deshonestidad, mientras que aquí en el Estado paraguayo, en la República del
Paraguay estamos propugnando que las elecciones deben ser limpias y
transparentes.
Este
es el momento de evitar, vuelvo a repetir, la creación con rango constitucional
de los super paraguayos. No podemos,
ciudadanos Convencionales, crear una nueva clase, una nueva clase política
dentro ni fuera del país.
Ciudadanos
Convencionales, ciudadano Presidente:
conocemos y es de conocimiento de todos los paraguayos que varios de
nuestros compatriotas que residen en el extranjero, y si algo de verdad dijo un
preopinante, es que la mayoría de ellos vive en la más absoluta indigencia ejerciendo profesiones no muy remunerativas
tales como albañiles, estibadores, carpinteros, jornaleros. Con esto se demuestra, ciudadano Presidente,
ciudadanos Convencionales que precisamente estos compatriotas que residen en el
exterior no han llegado a la tierra prometida donde encuentran o donde
encuentren mejor remuneración al desarrollo de sus actividades particulares
para sostener a su familia.
Ciudadanos
Convencionales Constituyentes: sabemos que, si estos compatriotas -y podemos
asegurarlo aquí en este foro constitucional-
vienen a residir en nuestro país, pueden vivir también dignamente, y
seguramente en mejores condiciones que en las que viven en el exterior para poder
sostener a sus familias. Si no queremos
que unos super paraguayos, super ciudadanos, que no reconocen ni se
someten a las leyes para quienes habrá
solamente derechos y no obligaciones, decidan la suerte de nuestro presente, de
nuestro futuro y el futuro de nuestros hijos, pido a los ciudadanos
Convencionales de la Bancada de mi Partido y a los que han momentáneamente
desertado de ella y a los Convencionales de la oposición, apoyemos la propuesta
N° 1 tal cual nos
viene de la Comisión Redactora. Muchas
gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano Convencional.
Solicito
con todo respeto de los ciudadanos Convencionales que sean un poquito más
breves en sus exposiciones, porque hay todavía una frondosa lista de
oradores. Vamos a dar lectura por Secretaría.
CIUDADANA SECRETARIA: Ciudadanos Convencionales Víctor Manuel
Nuñez, Luis Garay, Eduardo Rodríguez, Miguel Abdón Saguier, Esteban Caballero,
Carlos Podestá, Carlos Avalos, Aníbal Saucedo Rodas, Ricardo Franco Lanceta,
Domingo Laino, Timoteo González Galván, Euclides Acevedo, Diógenes Martínez,
Martín Colarte, Miguel Angel Riquelme, Carlos Alberto González, Gonzalo
Quintana, Eusebio Ramón Ayala, Guillermo Heisecke, Oscar Paciello y Cristina
Muñoz.
INTERRUPCION...
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Un momentito.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Carlos Podestá.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
PODESTA: Gracias.
Solicito
se elimine mi nombre de la lista de oradores, para colaborar con el debate.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Carlos Avalos.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
AVALOS: Yo retiro.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Muy bien, gracias, ciudadano
Convencional. El Convencional Carlos
Avalos retira, entonces.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Martín Colarte.
CIUDADANO CONVENCIONAL MARTIN
COLARTE:
(Respuesta no audible).
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Muchas gracias, ciudadano Convencional.
INTERRUPCION...
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Ciudadano Presidente: una vez más che
arrogata tapichakuera Convencionalpe ja poihägüä yvyture ña neñe'e ja jekukovo
añetete propuesta ña de gustaba, siempre con el debido respeto al semejante, a
los amigos Constituyentes, porque peicha jahärö lo mita che upeva la che
quebranto ja'e vakue en la primera participación, peicha que jajapo lo mita
tembiapoguasu o confia ñandeve ñande pueblo ña moguahehaguame torypa joayhupe
enteroveva maymava paraguayo. Gracias,
Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Aunque no estaba en el uso de la palabra,
siempre queremos escuchar el dulce idioma guaraní. Así que es una excepción. Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Víctor Manuel Nuñez.
CIUDADANO CONVENCIONAL VICTOR
MANUEL NUÑEZ:
Declino el uso de la palabra, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Muchas gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Luis Garay.
CIUDADANO CONVENCIONAL LUIS
GARAY: Gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadano
Convencionales: voy a ser breve en homenaje al tiempo. Probablemente este artículo ha permitido la
participación y brillantes exposiciones, pero al mismo tiempo infelizmente
algunos expositores a quienes guardaran respeto por su lucha, por su coraje en
pro de la democracia, exageraron en sus términos y cayeron en términos
descalificatorios que probablemente no es el espíritu de los Convencionales
Colorados polemizar ni mucho menos descalificar.
Queremos
una patria nueva. Por eso estamos
bregando por una Constitución democrática y por eso entendemos que la
participación de la minoría es tan importante como la participación de la
mayoría. Alguien dijo que una
Constitución elaborada solamente por una parte es como una Constitución
minusválida y es probable que sea así, pero la conciencia llama a los que
conforman el grupo minoritario a entender que la mayoría también tiene su forma
de razonar, su forma de interpretar, y en algún momento hemos de encontrarnos
en la necesidad de recurrir al escrutinio para dirimir nuestras ideas. Dentro de ese pensamiento me he permitido
hacer uso de la palabra para referirme a este artículo en cuestión que necesita
algún tipo de comparaciones para llegar a reafirmarnos en lo que inicialmente
hemos optado. El Presidente del Partido
Liberal Radical Auténtico, en su exposición, se ha preguntado qué hubiera sido
el resultado de los comicios del 1°
de diciembre si el Partido Colorado incluía en su proyecto el Proyecto Base que
hoy la bancada colorada está apoyando, y traigo a colación el diario de
sesiones en donde ya en la Comisión de Redacción se trató este tema y me
permito leer las expresiones del
ciudadano Convencional Gustavo Laterza, cuando se refiere a este tema y él dice
que la cláusula que se ha introducido acá en el proyecto tal como viene de la
Subcomisión N° 2 y que se le
atribuye al Partido Liberal Radical Auténtico tampoco existe en el proyecto del
Partido Liberal Radical Auténtico y esto hay que aclararlo y probablemente esta
confusión proviene del hecho de que nos ha visitado una delegación de
paraguayos residentes en el extranjero, entre los cuales también había
febreristas y colorados, y nos ha hecho una solicitud especial de que nos
acordemos de ellos en el momento de sancionar el derecho al sufragio.
La
misma pregunta hago: qué hubiera sido y
cuál hubiera sido el resultado si el Partido Liberal Radical Auténtico incluía
en su proyecto esto que aparece en la Subcomisión, y es bueno recordar un
adagio "el que esconde lo que es y el que simula lo que no es, no tiene
nada que aprender de la hipocresía".
Sinceridad antes que nada y hay una ley física "a toda acción
corresponde una reacción, de igual magnitud, pero en sentido
contrario". Ciudadanoss: a pocos
días estaríamos tratando un artículo, el Artículo 155 en donde habla de que el
Gobernador y la Junta Departamental serán electos por votos directos de los
ciudadanos radicados en cada municipio.
Para ser Gobernador y ser miembro se requerirá ser nativo del
departamento con residencia en él, por lo menos por tres años como mínimo. Alguna razón habrá existido para que los
miembros de la Comisión Redactora
entendiera que para votar y ser votado
tendría que tener residencia.
Concluyo,
ciudadano Presidente, con esta exposición, para señalar que coherente es aquel
que dice lo que piensa y hace lo que dice.
Muchas gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Eduardo Rodríguez.
CIUDADANO CONVENCIONAL EDUARDO
RODRIGUEZ:
Gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: yo voy a ajustarme
estrictamente al tiempo que me permite hacer uso la Presidencia. Quisiera empezar con una breve anécdota de la
antigüedad, perdida ya en la bruma del tiempo, que cuenta que a un esclavo
llamado Sopo le preguntaron si que era la cosa más hermosa del mundo y dijo la
lengua, porque mediante ella el hombre comunica sus ideas y marca un entendimiento
con otro semejante; cuando le preguntaron cuál era la otra cosa más horrenda dijo también la lengua, y
explico, porque con ella el hombre intriga, miente y ofende.
Es
raro cómo acá nosotros hacemos uso de la lengua para tratar de confundirnos,
para tratar de engañarnos y para tratar de ofendernos con tanta facilidad. Hay hombres que usan de la lengua por el
sentimiento y yo he tratado siempre, he tratado, aunque a veces no lo consigo,
de usar de la lengua con la razón. Un
preopinante, cuyo nombre, por respeto, no voy a citar, hace una pequeña
revisión histórica y me parece extremadamente peligroso hacer una revisión
histórica parcialista interesada y mal intencionada reivindicando la lucha de
ciertos grupos y olvidando deliberadamente la lucha de otros grupos como la de
los estudiantes que cayeron un 23 de octubre reclamando la defensa de la
heredad y reclama la reivindicación de hombres que vinieron a luchar y a
asesinar a sus propios hermanos y ofende deliberadamente a una facción
política.
Yo, ni siquiera me permito por respeto
nombrar a qué Partido político pertenece ese preopinante, porque amando
profundamente mi Partido como lo amo porque creo que es la alternativa válida
para esta nación, respeto las demás ideologías políticas porque creo que todos
los Partidos políticos propenden al bien común, o no tendrían razón de
ser. Son distintos caminos que estamos
recorriendo para buscar un futuro mejor para nuestra nación y en ese mismo
concepto debemos aprender a respetarnos y a no ofendernos, y respetar los
sentimientos políticos de cada ciudadano.
Hablan acá de coherencia; y un amigo mió reclama ¿coherencia, yo
pregunto coherencia con el pasado, coherencia con el presente o coherencia con
el futuro?; porque el mismo marca como evidencia y se basamenta en un tratado
del MERCOSUR que busca la integración y yo sí quiero ser coherente con eso.
¿Qué sucederá cuando nuestros países firmantes de ese tratado se integren
definitivamente y desaparezcan las nacionalidades así como tienen que desaparecer? Cuando los hombres transiten libremente de un
país a otro y ejerzan la profesión libremente, sin otro requisito que el título
que lo habilita sin tener en cuenta la nacionalidad de la cual proviene, qué va
a pasar entonces que a cada ciudadano le va a interesar el ámbito juridiscional
donde esta radicado para ejercer su derecho cívico y ciudadano, porque va a ser
una gran nación, y ahí eso va a delimitar
el ámbito donde cada quien va a elegir su derecho electoral, el ámbito
de la radicación como desde luego es un viejísimo derecho como
consuetudinariamente lo estamos ejerciendo.
Yo
he nacido en un pueblo y radico en otro pueblo y ahí ejerzo mi ámbito natural
electoral, porque estoy inscripto ahí.
Entonces nosotros sencillamente estamos siendo coherentes con lo que ha
de venir; no estamos violando ningún derecho porque quién puede osar negarle
sentimentalmente la ciudadanía a alguien que se considera paraguayo allá en la
India o en la Argentina, pero podremos darle la misma oportunidad de voto al de
la Argentina y al de la India, o vamos a hacer discriminación. Esas son preguntas que debemos hacernos y no
tratar de, interesadamente, electoralistamente, dirigir nuestra opinión a una determinada corriente, a una
determinada actitud eventual. El
MERCOSUR va a hacer que desaparezcan
las nacionalidades y va a hacer el
ámbito de residencia el que marque la pauta donde uno va a ejercer su derecho y
someterse a los deberes en el lugar donde habita. Eso es cuanto quiero expresarles y pedirles
disculpas a los de la bancada, si la vez pasada solicité el cierre de la lista
de oradores por suficiente ilustración, es que ndo valey ñañemotaby lo mita
jaicuaa poräitereiko enterobeba mba'epa la jaipotava ha mba'epepa la jahechav,
ha ña ñembotaby mo'a jajuhaguere ñahësä'yiño koape ñandeapytepe ñe'ecuaa ña
ñembotabyhägüä oñenboha pysakueryjajua.
INTERRUPCION...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Permiso, ciudadano Convencional, vamos a
procurar ser concretos y hacer la defensa de lo que estamos hablando y no insistiendo... Me está preocupando un poco que se está
comenzando a entrar otra vez despacito en el tema, en el plano personal. Tenemos que tratar de enfocar nuestras
discusiones sobre los puntos concretos y no entrar en el tema de bancada a
bancada, por favor le pido con todo respeto...
CIUDADANO CONVENCIONAL EDUARDO
RODRIGUEZ:
Ciudadano Presidente: dispongo de tres minutos, según mi reloj para
hacer uso de mi tiempo...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Si, cómo no, le vamos a volver, disculpe,
ciudadano Convencional le vamos a
devolver ese tiempo que yo estoy perdiendo. Gracias, adelante.
CIUDADANO CONVENCIONAL EDUARDO
RODRIGUEZ: Muchas
gracias, por recordarme. Pero no estoy
haciendo alusión personal. Sencillamente
estoy llamando a una reflexión para que podamos no sólo en este punto, sino en
muchos otros puntos, realmente fijarnos en lo que queremos para el futuro y en
lo que va a ser el futuro, porque evidentemente todas las facciones políticas o
Partidos políticos que estamos acá tenemos intereses jugados y esa es una
verdad que muchos quieren esconder como, dijo un preopinante, una cosa es lo
que mostramos y otra cosa es lo que
somos y yo soy lo que ven, un hombre sincero, amante de mi Partido, por sobre
todas las cosas, amante de mi país.
Ciudadanos,
me ratifico en que la radicación es la que marcará la pauta del ámbito
electoral del futuro. Muchas gracias, y
gracias a usted, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN EJERCICIO
DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Miguel Abdón Saguier.
CIUDADANO CONVENCIONAL MIGUEL
ABDON SAGUIER:
Gracias, ciudadano Presidente.
Voy
a empezar mi exposición invitando a los colorados a que voten por el proyecto
de Constitución Colorada que ofrecieron al electorado, no porque no se pueda
cambiar acá en el transcurso de las deliberaciones como ocurre en cualquier
democracia, sino sencillamente porque se ha modificado ese proyecto del Partido
Colorado para empeorar la formulación de este artículo sobre el que estamos
discutiendo, ciudadano Presidente.
Se
ha hablado acá con absoluta razón de que una Constitución es un sistema y que
ese sistema significa que el todo y las partes tienen que tener un mismo sentido y no caer en
contradicciones. Empezamos, y se ha
citado, ya pero vale la pena repetir el Artículo 1°
que define que tenemos como forma de gobierno una democracia participativa, y
me pregunto. ¿Es ésta la democracia
participativa que se va a sustentar sobre la proscripción de los paraguayos que
viven en el exterior?
Se
han aprobado artículos que nos dicen que los ciudadanos tiene el derecho a
participar, dice el Artículo 116, en la vida pública y de esta manera nosotros estamos realizando, estamos consagrando
disposiciones que van a ser coherentes con esos otros artículos, con los
Artículos 146, inciso 1) que habla de quiénes son las personas de nacionalidad
paraguaya natural, con el Artículo 140, inciso 1) que habla de quiénes son
ciudadanos.
En
rigor de verdad, ciudadano Presidente, estamos consagrando una norma que
significa lisa y llanamente la suspensión de la ciudadanía, aún cuando eso, la
suspensión, aparezca en los tres incisos del Artículo 147, este artículo tal
cual nos presenta en este momento significa una suspensión, de hecho aún cuando
no lo diga, entonces, ciudadano Presidente creo que con justa razón se reclama
coherencia pero no solamente hay que ver la coherencia lógica, tenemos que ver
también la coherencia valorativa, la coherencia de la justicia. Desde todo punto de vista, este artículo es
una injusticia.
En
el pasado, ciudadano Presidente, por la lógica del número y de las
conveniencias transitorias, hemos sido incoherentes éticamente y nos colgamos
de los faldones de un General para mantenernos en el poder, y quiera Dios,
ciudadano Presidente y ciudadanos Convencionales que en el día de hoy no nos aferremos a una
adefesio jurídico para mantenernos nuevamente en el poder. Estamos redactando una Constitución que tiene
que ser un reaseguro para todas las corrientes y para todos los ciudadanos
paraguayos. No podemos, por intereses
mezquinos, estar cometiendo esta agresión a nuestros compatriotas. Hablamos todo el día de patriotismo y yo me pregunto,
ciudadano Presidente, ¿qué es la Patria?
Son cuestiones electorales transitorias, son intereses sectarios, son
intereses vinculados directamente con los detentadores del poder. Alguien dijo,
un gran hombre de la historia paraguaya, dijo:
para mí la patria son mis compatriotas, son mis conciudadanos; y para
ello y para todos ellos estamos haciendo la Constitución. No cometamos esta agresión, ciudadano
Presidente. Por eso insto a los
Convencionales Constituyentes del Partido Colorado que voten por el proyecto
del Partido Colorado, que no caigan en
la arrogancia del número. Hoy son
mayoría, pero las mayorías son circunstanciales, pueden cambiar, y esto que hoy
creen que les puede convenir, el día de mañana puede ser un impedimento para el
desarrollo de sus legítimos intereses políticos.
No
caigamos en la soberbia de las mayorías que olvidan estos principios,
aferrémonos a esos principios que ésos si son imperecederos, que ésos no
cambian. Los gobiernos, los hombres son circunstanciales,
pero estamos haciendo un instrumento jurídico y político para toda la patria,
para todos los compatriotas. No caigamos
en la pequeñez ética de anteponer nuestros
intereses electorales. No venimos
aquí a engañarnos. Todos tenemos
legítimos intereses políticos, pero no
tratemos de hacer prevalecer esos intereses sobre la injusticia, sobre
una norma que va a causarnos un grave daño a todos los políticos, porque
estaríamos consagrando una discriminación sencillamente odiosa e injusta,
ciudadano Presidente.
Yo
insto a mis compatriotas de las bancadas, de todas las bancadas a que seamos coherentes, no coherentes
solamente desde el punto de vista de la lógica, no solamente desde el punto de
vista formal, sino desde el punto de vista de los valores y comprendamos que
esos compatriotas, en su mayoría, en su gran mayoría si se ha ido del país, no
ha sido porque ellos quisieron; no ha sido por impulsos de vagabundeos. Se han ido impulsados por necesidades
perentorias de sobrevivencia, ciudadano Presidente. Comprendamos, no va a caer aquí en el ataque
político señalando quienes son los
responsables de las situaciones socio-económicas que han impulsado la
emigración masiva de nuestros compatriotas; queremos mirar hacia adelante,
queremos juntos consagrar normas que hagan justicia a todos los
paraguayos. Por eso, ciudadano
Presidente, es que pedimos que se apoye el proyecto del artículo referente a
los electores que aparece en el proyecto del Partido Colorado. Muchas gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Esteban Caballero.
CIUDADANO CONVENCIONAL ESTEBAN
CABALLERO:
Gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: en esta plenaria se ha
expresado una serie de argumentos que han dado en mi opinión prueba de que la
inclusión de una cláusula que estipule las radicación como un requisito para
ser elector a nivel Constitucional está fuera de lugar. Se han, también, esgrimido argumentos que presentan precedentes en nuestros propios
Partidos, donde ya se ha concedido ese derecho
como elector. De manera que es evidente
acá, ciudadano Presidente, que la razón que esta detrás de la introducción de
esta cláusula tiene estrecha relación con un cálculo político que están
haciendo aquellos que apoyan un cálculo político que tiene que ver con las
elecciones de 1993, de manera que se está haciendo una Constitución en función
a cuestiones meramente coyunturales.
Y
un argumento que no se ha esgrimido hasta ahora, y es el que voy a hacer y por
eso me he atrevido a aprovechar mi derecho al uso de la palabra, es cuestionar
ese cálculo político que se está haciendo. ¿Quién está seguro realmente de que
la inclusión de los paraguayos radicados en el extranjero como electores, va a
ir en detrimento del Partido Colorado?
¿Dónde está la prueba factible de esa previsión que se está
haciendo? Hasta ahora nadie me la ha
presentado en forma concreta. Todo es cuestión de rumores.
Por
otro lado, cuando se excluye a los paraguayos radicados en el extranjero a
nivel constitucional, se lo está haciendo por varias décadas quizás, y esos
paraguayos radicados en el extranjero van a seguir solicitando ese derecho por
muchos años. Sus hijos también lo van a
hacer; de manera que se está, en ese cálculo político coyuntural, dejando de
lado, absolutamente, un cálculo político a largo plazo. Esa exclusión, que
estamos haciendo hoy, va a afectar a aquellos que apoyan por varias décadas, y
elecciones no solamente vamos a tener en el 93, sino también cada cinco años,
aún si existe una intervención o un golpe, luego retomaremos el impulso
democrático y van a volver a haber elecciones.
Además,
no solamente se está excluyendo y se está creando un electorado hostil a
aquellos que proponen esta cláusula en el extranjero; también se está creando
un electorado hostil aquí, en el Paraguay. ¿Por qué? Porque esos paraguayos tienen parientes,
tienen hermanos, primos, y esa gente solidaria con su gente en el extranjero, y
esos paraguayos que sí están radicados aquí en el Paraguay, van a utilizar el
derecho que se les negó a sus familiares en el extranjero para castigar a
aquellos que han excluido a sus parientes.
Hace
poco, como un ejemplo nada más, en un programa de televisión, se hizo un rápido
sondeo, y el ciudadano Secretario, Diógenes Martínez, estaba presente. En dos
horas se le preguntó a doscientos ochenta paraguayos radicados en el Paraguay
si estaban a favor de que los paraguayos radicados en el extranjero voten.
Doscientos estaban a favor de que los paraguayos radicados en el extranjero
puedan votar y ochenta estaban en contra, y los que llamaron fueron paraguayos
radicados aquí. De manera que se está perdiendo el electorado en el extranjero
y se está perdiendo el electorado en el Paraguay.
Y
este llamado de atención, yo no lo hago a los viejos jerarcas del Partido, ni a
los oligarcas del Partido, lo hago muy especialmente a la juventud del Partido,
porque nosotros, como jóvenes, no tenemos nuestra última oportunidad en el
93. Nosotros, como jóvenes, vamos a
tener que rendir cuentas al electorado durante veinte, veinticinco años. Y a
esa gente es a la que yo me estoy dirigiendo, porque, en el fondo, la cuestión
aquí es una cuestión política, evidente, no tiene absolutamente nada que ver
con el raciocinio jurídico que se puede hacer de las cosas. Y ese cálculo
político, a ese cálculo político es al cual me estoy refiriendo.
Y
en mi opinión, el Partido Colorado también puede aprovechar esa posibilidad y
hacer campaña electoral. Vayamos a la
competencia electoral y no nos cerremos, porque todos estamos interesados en
que el Partido Colorado siga en las competencias electorales, que siga siendo
una pieza de la democracia que estamos tratando de consolidar, que no se vaya
cerrando y tomando esa actitud insular que han mencionado acá, porque a nadie
le conviene tener un miembro de una sociedad política que no quiere competir en
forma democrática. Muchas gracias, ciudadano Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA:
Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Aníbal Saucedo Rodas.
CIUDADANO CONVENCIONAL ANIBAL
SAUCEDO RODAS: Ciudadano Presidente: Creo que la mayoría de
los Convencionales nos pusimos de acuerdo hoy para introducir en nuestra
exposición la palabra "coherencia". Y me parece razonable, porque lo
mínimo que debemos exigirnos, los Convencionales, es la coherencia. Y cuando
hablo de coherencia no me estoy refiriendo a los compañeros que han variado o
apartado su postura del proyecto del partido, ni siquiera me estoy refiriendo a
los Convencionales que han defeccionado de su propio proyecto, porque al fin y
al cabo están en su derecho de hacerlo. Cuando hablo de coherencia o cuando
exijo coherencia, lo estoy haciendo en el sentido de respetar lo que nosotros
mismos hemos aprobado aquí.
En
el Artículo 117, hemos consagrado el sufragio universal y, a renglón seguido,
pretendemos caer en una grave contradicción al restringir el sufragio.
En
el Artículo 129 hemos aprobado el servicio militar obligatorio o el servicio
civil alternativo para todos los paraguayos sin importar si residen o no en el
país.
Y
en una extraña paradoja, esos conciudadanos o compatriotas, que vienen del
exterior a cumplir con ese servicio, una vez habilitados para sufragar, se les
impide ese derecho.
Esta
mañana nomás, aprobamos el Artículo 148, donde se habla de que la ley, o queda
en manos de la ley establecer las normas sobre adquisición, recuperación y
opción de la nacionalidad así como sobre la suspensión de la ciudadanía. Y en
este momento queremos dar rango constitucional a un cercenamiento, al
cercenamiento de un derecho elemental de la ciudadanía.
Yo
creo en la inteligencia, ciudadano Presidente, ciudadanos Convencionales, creo
en la inteligencia, porque ha hecho posible la evolución de la democracia,
porque solamente en estas condiciones, honestas condiciones, se pudieron
superar muchos factores que atentan contra la participación y el pluralismo.
Sólo así se pudo dejar atrás la Constitución de 1791, de Francia, que dividía a
los ciudadanos entre propietarios y no propietarios, teniendo derecho solamente
los primeros a votar.
Solamente
mediante la inteligencia y el desarrollo de la democracia fue posible superar
el sufragio capacitario, que solamente permitía el voto de aquellos ciudadanos
con un determinado nivel cultural. Solamente la democracia hizo posible superar
esa etapa de prohibición a las mujeres y a los hombres de color a ejercitar su
derecho al voto.
A
las puertas del siglo XXI, en este Paraguay, que quiere ser democrático y
aspira a ser moderno, no podemos, ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales, aprobar una cláusula que, precisamente, riñe con la modernidad
y atenta contra la democracia.
APLAUSOS...
Al
sugerir que esta disposición se remita a la ley, no nos estamos lavando la mano
de ninguna manera. Nuestra postura, en ese sentido, es clara. Y cuando asumimos
una postura en esta Convención, no lo hacemos buscando el aplauso de la
oposición, porque nuestros principios se alimentan de ideas y no de aplausos,
ciudadano Presidente.
En
el incidentado plenario, que felizmente el incidente al parecer fue superado,
muchos Convencionales dijeron que sería injusto que paraguayos residentes en el
exterior decidieran el futuro de un país en el cual no están viviendo. A ellos
yo les digo, ciudadano Presidente, que es mucho más injusto negar el derecho a
esos paraguayos a votar por el país en el cual les gustaría vivir. Muchas
gracias.
APLAUSOS...
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Ricardo Franco Lanceta.
CIUDADANO CONVENCIONAL RICARDO
FRANCO LANCETA: Gracias, ciudadano Presidente.
El
tema que estamos analizando, evidentemente, debe estar más allá de las pasiones
y entrar en el campo estricto del razonamiento y de una normativa jurídica, que
en este caso muy particular, dé respuesta a una demanda de la historia. Los que
somos partidarios del constitucionalismo histórico, vemos con mucha claridad,
ciudadanos, y oímos con mucha claridad, que acá hay mucho ruido también. Vemos con mucha claridad.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Disculpe, ciudadano Convencional.
Por
favor, ciudadanos Convencionales, vamos a atender al que está exponiendo.
CIUDADANO CONVENCIONAL RICARDO
FRANCO LANCETA: Quiero
puntualizar algunas cosas, porque no quisiera que como paraguayos, todos
quienes estamos aquí reunidos en esta Asamblea, carguemos ninguna culpa,
ninguna responsabilidad. No quiero
politizar el debate, ni está en mi intención hacerlo, y en ésto actúo con toda
holgura, porque no pertenezco a ningún partido político y respeto a todos, pero quiero puntualizar algunas
circunstancias. Cuando yo era chico, leí un libro escrito, si mal no recuerdo,
por el Dr. Juan Laconich, que se llamaba "El Paraguay mutilado". Me
quedó el gráfico de lo que era geográficamente este país antes de las guerras y
de lo que fue después de las guerras. No quisiera yo que, por un subconsciente
político, -que es legítimo además, y lo
comprendo- de uno u otro sector, estemos dando rango constitucional a algo que
puede calificarse en la historia como la mutilación ciudadana del
Paraguay. No estaría dispuesto a asumir
esa responsabilidad y entiendo que a ningún Convencional le gustaría
hacerlo. Entiendo que en esta materia,
evidentemente, si yo tuviera que hacer un razonamiento consecuente, con las
demandas de la historia y de la realidad sociológica de este país, que partido
en dos el país de adentro y el país de afuera, pero como quiera que sea, el
país de afuera es tan paraguayo como el país de adentro. Me consta, porque vi
mucha veces a mujeres paraguayas, hijas del exilio, venir al Paraguay a tener
sus hijos para que la partida de nacimiento de ese ser que nacía en el
extranjero, o que se gestaba en el extranjero pudiera nacer en esta Patria.
Evidentemente,
cuando los hijos de paraguayos están en edad del servicio militar, son los
padres los que mandan a cumplir con esta obligación. Tienen el sentido del
deber.
Cuando
la Guerra del Chaco, militares que estaban exiliados se presentaron
inmediatamente, superando cualquier diferencia o cálculo político, a prestar su
contribución en la defensa de la heredad nacional. Aún más, el ejército de San
Martín se formó con argentinos hijos de paraguayos, que eran consecuencia de
las guerras civiles en este país. Esa es nuestra historia, señores. Hagamos una
Constitución respondiendo a esa realidad y al margen de todo cálculo político.
No es ese el concepto que debe presidir el análisis de este artículo.
Si
yo tuviera que expresar mi pensamiento con un
sentido de equidad, no solamente expresaría mi conformidad porque no
estemos consagrando en la Constitución una prohibición del ejercicio más
sagrado de los derechos, que es el sufragio y que hace a la condición del
ciudadano y sabemos que el ciudadano es una consecuencia de su condición de
nacional. Yo estaría, inclusive, incluyendo expresamente que el derecho del
sufragio se extiende también a los paraguayos residentes en el exterior, porque
eso sería lo congruente y lo justo. No lo voy a proponer, es un pensamiento que
lo expreso, simplemente, para establecer un punto de equilibrio de cuál debía
ser el tratamiento constitucional justo a este tema. Sin embargo, entiendo y
comparto plenamente la opinión de quienes estiman que establecer la prohibición
de votar, en la Constitución, es, evidentemente, un manchón que no podemos
firmar en esta carta que estamos haciendo para la democracia paraguaya.
Y
eso, en consecuencia práctica, significa:
paraguayos radicados en el territorio nacional. Por eso, estoy
plenamente de acuerdo con la propuesta que viene de la Comisión de origen con
la exclusión de paraguayos radicados en el territorio nacional, lo que se compadece plena y literalmente con
el texto de la propuesta N°
2, que sería, evidentemente, la propuesta más equilibrada para remitir a la ley
el tratamiento de este asunto.
No
tengamos mucha preocupación electoralista en este tema. No hay que imaginar que los seiscientos mil,
los quinientos mil o trescientos mil paraguayos en edad de votar, que puedan
vivir en el exterior, van a concurrir a las urnas. Concurrirán los que están
más interesados en hacerlo. No hay que creer que hay que montar una gran
infraestructura con un apoyo logístico financiero fuerte. Todos los
connacionales de otros países, y lo he visto a lo largo de todos los países de
América, votan en sus Consulados en una sola urna, que se precinta y se manda a
la Junta Electoral Central para que el escrutinio se haga en el país de origen.
Es un procedimiento simple que, simplemente, rubrican los que actúan como
veedores en el local del Consulado.
Por
eso, ciudadanos, invito a que en un acto de renunciamiento a cualquier
preconcepto o prejuicio, que no es la mejor manera de entendernos sobre este
tema, simplemente optemos por la propuesta NN°
2, porque es una propuesta de equilibrio, es una propuesta que no nos crea
contradicciones en la sistematización del clausulado constitucional y que,
evidentemente, no castra ningún derecho. Es peligroso que una Constitución
contenga una cláusula muy puntual, como es ésta, que niega el ejercicio del más
sagrado de los derechos, cual es el sufragio para los ciudadanos. Gracias,
ciudadano Presidente.
Aplausos.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Gracias, a usted.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Domingo Laíno.
CIUDADANO CONVENCIONAL DOMINGO
LAINO:
Ciudadano Presidente: solamente para aclarar unas cuestiones, ya que he sido
aludido por varios de los preopinantes.
En
primer lugar, ya el Presidente de mi Partido había expresado su reconocimiento
por la actitud que ha asumido la bancada colorada, al permitir admitir la
reconsideración de este artículo tan interesante, tan fundamental. Voy a hacerlo, y esto vale para el
compatriota Convencional Rodolfo Gill Duarte, perdón que lo cite.
Por
otra parte, quiero también señalar, ciudadano Presidente, que nunca me ha
movido el rencor ni ánimo de insultar ni agredir a nadie en el pasado ni en la
tarde de hoy. En ese sentido, quiero decir al ciudadano Convencional, también,
de la bancada mayoritaria, compatriota Insaurralde, que no me ha movido,
absolutamente, rencor alguno. También
quiero señalar y reconocer un error involuntario, fue un lapsus. Yo hablé de un dólar por hectárea en las
tierras vendidas a Somoza y realmente fueron diez dólares, lo admito y lo
acepto.
APLAUSOS...
Pero,
ciudadano Presidente, me he equivocado cuando me he referido sobre el tema de
que esta adjudicación fue una adjudicación realizada contrariando las leyes
vigentes en el país. También, ciudadano Presidente, y esto vale para el
ciudadano Convencional Luis Garay, perdón que lo cite, yo no he insultado ni
agredido a nadie. He leído, simplemente, parte del informe de la Contraloría
Financiera de la Nación en un documento que se ha publicado el 13 de mayo. Ahí
figura el ciudadano Convencional Carlos Podestá, perdón que lo cite, a pesar de
que él no ha mencionado nada al respecto, a la adjudicación a que se le hiciera
ilegalmente de ochocientas hectáreas de tierra en el sur del Monday, propiedad
muy valiosa, y me reafirmo, que el mismo texto del informe señala que este
señor Podestá tampoco es sujeto de la reforma agraria. Nada más, ciudadano Presidente. Muchas
gracias.
CIUDADANO VICEPRESIDENTE EN
EJERCICIO DE LA PRESIDENCIA: Muy bien. Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Timoteo González Galván.
CIUDADANO CONVENCIONAL TIMOTEO
GONZALEZ GALVAN: Sí, ciudadano Presidente.
Resta
poco que agregar con fundamento. Quiero pedir una moción concreta, ciudadano
Presidente. En oportunidad de votarse el artículo en reconsideración, solicito
que se haga en forma nominal.
Por
otro lado, ciudadano Presidente, quiero referirme, simplemente, sobre algunos
puntos que se están tratando en este, sobre este tema y se están tratando de
confundir algunos Convencionales. Entiendo, ciudadano Presidente, que existen
buenos y respetuosos paraguayos en el extranjero, y aquellos buenos que viven
fuera del país desde hace mucho tiempo, creo, sinceramente, no van a atreverse
a elegirnos nuestras autoridades.
Por
otro lado, ciudadano Presidente, algunos preopinantes tratan de confundir al
decir que se está negando un derecho inherente a la ciudadanía a aquellos
compatriotas. Quiero advertir, ciudadano Presidente, que el tema que nos ocupa
es un derecho eminentemente político, por supuesto, es un derecho a ser
ejercido bajo ciertas condiciones legales y de hecho.
Finalmente,
quiero advertir, ciudadanos Convencionales, que no se está absolutamente
negando el derecho a ciudadanía a nadie, ni aún a aquellos conciudadanos
quienes en algún momento osaron quemar nuestra bendita y sagrada bandera
nacional. Gracias, ciudadano Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene la palabra el ciudadano Convencional Carlos
Podestá, por haber sido aludido.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
PODESTA: Ciudadano Presidente: realmente yo pido
disculpas a la Convención, pero no puedo quedar callado ante la ignorancia
monumental de quien desconoce la ley.
Ciudadano
Presidente: son beneficiarios de la reforma agraria por la ley vigente todo
ciudadano paraguayo o extranjero que se dedique o decida dedicarse a las
actividades agropecuarias. De ninguna manera pude haberme adjudicado la
superficie de tierra que se me indica, porque yo no tenía, en aquel entonces,
condiciones de hacerlo.
Ciudadano
Presidente: debo hacer esta aclaración. Muchas gracias.
CIUDADANO PRESIDENTE:
Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Euclides Acevedo.
CIUDADANO CONVENCIONAL EUCLIDES
ACEVEDO:
Muchas gracias, ciudadano Presidente.
El
Convencional Benítez Florentín comenzó haciendo una cita Bíblica, citando a San
Juan, que al principio era el verbo. Yo creo que también se pueden hacer otras
citas Bíblicas, como me comentó alguien en los purgatorios de esta Convención,
diciéndome que no hay palabra mágica ni hipnótica que pueda cambiar las
posiciones ya asumidas, y dijo: podemos
citarnos Deis Margarita Salucerdos, y otro dijo; bueno, el que esté sin pecado,
que arroje la primera piedra.
Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
me van a disculpar, pero me siento agnóstico, momentáneamente fugado de
la teología. Y quiero decir, o quiero formular un par de reflexiones, que
guardan relación sobre este punto.
En
primer lugar, no voy a repetir las argumentaciones jurídicas a favor del
derecho que tienen los paraguayos residentes en el exterior a ejercer el
derecho político del voto. Simplemente, quiero hacerles recordar a los
ciudadanos Convencionales que hoy, y me sumo a esa letanía de preopinantes, que
esta mañana hemos concedido la posibilidad a extranjeros, con solamente tres
años de radicación, a adquirir la nacionalidad, y por lo tanto, los derechos de
la ciudadanía. Y nosotros, si aprobamos el artículo del Proyecto Base, en una
sencilla ceremonia y sin previo pago, vamos a expropiar una condición
fundamental, la parte más productiva de la soberanía del ciudadano, que es su
derecho al voto, con lo cual convertimos a los paraguayos residentes en el
extranjero como nacionales con ciudadanía con preservativo.
Ciudadano
Presidente: las argumentaciones formuladas hoy, de carácter jurídico, no tienen
ningún valor, porque el problema es político, y dijo muy bien el ciudadano
Convencional Eduardo Rodríguez, ¿para qué vamos a engañarnos? Y creo en que la Comisión redactora, yo no sé
si por franqueza o por cinismo -en cualquiera de los casos prefiero el cinismo
a la hipocresía-, los colorados dijeron claramente; no conveniri oreve la
paraguayo oia extranjerope ovota porque ikatu roperde. Esa es la realidad
política. Simplemente les quiero hacer recordar, y no es un problema de llamado
a la coherencia, en todo caso al instinto de sobrevivencia, porque este
pragmatismo electoral puede convertirse en supositorio político y los aplausos
de los poderes fácticos se pueden convertir en los responsos del mañana.
Me
llama poderosamente la atención, puedo llegar a entender pero no puedo llegar a
compartir, que personas que han vivido en el exilio, o cuyos padres a vuelta
del exilio ha muerto aquí, tengan que, de repente, negarles el derecho al voto
a personas que estuvieron como ellos, porque sería lamentable, que si ese padre
que murió aquí dentro, hubiera estado viviendo, probablemente, por culpa de sus
hijos, no pudiera ejercer el derecho al voto.
Y
conviene recordar también lo que decía Carlos Prestes, no para imitarlo, sino
para no hacer lo que hizo. Carlos Prestes estaba preso en una prisión del
Brasil y sus camaradas del Partido Comunista querían negociar, pero la Unión
Soviética se oponía, y decía Carlos Prestes:
con la Unión Soviética hasta en el error.
Acá
está un Convencional presente, que lo conocí antes de estar en la cárcel y
después estando en la tercera, en un calabozo de la tercera, y estaba con
cuarenta y dos días de huelga de hambre, pero en un testimonio de coraje y de
disciplina partidaria, seguía creyendo en los errores de su Partido. Con el
Partido Colorado hasta en el error.
Y
a mi me parece que este es el momento en que los compañeros colorados, y no me
refiero a los gerontes de todos los Partidos que lo existen, que los hay, y que
no me importa, porque ya van camino al sepulcro, pero sí me interesan aquellos
que no quieren cometer, que no tienen que cometer el pecado de la viuda hindú,
de suicidarse con el difunto quemado. Por eso, les hablaba de instinto de
sobrevivencia, más que de coherencia. Y el costo político va a ser elevado.
Y,
ciudadano Presidente, la suerte está echada, las posiciones son invariables, están
definidas, sólo nos queda el testimonio. Y quienes estamos por la moción de que
los paraguayos en el extranjero tengan el derecho al voto, simplemente,
queremos dar testimonio, no complicarnos con el delito del sectarismo, en todo
caso, con el compromiso de un porvenir democrático e irrevocable. Muchas gracias, ciudadano Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Diógenes Martínez.
CIUDADANO CONVENCIONAL DIOGENES
MARTINEZ: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales.
INTERRUPCION...
CIUDADANO PRESIDENTE: Por favor, orden en
la sala para escuchar al orador.
CIUDADANO CONVENCIONAL DIOGENES
MARTINEZ: En principio, quiero
desmentir la afirmación del preopinante, cuando afirma que en la Comisión
Redactora, la bancada Colorada había alegado clara y exclusivamente el tinte
partidario que pudiere tener esta situación.
No ha sido así, se ha alegado claramente y fundamentalmente por los que
mocionaron en principio este texto, razones de principios elementales de
decisión propia del pueblo que vive y sufre dentro del territorio nacional, el
derecho que tiene de decidir su futuro, su destino.
Ese
fue el argumento central, ahora yo no niego, ni desmiento que hayan
correligionarios, que interpreten esta norma desde el punto de vista político;
eso, desde luego no podemos prohibirles.
Pero, nosotros nos reafirmamos y lo va a hacer mejor el líder de nuestra
bancada en su momento, con la solvencia que le caracteriza, que este no tiene
precisamente, ni exclusivamente un tinte partidario.
Por
otro lado, quiero aclarar que el Partido Colorado se ha distinguido en estos
últimos tiempos como el Partido de hombres libres realmente, y nosotros los Convencionales Colorados hemos
recibido públicamente la misión de defender nuestra conciencia en los momentos
decisivos. No nos ata ningún voto
político, nos ata sí la conciencia clara que debemos defender aquí los derechos
de nuestro pueblo, nuestro pueblo paraguayo, que sufre y vive aquí en el
territorio nacional, repito.
APLAUSOS...
Cuando
algunos alegan nuestro proyecto partidario en los casos que ellos creen que
conviene al Partido, debemos aclarar, que el Presidente del Partido Colorado ha
dicho claramente que el Proyecto de Constitución presentado por el Partido
Colorado es nada más que un marco de referencia para los Constituyentes, en
absoluto ha sido un mandato para defenderlo aquí en plenaria, ni en la Comisión
Redactora; se ha dado la más plena libertad a los Convencionales.
APLAUSOS...
Así
es que mal está que se quiera esgrimir que aquellos que no responden a ese
proyecto se están desviando de la ideología, de la doctrina, del programa o de
un mandato del Partido; no es cierto. Y
eso es de público conocimiento.
Por
último, se habla de que este paso que da la bancada colorada, a través de su
mayoría, puede tener un costo político, y que debemos meditarlo; se ha meditado
y no tememos el costo político, porque si alguna vez este pueblo paraguayo cree
que el Partido Colorado le está dando la espalda, a buena hora, iremos a la
llanura; no tememos a la llanura. Ya
hemos estado, hemos sufrido y vamos a salir de esa llanura muy pronto otra vez. Muchas gracias.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Miguel Angel Riquelme.
CIUDADANO CONVENCIONAL MIGUEL
ANGEL RIQUELME:
Gracias, ciudadano Presidente.
Ciudadanos
Convencionales: he estado acompañando
muy atentamente las alocuciones de todos y de cada uno de los que me
antecedieron en el uso de la palabra. Y
realmente, vemos que hay dos bandos para decirlo así.
Solicito
a mis compañeros de bancadas, si me pueden prestar un poco de atención por
favor, porque los compañeros de la oposición ...
INTERRUPCION...
CIUDADANO PRESIDENTE: Orden en la sala y, por favor, si atienden al
orador.
CIUDADANO CONVENCIONAL MIGUEL
ANGEL RIQUELME:
Ciudadano Presidente, el compañero Convencional Diógenes Martínez ha
dicho toda la verdad que existe dentro de nuestra bancada, pero quiero
referirme a algo que quieren hacernos creer los compañeros que están por el
Proyecto N° 2, como dicen.
Primero,
no veo ningún lugar en que se les prohíba expresamente a los ciudadanos
paraguayos a que voten. Lo único que se
establece ahí, es que vengan a votar acá, y voy a poner como ejemplo, porque
vivo en la frontera y estoy en una comunidad donde existen más de diez y seis
mil electores brasileros y tengo como ejemplo vivo el quehacer diario de esa
gente. Y no voy a buscar palabra
rebuscada, porque no tengo capacidad para eso y voy a remitirme exclusivamente
a los hechos.
Estas
gentes, los brasileros, se van a votar en su país, y la junta electoral del
Brasil, manda cada año, más de trescientos a cuatrocientos ómnibus para llevar
a esa gente a que vote dentro de su territorio nacional, y eso no es mentira,
es una realidad que cada año en cada elecciones que suceden en el Brasil,
nosotros los que vivimos en la frontera, vemos con nuestro propio ojos, y que
yo, que vivo en ese lugar, no me gusta y siempre estoy en contra, que los
ciudadanos brasileros que residen en el Paraguay, dejan una ciudad fantasma en
esos días de elecciones, porque tienen que irse doscientos, trescientos,
quinientos hasta mil kilómetros, dentro del territorio brasilero para depositar
su voto. Eso es un ejemplo vivo que
tengo y muchos conocen los que vivimos en la frontera. Los asuncenos, a lo mejor no ven porque no
llegan las informaciones hasta acá.
Segundo,
el ciudadano Convencional Estanislao Llamas ha dejado una pregunta en el
aire. Ninguno de los compañeros
Convencionales de la oposición pudo refutar, nadie pudo contestar, porque no
hay argumento. Ha dicho que es una
quemazón política para los jóvenes, y yo soy joven, y en defensa de eso, de
todos nuestros compatriotas que sufren todo tipo de injusticias y cualquier
otro tipo de desavenencias económicas, es que prefiero quemarme políticamente y
defender que los votos tienen que ser emitidos dentro del territorio nacional.
Ciudadano
Presidente: desde ya, solicito a los
compañeros de mi Partido, de mi bancada, no se dejen impresionar por los
argumentos que sean esgrimidos aquí en esta tarde. Gracias, ciudadano Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Carlos Alberto González.
CIUDADANO CONVENCIONAL CARLOS
ALBERTO GONZALEZ: Ciudadano Presidente, ciudadanos
Convencionales: en este momento se
debate si en el ámbito constitucional debe o no incorporarse una norma que
prohíba al ciudadano paraguayo o residente en el exterior el poder votar en las
elecciones nacionales. No estamos
discutiendo una ley electoral, porque ocurre que gran parte de los argumentos
se centran en lo que podría ser un debate parlamentario, en torno a una ley
electoral.
Aquí
se debate, como dije, si debe o no incorporarse en el texto constitucional la
eventual prohibición de que los paraguayos residentes en el exterior puedan
votar. Cuando se redacta una
Constitución, es evidente que debemos recurrir al derecho constitucional
comparado. Es poco, ciudadano
Presidente, lo que se invente en una Constitución, salvo que se encuentre algún
tema de una transcendental importancia que hace fundamentalmente a los
intereses del país.
Y
recurramos, ciudadano Presidente, al derecho constitucional comparado. Vamos a
encontrar que todas las constituciones, y no he podido encontrar, he buscado y
me ha ayudado mucho en esta búsqueda el Convencional Evelio Fernández Arévalos,
que me ha facilitado un trabajo sobre la materia; he buscado muchas
Constituciones a ver si alguna de ellas incluía una norma como la que nos trae
la Comisión Redactora como Propuesta N°
1, y no he encontrado ninguna, ciudadano Presidente.
La
Constitución de Bolivia establece el voto irrestricto de sus ciudadanos; la
Constitución de Chile lo mismo,;la de Cuba, la de Estados Unidos, la de España,
la de Guatemala, la de Italia, la de Japón, la de México, la de Nicaragua, la
de Panamá, la de Paraguay vigente, la de Portugal, la República Dominicana, la
de Uruguay, la de Alemania, la de Brasil, la de Costa Rica, la de El Salvador,
la de Perú, la de Venezuela, y no voy a seguir cansando, a los ciudadanos
Convencionales, que tendría que recitar la nómina de todas las Constituciones
del mundo, y ninguna de ellas, ciudadano Presidente, establece la prohibición
de sus ciudadanos que radiquen en el exterior de que puedan emitir sus derechos
al sufragio. Tendría que tener, en ese
caso, una razón muy importante para que justamente en el Paraguay tengamos que
incluir esa norma.
¿Y
cuál es la situación paraguaya?
Ciudadano Presidente: el Paraguay ha sufrido una verdadera
diáspora. Sobre cuatro millones
(4.000.000) y algo más de habitantes que tenemos, posiblemente alrededor de un
millón (1.000.000), radiquen en el exterior.
¿Qué es lo que debe hacer el Paraguay, frente a esta situación? Tratar de atraer a esos ciudadanos, tratar de
que ellos no pierdan su vinculación con el Paraguay, y con una norma
constitucional de esta naturaleza, lo que estamos es rompiendo el cordón
umbilical que une a tantos ciudadanos paraguayos con su propio país.
Me
pregunto, ciudadano Presidente, ¿tenemos derechos los Constitucionalistas que
estamos aquí, los miembros de la Convención Nacional Constituyente, digo,
tenemos derecho de romper ese cordón umbilical, de decir a esos ochocientos mil
o un millón (800.000 ó 1.000.000) de paraguayos, ustedes son ciudadanos de
segunda, ustedes no tienen derecho de votar?
Aquí no estamos diciendo que los ciudadanos de Buenos Aires, de Córdoba,
o de Mendoza tendrán la posibilidad de venir a votar en las próximas
elecciones. Sencillamente no decimos nada; dejamos abierta la puerta para que
las futuras leyes electorales, de acuerdo con la situación del país, de acuerdo
con las necesidades del país, se vayan estableciendo, vaya estableciendo las
normas, que hagan posible eventualmente votar en el Paraguay, como tienen
muchas otras leyes en el mundo.
Se
ha dicho, en algunas de las exposiciones anteriores, que los brasileños iban a
votar al Brasil, porque no podían hacerlo en el Paraguay. Me voy a permitir, ciudadano Presidente, leer
una publicación del Consulado Brasileño, en la cual se establece lo
siguiente: el Código Electoral Brasileño,
faculta a los nacionales residentes o domiciliados en el exterior el derecho de
votar en elecciones presidenciales. De
acuerdo con la nueva Constitución del Brasil, aquellos que completaron diez y
seis años, antes de tal fecha, etc., he indican los lugares donde los
residentes brasileños residentes en el Paraguay pueden emitir su voto, y esto
tiene fecha del 12 de junio de 1989.
Puedo citar también un informe similar hecho por el Consulado o por la
Embajada de España en el Paraguay, es decir; tenemos demasiado ejemplos de
países que permiten, ya no solamente a través de la Constitución, sino a través
de las propias leyes electorales, el votar.
Pero
nosotros, sin embargo, que tenemos tantos paraguayos a los cuáles debemos
atraer, pretendemos, como dije, romper ese cordón umbilical, y podemos tener la
plena seguridad, ciudadano Presidente.
Todos
los paraguayos residentes en el exterior, sea cual fuere su afiliación
política, desean que se les dé el derecho a votar, o por lo menos que la
Constitución Nacional no les impida ese derecho. Hemos tenido declaraciones, hemos leído
declaraciones de seccionales del Partido Colorado, que están pidiendo también
como tanto otros paraguayos residentes en el exterior que no se les considere
ciudadanos de segunda categoría. Pero
pareciera, ciudadano Presidente, que para algunos Convencionales, es más
importante una razón de tipo político, totalmente provisoria, totalmente
coyuntural.
Y
voy a leer, lo que dijera un ilustre Convencional en el seno de la Comisión Redactora,
un Convencional justamente estableciendo que esto era una cuestión política, y
que esto era un voto político, decía ese Convencional; es por eso que
concretamente las argumentaciones y las razones, tal vez los tendrán los
compañeros de la oposición, pero en esta ocasión es un voto político y en esta
situación, en este articulado prima lo que realmente interesa a un partido
político, eso es lo que se ha dicho, ciudadano Presidente, en el seno de la
Comisión Redactora, y aquí tengo el diario de sesiones.
Frente
a esa situación, ciudadano Presidente, creo que todos estamos obligados. Hagamos del patriotismo la primera norma de
esta Convención Nacional Constituyente.
No hagamos que prime un voto político; tengamos en cuenta esos miles de
ciudadanos, tantos de ellos Colorados, que están queriendo, que la Constitución
Nacional no los considere, repito una vez más, no los considere ciudadanos de
segunda; hagamos una Constitución como todas las Constituciones del mundo, que
no incorpora una norma prohibitiva de esta naturaleza y dejemos en todo caso,
que las próximas leyes electorales de acuerdo con las circunstancias del país,
vayan estableciendo la posibilidad, de los ciudadanos que residen en el
exterior, de tener el derecho del sufragio.
Gracias, ciudadano Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano convencional Gonzalo Quintana.
CIUDADANO CONVENCIONAL GONZALO
QUINTANA: Gracias, ciudadano Presidente.
En
primer lugar, quiero plantear una duda, que parte de una convicción, ciudadano
Presidente. Una de las grandes
preocupaciones que tuve desde el momento mismo que fui electo por el pueblo
paraguayo como Convencional, fue de tener muy en cuenta la recomendación del
maestro constitucionalista argentino Linares Quintana, que afirmaba que los
equívocos son los enemigos número uno de cualquier Constitución.
Y
también, ciudadano Presidente, la gran preocupación para evitar por todos los
medios, alguna vez de vuelta en este país, pueda implantarse la democradura, es
decir; la dictadura con ropaje de democracia.
La gran pregunta que me hago, ciudadano Presidente, es que si nosotros
en este artículo, condicionamos el ejercicio del voto a la radicación, será que
no podrá ser utilizado, este mismo artículo para privarle no solamente del voto
de los ciudadanos paraguayos en el exterior, sino de los propios paraguayos que
viven en este país, porque la radicación o es un acto de reconocimiento
administrativo judicial. Quiere decir
que yo para ejercer el voto tengo que demostrar que estoy radicado en este país
y eso en manos de gobiernos que quieran tener el ropaje democrático pero
profundamente totalitarios, le estamos dando la posibilidad de hacerlo
constitucionalmente, pero, como dijeron varios preopinantes, parece que las
razones de este tipo no van a surtir mucho efecto.
Parece,
ciudadano Presidente, que lo que tenemos dejar constancia acá, es de nuestro
pensamiento, de nuestra voluntad y de nuestro sentimiento que nos convocó a
esta plenaria. Vine a esta Convención
con la ilusión, con la esperanza de realizar el sueño de un país distinto, con
la ilusión de que esta obra que tenemos a nuestro cargo realizar tiene una
transcendencia infinitamente mayor que las obras, que las tiranías en este país
nos quisieron hacer creer que eran importantes; a nosotros quisieron hacernos
entender que los puentes, que las rutas eran las cosas que vinculaban a los
ciudadanos y a los pueblos, y vine aquí pensando, que esta gran obra que se
llama Constitución Nacional era el gran puente espiritual que necesitaba el
pueblo paraguayo, esté donde esté para su gran reencuentro, ciudadano
Presidente.
Creo,
ciudadano Presidente, que nuestra misión fundamental no es solamente mejorar
algunos artículos del 67, sino que esta Constitución tiene que ser, un símbolo
claro y contundente de una ruptura con un pasado, oprobioso y vergonzante. Parte de ese pasado que queremos superar, que
queremos romper, ciudadano Presidente, es esta división de la familia
paraguaya, que decía que no había división de la familia paraguaya y sigue
existiendo, ciudadano Presidente.
Ciudadano
Presidente, honorables Convencionales:
no nos engañemos. Aquí no esta en
juego el poder, ciudadanos, ni del 93, ni del 98, ni del 2003, aquí lo que está
en juego es la demostración de una vocación, es la demostración de que estamos
dispuestos a asumir nuestros errores y que estamos dispuestos a enmendarlos,
ciudadanos. Si pensamos solamente, aún
siendo que esté en juego el poder, si pensamos solamente en el poder, no
estamos haciendo mas que prostituir nuestra misión. El poder por sí sólo no da prestigio, ni da
dignidad, si no piensen que cuarenta años de gobierno no sirvió mas que para que
un grupo de personas se desprestigie y tenga la repulsa del mundo entero. El poder por sí sólo no sirve, porque tiene
que estar al servicio, no para liberar a un grupo y someter a otro, sino para
popularizar la libertad y para dignificar al hombre.
Para
terminar, ciudadano Presidente, creo que como ningún otro artículo, debemos
recordar que existe la ley, y existe el espíritu de las leyes. Este artículo, ciudadano Presidente, sin
lugar a dudas se da la materialización de este espíritu, de nuestro espíritu
como representantes del pueblo, de nuestro vocación y de nuestra voluntad. No soy propenso a la rogatoria, pero creo que
la causa lo justicia, ruego que demostremos al mundo, sobre todo a nuestros
compatriotas de todo el mundo, que nuestro espíritu está dominado por la
grandeza, la generosidad y la solidaridad, y no por la mezquindad y la picardía
que busca las ventajas electorales.
Terminé, Presidente.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Guillermo Heisecke.
CIUDADANO CONVENCIONAL
GUILLERMO HEISECKE: Ciudadano Presidente, compañeros
Constituyentes: realmente esta serie de
disertaciones y el debate consiguiente, parece que reflejara cierto espíritu
que en ningún momento de la Constituyente fue la expresión generalizada, ni de
líderes, ni no líderes, de Constituyentes, etc.. Realmente estamos nada menos
que tratando de consagrar lo que algún Convencional señaló, pero en el otro
sentido, una nueva clase en el Paraguay, atribuyéndole a los paraguayos que hoy
sufren, no gozan de la situación de vivir en tierra ajena, una situación
particular y especial.
Y
les quiero señalar el siguiente hecho: mientras que esta Asamblea Nacional
Constituyente esta debatiendo, si los paraguayos que por razones ajenas a su
voluntad, hoy viven fuera del país, puedan mantener siquiera el único vínculo
que hasta hoy podría soñar, el de tener derecho a votar, y a elegir quienes
serían los que en el futuro le pudiesen garantizar sus derechos a la vuelta en
este país. En este mismo momento, un
país vecino que tiene dentro el ochenta por ciento de los paraguayos fuera del
país, esta decretando la amnistía para todos estos paraguayos, en la voluntad
de integrarlos a ese país, y de desintegrarlo del nuestro.
Eso
es, ciudadanos el resultado y el fruto que va a conseguir la pretensión de
introducir en la Constituyente, la más grave discriminación que se
pretende. Ciudadanos: de enero a abril, ochenta mil paraguayos han
ido de vuelta a la Argentina, ¿y cuántos más serán en los próximos meses? Y los Argentinos han dictado esta semana una
ley de amnistía para todos estos paraguayos, para que puedan tener todas sus
documentaciones en regla y puedan votar en las próximas elecciones municipales,
y si pudiesen hacerse ciudadanos argentinos, estarían gustosos que lo sean, y
vamos a hacer los propios paraguayos quienes vamos a empujar a nuestros propios
conciudadanos a que así lo hagan.
Segundo,
aquí inclusive se ha tratado de usar argumentos económicos, que estos
paraguayos que desgraciadamente, así lo constatamos todos a diario, están fuera
del país, no aportan económicamente al país.
Y les quiero decir con seriedad, diez millones de dólares por mes entran
en este país, producto de la remesa del trabajo honesto de los paraguayos que
viven en el exterior para solventar a las familias que este país no es capaz de
ayudarlo y alimentarlo.
APLAUSOS...
Esos
paraguayos que supuestamente no ayudan al país, aportan mucho más que la suma
de contrabandistas, que la suma de traficantes y aún de los que lavan dinero en
este país.
CIUDADANO PRESIDENTE: Ciudadano
Convencional: pedimos un poco de respeto y consideración. Prosiga en el uso de la palabra.
INTERRUPCION...
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Yo quiero decirle que no le voy a pedir a
ninguna bancada.
CIUDADANO PRESIDENTE: No se refería a bancada, pero ha hecho un
contraste que la Presidencia considera, subjetivamente, puede afectar el orden
que estamos llevando, con tanta calma, ciudadano Convencional.
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Perfecto, ciudadano Presidente. Quiero decir que no voy a defender la
voluntad de ninguna bancada ni me voy a
introducir en sus problemas. Pero me
llama la atención que, tanto el Parlamento Nacional que ha votado una ley
posibilitando a los paraguayos del exterior a votar, donde son mayoría los
miembros de esa bancada y ni su Junta de Gobierno se ha pronunciado al
respecto, pues consideran con sabio criterio que realmente esta discriminación
no puede ser bandera de ningún Partido político.
Y
por último, le quiero decir que en esta Convención en que sumamos jóvenes, los
llamados campesinos, los llamados los políticos de la nueva generación, que
realmente esperan que este país brinde a sus conciudadanos mejores momentos que
las noches tristes que hemos padecido, que todos confiábamos de que esta suma
de esfuerzos de todas las bancadas iba a ser que realmente esta Constitución no
tuviera ni una sola mancha, hoy, esta noche, corremos el peligro de que esa
mancha sea realidad.
Y
esto lo digo con tristeza, porque esto me obliga a pensar en algo que no quería
hacerlo. Tengo ya mis serias dudas de la
sinceridad de muchos, sobre qué quieren hacer con la descentralización, tengo
ya mis serias dudas de muchos que ya qué quieren hacer con el poder de los
militares, tengo ya mis serias dudas de qué quieren hacer con el autoritarismo
en el Paraguay. Y tengo derecho a tener
mis dudas.
Por
último, ciudadano Presidente...
CIUDADANO PRESIDENTE: Orden en la sala, más respeto al orador.
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Lamento seriamente que Partidos de gran
raigambre popular, en un mismo momento, cuando olvidábamos la frase tradicional
de que lo que no están con nosotros están contra nosotros, hoy coincidan en que
no deben votar los paraguayos en el exterior y tenemos que hacer una ley de
lemas, etc. Ciudadanos: eso realmente es
un problema de los que afirman ese tipo de conclusiones.
Yo
no voy a ponerme en defensa de ese partido, porque realmente tiene demasiados
defensores, pero no puede ser un partido del futuro el partido que está en
contra de que voten los paraguayos, todos los paraguayos, no puede ser un
partido del futuro el partido que cree en una ley de lemas y se opone al
balotaje. Ciudadanos: el futuro es de
los que creen que todos somos iguales, que todos los paraguayos tenemos los
mismos derechos y que aquí no hay ciudadanos de primera ni de segunda, como
hubo siempre, sino aquí hay solamente paraguayos bien intencionados que
queremos para todos una patria justa, libre y donde todos queremos vivir, que nadie
quiere estar fuera. Gracias, ciudadano
Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano Convencional.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional Rubén Bareiro Saguier. No ha pedido.
Tiene
el uso de la palabra el ciudadano Convencional
Eusebio Ramón Ayala.
CIUDADANO CONVENCIONAL EUSEBIO
RAMON AYALA: Ciudadano
Presidente, ciudadanos Convencionales:
realmente creo que estamos a minutos de decidir una cuestión muy grave
desde el punto de vista jurídico. Yo
creo que tenemos que tener en cuenta que la ley tiene una vigencia temporal,
pero no muy inmediatista, no muy para el próximo año. Creo que tenemos que pensar que esta obra que
estamos haciendo con esfuerzo, con sacrificio y muchos con cariño, debe
perdurar más allá del 93, debe perdurar si es posible hasta el año 2.000.
Por
eso, ciudadano Presidente, tenemos que tener mucha racionalidad y mucha cordura
en resolver esta cuestión. Quisiera leer
y quisiera dar la lectura de este Artículo 119, de los electores ¿Qué quisimos hacer con este artículo 119? Creo que no hemos perdido mucho en hablar en
contra y en favor de este artículo, pero no hemos leído el artículo, ciudadano
Presidente, ¿qué quisimos decir, qué
nosotros entendemos por los derechos de ciudadanía? Evidentemente, son aquellos derechos
políticos de todo ser humano para participar en las cosas públicas del país; así dijimos en el Artículo
117.
Pero,
en el 119 desdoblamos y eso quiero llamar la atención, en el primer párrafo y
quiero que me preste atención por esta razón dice: son electores los ciudadanos radicados en el
territorio nacional sin distinción que hayan cumplido 18 años de edad. Obviamente los que no se radiquen en el territorio
nacional no pueden votar; esa es la lectura a contrario sensu.
Pero
más abajo en un párrafo decimos los
ciudadanos son electores y elegibles sin
más restricciones que las establecidas en esta Constitución. Ahora, ¿cuáles son las restricciones para los
electores? Sabemos que las restricciones
para los electores son que deben radicarse en el país, pero cuáles son las
restricciones para que sean elegibles. Y
bueno, ahí no hemos puesto nada, absolutamente.
Quiere decir que una persona puede llegar a ser diputado, puede llegar a
ser senador de al Nación, puede llegar a ser intendente, puede ocupar esos
cargos públicos, porque obviamente si nosotros no hiciéramos la distinción
entre electores y elegibles, tendríamos en consecuencia que el elector tiene
derecho activo y pasivo al sufragio, es decir, que puede votar y ser votado.
Pero
desde que el momento en que nosotros decimos los ciudadanos son electores y
elegibles, estamos desdoblando eso. Yo
no sé. Obviamente, esa sería una
interpretación más perjudicial inclusive, porque al mismo tiempo le estamos
restringiendo también el de la iniciativa popular y del referéndum, ¿cómo van a
participar los ciudadanos en el Referéndum y en la iniciativa popular? Obviamente, siendo electores, eso es
absolutamente obvio.
He
leído el Artículo 222 respecto al Presidente de la República y dice que debe
estar en pleno uso de sus derechos civiles y políticos; he leído el Artículo
216 respecto a los diputados y no establece la radicación como requisito; he
leído el Artículo 218 respecto a los senadores y tampoco prescribe; he leído el
Artículo 251 respecto a los ministros de la Corte Suprema de Justicia y tampoco
se exige la radicación en el país.
Obviamente,
pueden ser elegibles. Entonces no sería
rara la paradoja que se diera de que un habitante paraguayo que esté en Buenos
Aires pueda ser ungido en uno de esos cargos; es obvio que el sentido común tal
vez nos diga que el que puede, al que se le niega lo más también se le debe
de negar lo menos, pero no está muy
claro, ciudadano Presidente.
Otra
cuestión que me llama poderosamente la atención es en cuanto al tercer párrafo,
respecto a los extranjeros con radicación definitiva, tendrán los mismos
derechos en las lecciones municipales, pero sin embargo nosotros le exigimos a
los connacionales radicados afuera el mismo requisito que los extranjeros. Le estamos exigiendo los mismos requisitos,
referente a la radicación. Creo que esta
equiparación es injusta, ciudadano Presidente.
Por
otro lado, acabamos de aprobar un Artículo, el 139, que habla del orden
jurídico supranacional, para defender los derechos humanos a nivel mundial,
¿acaso, ciudadano Presidente, el derecho a voto no es el principal derecho
humano que una persona tiene? No
entremos en contradicciones, ciudadano Presidente.
Otro
punto que estamos haciendo nosotros que queremos la democracia en nuestro país,
estamos dividiendo anti democrática y arbitrariamente a la sociedad civil paraguaya. Queremos fortalecer la democracia o queremos
fortalecer otra cosa, ¿qué estrategia es la que estamos haciendo nosotros,
ciudadano Presidente? Estamos
discriminando; además les adosamos todas las obligaciones posibles, de acuerdo
a esta Constitución y le restringimos todos los derechos posibles a los que
están fuera de nuestro país.
Y
por último, ciudadano Presidente, si bien yo escuché muchas razones y muchas
apelaciones a la racionalidad, pero en esta ocasión yo quiero apelar también al
sentimiento. Cuando la racionalidad ha
perdido, cuando la racionalidad no ha encontrado un eco favorable, nada lo
sustituye al sentimiento. Por esa razón,
ciudadano Presidente, tal vez uno de los derechos humanos fundamentales y tal
vez el único derecho absoluto es el derecho a la defensa.
No
condenemos a los compatriotas que viven fuera de nuestras fronteras sin juicio
ni ley previa. Les estamos condenando
sin posibilidad de defenderse, les estamos condenando a vivir eternamente en el
extranjero, le estamos condenando, como alguien dijo muy bien, que estamos cortando
el cordón umbilical. Es obvio que los
paraguayos pueden volver, eso es cierto, no estoy diciendo eso. Lo que estoy diciendo es que les estamos
condenando sin darle el derecho a la defensa.
Ciudadano Presidente: creo que es de estricta justicia que esta
Convención tampoco se arrogue atribuciones que le corresponden al
Parlamento. Ya alguien va a decir cuáles
son las Constituciones que tienen esta prohibición. Creo que no son muchas. Nosotros no tenemos que entrar en ese cuerpo
de privilegiadas Constituciones.
Por
último, ciudadano Presidente, dejemos a cargo de la ley y que la prudencia en
el tiempo, donde están también en el Parlamento los políticos de diferentes
sectores, colorados, liberales, independientes, en el próximo Parlamento que
resuelvan la cuestión y que no adocemos a nuestra espalda una grave
responsabilidad, que es la proscripción de uno de los derechos fundamentales,
que es la negación del derecho al voto a los paraguayos residentes en el
exterior. Muchas gracias, ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
la palabra el ciudadano Oscar Paciello.
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO: Gracias, ciudadano
Presidente.
En
la tarde de hoy se dieron innumeros argumentos y muchas expresiones fundadas en
mi exposición como Presidente de la Comisión Redactora en la sesión anterior en
que se trataba el Artículo 119. Ahora lo
hago en ese carácter también, en una primera parte, para referirme a aspectos
estrictamente jurídicos que hacen a esta
cuestión. Se me ha enrostrado el hecho
de que yo he citado una multiplicidad de leyes electorales, pero que no he
citado el derecho constitucional comparado.
Y eso, ciudadano Presidente, obedece a una razón elemental, muy
sencilla. Solamente Paraguay, Méjico e
Israel exhiben el fenómeno de la diáspora, he mencionado la doctrina Ben Gurion
por la cual los judíos se convierten en israelitas solamente si llegan a
Israel, y solamente ahí ejercen su derecho político. Y en Méjico, el Artículo 36 de su Constitución
obliga a sus ciudadanos a inscribirse dentro de su municipio y solamente votan
quienes estén inscriptos y residan en ese municipio. De manera que aquí no estamos nosotros
consagrando ninguna novedad, ni se pueden pedir peras al olmo. Sí, resulta llamativo, -y aquí se ha
mencionado países europeos y demás- que hasta estos países tengan previsiones
sobre este particular. En Italia es una
cuestión aún no decidida, pese a que se integra en la Comunidad Económica
Europea; Alemania en su ley electoral, hasta donde yo estoy enterado, porque es
una publicación oficial de la Embajada Alemana, las personas deben residir
cuando menos tres meses para ser inscritas en un censo electoral. En España, cuya Constitución se ha
mencionado, el Artículo 75 de su Código Electoral dice, que votan ciertamente las personas que
están en el extranjero, pero a condición también, como en el caso de Méjico, de
que estén registrados en el respectivo municipio, o sea que solamente votan los
residentes. Estas son razones estrictamente
jurídicas; eso, hasta donde puedo interpretar de la lectura de los textos;
quizás esté equivocado, y quizás no guste a mucha gente cuanto estoy
expresando, pero es la estricta realidad.
Ahora
bien, ciudadano Presidente. Aquí se ha
mencionado -y permitaseme que lo aluda- por el gran afecto que le guardo a mi
distinguido amigo, el ciudadano Luis Alfonso Resck, quien ha hablado del
derecho natural de Sócrates. Bueno,
pues, a mi me parece que si vamos a hablar de eso y si vamos a hablar de
Sócrates, valdría la pena volver a releer las páginas del Critón, en el cual
Sócrates, teniendo la posibilidad de sobornar a los guardias y fugarse de
Atenas, prefiere beber la cicuta, porque dice, por sobre todas las cosas, que,
por sobre todo, él debía cumplir las
leyes de su patria.
APLAUSOS...
¿Como
dicen? Muy bien, y estamos sancionando
la ley ...
INTERRUPCION...
CIUDADANO PRESIDENTE: Ciudadano
Convencional: se prohíbe el
diálogo. Yo creo que no es
edificante. Por favor ,respeto al orador
en lo posible, porque la Presidencia no está con admitir eso. Continúe.
CIUDADANO CONVENCIONAL OSCAR
PACIELLO: Gracias, ciudadano
Presidente.
Quiero
también aludir al hecho de cuál es la razón por la cual aparece este texto en
el texto de la Comisión Redactora. Y se nos
enrostra como un pecado mayúsculo un supuesto apartamiento del proyecto oficial
del Partido Colorado. Quiero resaltar,
-y lo ha expresado con suma claridad el Presidente provisional de nuestro
Partido- que entre las facultades de la Junta de Gobierno no está la de
redactar proyectos, ni anteproyectos de Constitución. Cuanto tenemos sobre ese particular es apenas
una indicación, y que cada quien es dueño de su conciencia; así lo expreso el
ciudadano Martínez en su alocución, y yo lo ratifico, porque es fiel expresión
de la verdad, y no podría ser de otra manera, ciudadano Presidente, desde el
momento en que ésta es una asociación de hombres libres, que hace de la
democracia su forma de dirigirse, de organizarse y de adoptar decisiones.
Y,
si aquí se defiende un determinado texto, es porque en bancada se ha tomado la
decisión democráticamente, y nos ceñimos estricta y rigurosamente a la única
regla de oro que hace posible la pervivencia de la democracia: el respeto por
el voto mayoritario. Y en esa condición,
y por esa circunstancia tenemos una postura, bien definida por cierto, pero que
se cimienta y sustenta en las razones jurídicas que estoy exponiendo hasta
donde me es posible. Ahora bien,
demostrado como queda, que solamente tres países en el mundo podemos exhibir
esta particularidad, quiero resaltar que esta cuestión desde luego que no podía
figurar en ningún proyecto de ningún Partido, hasta que un buen día nos aparece
en el seno de la Comisión Redactora esta propuesta del Partido Liberal Radical
Autentico, en la que esta materia en la que todos sus oradores dijeron ser
materia de ley, la incluyen como propuesta en el proyecto de texto
constitucional. A las pruebas me
remito..
APLAUSOS...
Consiguientemente,
ciudadanos, no pueden venir a enrostrarnos, que desconozcamos la técnica
constitucional, ni cosa parecida, y en semejante circunstancia, ciudadano Presidente, ¿que podíamos
hacer? ¿Cuál era la brújula segura que
pudiera inspirarnos ante la emergencia de un fenómeno absolutamente nuevo, que,
por cierto, no fue considerado en ningún momento por ninguna asociación
política?
Lisa
y llanamente, ciudadano Presidente, debíamos remontarnos al plano de la
enseñanza, al plano de la doctrina; y en doctrina tenemos entre los numerosos
autores, pero apenas voy a citar uno a quien le presta adhesión un
connotado tratadista de Derecho
Político, Pablo Lucas Berdu de la Universidad de Madrid, que cita Heller,
Herman Heller, padre del constitucionalismo social, de quien nosotros adoptamos
la fórmula en el Artículo 1°
de nuestra Constitución que dice: Sólo
existe un Estado allí donde el poder sobre la organización social territorial
le pertenezca a ella misma, le sea propio, donde la decisión sobre el ser y
modo de la organización tenga lugar dentro de ella, el poder del Estado es
soberano, lo que significa que es dentro de su territorio, poder
supremo, exclusivo, irresistible y sustantivo.
Nosotros estamos legislando la organización de un Estado; no estamos
legislando para los vecinos, no tenemos ni jurisdicción ni competencia sobre
gente que vive bajo otra jurisdicción.
De manera tal ciudadanos, que nosotros no podemos imponer reglas para
quienes, voluntariamente o no, se substraen a la jurisdicción, a la potestas
imperium de la República del Paraguay, y lo hacemos, ciudadano Presidente, con
el más escrupuloso cumplimiento de los cánones de la democracia. El mismo autor a quien estoy aludiendo trae
la definición de lo que debe ser un régimen democrático. Los grandes autores franceses Varchelemi y Paul
Doues, que dicen: el gobierno debe
organizarse de tal modo que, en la medida de lo posible, los gobernados sean al
mismo tiempo gobernantes.
Es
menester que el mayor número posible de gobernados participe lo más
directamente posible en el ejercicio del poder.
El ideal del principio democrático consiste en la participación directa
de todos en el gobierno.
Consiguientemente, ¿como pedir participación a gente que no es gobernada,
que es gobernada por otra Nación? He
aquí una contradicción lógica absolutamente insuperable. Gente que se ha sustraido a la jurisdicción
territorial de la República del Paraguay, evidentemente, ciudadano Presidente,
no puede, por ningún concepto, venir a regir los destinos de gente que está
sometida a su jurisdicción natural.
Pero, ciudadano Presidente, así como se me ha dicho -y he contestado-
que las únicas fuentes del derecho Constitucional Comparado nos da la razón, mi
ilustrado amigo, el ciudadano Benítez Florentín, ha apelado a la prudencia, me
ha pedido prudencia en estas decisiones, y no he encontrado yo razones más
prudentes que las que otro ilustrado director de su Partido, el ciudadano
Domingo Laino, lo dice en "El Paraguay, Fronteras y Penetración
Brasileña". El ciudadano Domingo
Laino hace un estudio muy documentado y enjundioso. Nos trae en la página 49, si me permite lo
voy a citar, una entrevista realizada en Buenos Aires en el año 73 al General
Roque Reque Peran, un boliviano que da a cuenta de lo que le pasó a Bolivia con
el territorio del Acré. El Acré fue
arrebatado a Bolivia en base a una seudo revolución separatista cuyo fin fue la
entrega al Brasil de esa franja de territorio boliviano, por entonces muy rica
en goma, que era uno de los productos más cotizados. Lo que ocurrió en el Acré, ciudadano Presidente,
en efecto es rigurosamente cierto lo que nos dice el ciudadano Laino, es que se
produjo una penetración sistemática de colonos brasileños, y esa penetración
sistemática, él lo denuncia muy claramente en su obra, dice que: "los brasileños provienen de un país
limítrofe cuyos gobiernos desde la época de la colonia no han ocultado su
voluntad egjemónica y de conquista. El
grueso de los brasileños se instala precisamente a lo largo de la frontera del
Paraguay con el Brasil, desnacionalizan masivamente el territorio paraguayo,
adquieren en propiedad la riqueza natural, instalan sus unidades productivas y
todos los recursos y las actividades de la frontera se desprenden de los
intereses paraguayos, etc".
Quiere
decir que, si nosotros estamos reclamando y establecemos que los paraguayos
allén de frontera pueden votar, a la recíproca también debemos conceder ese
derecho a los extranjeros que residen en nuestro territorio. Y el voto, ciudadano Presidente, es un derecho
político, es el ejercicio del derecho de soberanía. Quien nos garantiza a nosotros que los
200.000. brasileños denunciados por el ciudadano Laino, con estas intensiones
en nuestras fronteras, ejerciendo su derecho de voto el día de mañana no voten
su segregación del Paraguay y su incorporación al Brasil. Ese es el verdadero problema, ciudadano
Presidente. Por consiguiente, entiendo
que así como nosotros somos país de emigración, también recogemos inmigración. Y debemos ser prudentes, no podemos dar, como
quien dice, el paso más largo que la pierna.
Es imprescindible, ciudadano Presidente, que nos sujetemos cada quien
dentro de nuestras respectivas fronteras; es cierto, vendrá el universalismo
con el tiempo probablemente, pero entre tanto, ciudadano Presidente, los
paraguayos que sufrimos, vivimos y padecemos aquí, y que no somos tentados por
el oropel de las grandes urbes, decidamos nuestro destino, nosotros. Nada más y nada menos que eso es lo que
establece el proyecto de la Comisión Redactora, y así como ésta es la única
Nación que tiene el mismo problema, que es Méjico. Por consiguiente, ciudadano Presidente, como
no estamos cometiendo ninguna herejía jurídica, ni cosa que se le parezca, por
razones de prudencia y por la importancia del tema, me permito solicitar la
aprobación del texto tal cual proviene de la
Comisión Redactora. Muchas
gracias.
APLAUSOS...
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadano
Convencional.
Tiene
la palabra la última oradora inscrita, la ciudadana Convencional Cristina
Muñoz.
CIUDADANA CONVENCIONAL CRISTINA
MUÑOZ: Gracias, ciudadano
Presidente.
Voy
a ser muy breve. Es simplemente expresar
mi modesta opinión al respecto, con el profundo respeto que me anima hacia los
Convencionales que piensan diferente a mí, y en especial, a los de la bancada
colorada.
No
nos consideramos desertores de esa bancada para empezar, según la calificación
de un preopinante. Simplemente nos hemos permitido presentar una propuesta
fieles a los principios democráticos y a la propuesta electoral del Partido
Colorado. También, ciudadano Presidente,
compañeros Convencionales, no voy a defender el derecho al voto de los
compatriotas en el exterior porque para mi eso le corresponde definir a los
esforzados y laboriosos parlamentarios.
Tampoco, ciudadano Presidente, quiero avalar la proscripción
constitucional de este derecho, ni ningún otro, y la suerte electoral del
Partido Colorado no pasa por esta decisión.
Yo creo que depende en absoluto del trabajo que hagamos como Partido en
función de gobierno y de la tolerancia, la coherencia y el respeto que nos
tengamos entre nosotros. Tampoco me
preocupa los 300.000 o 400.000 (trescientos mil o cuatrocientos mil)
compatriotas que desean votar en el extranjero; me preocupan sí los 500.000
(quinientos mil) colorados inscriptos en el padrón partidario que no se
asomaron a las urnas en las últimas dos elecciones a emitir su voto por el
Partido Colorado. Simplemente esa
reflexión debemos llevar adelante y debemos tener en cuenta quienes nos creemos
representar a ese pueblo que tantas veces
confió en nosotros.
Ciudadano
Presidente: con el mismo respeto con que
siempre acepté la disidencia, yo creo que también mis compañeros Convencionales
Colorados deben aceptar la mía y la de los mis compañeros que hemos suscrito
esta propuesta, porque no tiene ningún fondo político ni personalista;
simplemente hemos pensado que esa es la propuesta correcta; por eso la hemos
presentado. Podemos estar equivocados o no, pero yo creo que la generación la
cual pertenecemos tiene derecho a equivocarse, pero a mentir ante el pueblo que
lo votó, nunca. Muchas gracias,
ciudadano Presidente.
CIUDADANO PRESIDENTE: Gracias, ciudadana Convencional.
Quedó
cerrado el debate. Entramos a considerar
la proposición y moción del ciudadano Convencional
Timoteo González Galván para que la votación sea nominal.
Quienes estén de acuerdo con esa propuesta se
servirán levantar la mano. Mayoría.
MAYORIA.
Se
va a proceder, en consecuencia, a la votación nominal previo relatorio de la
Secretaría.
CIUDADANO SECRETARIO: En Secretaría obran tres mociones; la primera
moción es la propuesta N°
1 del Proyecto Base. La propuesta N°
2 es de los Convencionales Jorge Dos Santos, Cristina Muñoz, Myrian López y
Aníbal Saucedo. Y la propuesta N°
4 es la del Convencional Eusebio Ramón Ayala.
La propuesta N°
3, en plena deliberación cuando se trataba este tema, había sido retirada por
el Convencional Rubén Bareiro Saguier, en aquella oportunidad.
INTERRUPCION...
CIUDADANO CONVENCIONAL...: No, ciudadano Presidente. Pero hoy es una nueva sesión, y la cuatro
también fue retirada en ese caso, o sea, no sé por qué hay una discriminación.
CIUDADANO SECRETARIO: Se mantiene,
consulto, se mantiene.
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Ahora yo quiero hacer una aclaración con
respecto a eso, pero pido la palabra en el momento oportuno no quiero
interrumpir.
CIUDADANO PRESIDENTE: Tiene el uso de la palabra solamente para
rectificar algún error que pueda haber en Secretaría.
CIUDADANO CONVENCIONAL...: Ahora sí nosotros retiramos nuestra ponencia
N° 3 y nos adherimos a
la N° 2. Es todo lo que quería decir.
CIUDADANO SECRETARIO: Entonces, quedan tres propuestas. No sé si conviene leer, o ya se vota.
Propuesta
N° 1, es del Proyecto
Base. Sería moción 1. Moción 2 es la Propuesta de Jorge Dos Santos
y otros. Y la moción 4 es de Eusebio
Ramón Ayala.
CIUDADANO CONVENCIONAL EUSEBIO
RAMON AYALA: Retiro mi moción para adherirme a la
propuesta N° 2.
CIUDADANO PRESIDENTE: El ciudadano
Convencional Eusebio Ramón Ayala retira su moción. Quedan dos, en consecuencias.
CIUDADANO SECRETARIO: Propuesta 1, Proyecto Base, y propuesta 2,
Jorge Dos Santos y otros.
CIUDADANO PRESIDENTE: Por Secretaría se va a pasar la nomina para
la votación. Se ruega orden en la sala
para la votación.
CIUDADANO SECRETARIO:
Domingo Laíno:
Moción N° 2.
Oscar Paciello: Propuesta de la
Comisión Redactora, N°
1.
Rafael Eladio Velázquez:
Ausente.
Emilio Camacho Paredes:
Moción N° 2.
Antonio Salum Flecha:
Moción N° 1.
Víctor Hugo Sánchez:
Moción N° 1.
Héctor Capurro: ...
Carlos Podestá:
Moción N° 1.
Diógenes Martínez:
Moción N° 1.
Carlos Alberto González:
Moción N° 2.
Juan Francisco Elizeche: Moción
N° 1.
Víctor Báez Mosqueira:
Ausente.
Carlos Romero Pereira: Moción N°
1.
Rodrigo Campos Cervera: Moción
N° 2.
Blanca Lila González: ...
Benjamín Fernández Bogado: Moción
N° 2.
Evelio Fernández Arévalos:
Moción N° 2.
Rodolfo Gill Duarte:
Moción N° 1.
Miguel Abdón Saguier:
Moción N° 2.
Arcadio Flores López:
Moción N° 2.
Luis Garay: ...
Migdalia R. de García:
Moción N° 1.
José Félix Fernández
Estigarribia:
Moción N° 2.
Raúl Oggero Fernández: Propuesta
N° 1.
Manuel Augusto Radice: ...
María Celsa Echagüe de Ayala: ...
Ricardo Franco Lanceta:
Propuesta N° 2.
Bernardino Cano Radil: ...
Antonia Irigoitia:
Moción N° 2.
Pedro Pablo Ovelar:
Moción N° 1.
Aníbal Saucedo Rodas:
Noción N° 2.
Luis Angel González Macchi:
Moción N° 1.
Carlos Armando Storm:
Moción N° 1.
Rubén Bareiro Saguier:
Moción N° 2.
Juan Manuel Peralta:
Moción N° 2.
Cristina Muñoz:
Moción N° 2.
Dora Hermosilla:
Moción N° 1.
Federico Callizo:
Moción N° 2.
José Ismael Candia:
Moción N° 1.
Luis A. Castiglioni:
Moción N° 1.
Pedro Darío Portillo:
Moción N° 2.
Rodolfo H. Centurión: ...
Wilfrido S. González: Moción
N° 2.
Estanislao Llamas:
Moción N° 1.
Rodolfo Aseretto:
Moción N° 2.
Julio C. Fanego Arellano:
Moción N° 1.
Manuel E. Doldán Velázquez: ...
Alirio Ugarte Díaz:
Moción N° 2.
Benjamín Maciel Pasotti:
Moción N° 1.
Eusebio Ramón Ayala:
Moción N° 2.
Carlos Villagra Marsal:
Moción N° 2.
Francisco Solano López:
Ausente.
Humberto Ayala Zelada:
Moción N° 2.
Eligio Vargas Mendoza:
Moción N° 1.
Elisa Ruíz Díaz Bareiro:
Moción N° 1.
María Elena Sachero: ...
Celso Castillo Gamarra:
Moción N° 1.
Estanislao Martínez:
Moción N° 2.
Atilio R. Florentín: ...
Angel Ayala:
Moción N° 2.
Milciades Godoy Jara:
Moción N° 1.
Franklin Boccia:
Moción N° 2.
Domingo Delvalle García:
Moción N° 1.
Leslie Villanueva Cardozo:
Moción N° 1.
Víctor M. Quevedo:
Moción N° 2.
Guillermo Heisecke:
Moción N° 2.
Víctor Manuel Núñez:
Moción N° 1.
Euclides Roberto Acevedo:
Moción N° 2.
Elvio Isaurralde Fleitas:
Moción N° 1.
Gonzalo Quintana:
Moción N° 2.
Jorgelina Silvero Silvano:
Moción N° 1.
Jorge Ríos Rodríguez:
Moción N° 1.
Víctor Luis Bernal:
Moción N° 1.
Gustavo Laterza:
Moción N° 2.
Isidro Melgarejo Pereira:
Moción N° 1.
Julio César Vera Cáceres:
Moción N° 1.
Tadeo Zarratea: Moción N°
2.
Antonia Ovando de Galeano:
Moción N° 1.
Dionisio Zárate González:
Moción N° 1.
René Ramírez:
Moción N° 2.
Gregorio Enciso Vega:
Moción N° 1.
Aída M. Robles Alcaraz:
Moción N° 2.
Lino Chilavert Benítez:
Moción N° 1.
Luis Lezcano Claude:
Moción N° 2.
Fernando López Leiva:
Moción...
Manuel Sardi Segovia:
Moción...
Esteban Caballero:
Moción N° 2.
José D, Caballero:
Moción N° 1.
Rubén Darío Romero:
Moción N° 1.
Sinforiano Rodríguez:
Moción N° 2.
Ramiro Barboza:
Moción N° 2.
Ismael Echagüe Insfrán:
Moción N° 1.
Manfredo Ramírez Jou: Moción
N° 1.
Agustín Segovia Boltes:
Moción N° 1.
Felipe Davalos Arce:
Moción N° 1.
Luis Alfonso Resck:
Moción N° 2.
Armando Espinola:
Moción N° 2.
Aparicio Fretes Faria...
Juan R. Huerta Echeverri:
Moción N° 2.
Gustavo Samaniego González:
Moción N° 1.
Fermín Ramírez:
Moción N° 2.
Marciano D. Torales:
Moción N° 1.
Justo R. Decoud:
Moción N° 1.
Carlos Mateo Balmelli:
Moción N° 2.
Pedro Lugo Benítez:
Moción N° 1.
Carlos Fretes:
Moción N° 2.
Julio Damían Pérez:
Moción N° 1.
María Ligia Centurión:
Moción N° 2.
Gerardo Sosa Argaña:
Moción N° 1.
Mario Morel Pintos:
Moción N° 1.
Federico Figueredo:
Moción N° 2.
Pablino A. Rodríguez:
Moción N° 1.
Jorge Dos Santos:
Moción N° 2.
Jesús Ruíz Nestosa:
Ausente.
Nilda E. Fernández de Marín:
Moción N° 2.
Cayo Gwynn Safstrand:
Moción N° 1.
Ramón Romero Roa:
Moción N° 1.
Antonio Ferreira:
Moción N° 2.
Susana Morínigo...
Ignacio Cárdenas Marín:
Moción N° 1.
Herminio Ruíz Díaz:
Moción N° 2.
Avelino Ramírez:
Ausente.
Ramón A. Vera Venialgo:
Moción N° 2.
Francisco Díaz Calderana:
Moción N° 1.
Elba Recalde de Rojas:
Moción N° 2.
Timoteo González:
Moción N° 1.
Eduardo Rodríguez Acosta:
Motivo popular N° 1.
José Benigno Escobar:
Propuesta N° 2.
Inmaculada Duarte:
Moción N° 1.
Rubén Melgarejo Lanzoni:
Moción N° 1.
José Nicolás Morínigo:
Moción N° 2.
Juan M. Benítez Florentín:
Moción N° 2.
Hugo Estigarribia:
Moción N° 1.
Blanca M. López Ramírez:
Moción N° 2.
Alcibiades González Delvalle:
Moción N° 2.
Bernardo Villalba Cardozo:
Moción N° 1.
Antonio Valiente Escobar:
Moción N° 2.
Carlos Martín Colarte:
Moción N° 1.
Lamia Yore de Yunis:
Moción N° 2.
Crescencio Storm:
Moción N° 1.
Julián Britos Acosta:
Moción N° 1.
Manuel De Jesús Ramírez:
Moción N° 2.
Pablo A. Cabral Frutos:
Moción N° 1.
Vidal Rolón Sanabria:
Lista N° 1.
Castor Elizardo Giménez:
Moción N° 1.
Patricio Enciso Gómez:
Ausente.
Tomás Ortíz Samudio:
Moción N° 1.
Peter Holder Kennedy:
Moción N° 2.
Francisco Alvarenga:
Moción N° 1.
Carlyle Gauto:
Moción N° 1.
Fabio C. Cáceres:
Moción N° 2.
Luis A. Segovia Avalos:
Moción N° 1.
Reinaldo Chilavet Viera:
Moción N° 1.
Darío A. Palacios Vera:
Moción N° 1.
Emilio Oriol Acosta:
Moción N° 1.
Ada G. Sotomayor de Setrini...
Carmelo J. Benítez:
Moción N° 1.
Francisco Vera Fleitas:
Moción N° 1.
Pedro Angel Rodríguez:
Moción N° 1.
Luis Pedro Llanos:
Moción N° 2.
Crescencio Herminio Cáceres: Propuesta N°
1.
Prefecto Ruíz Díaz:
Proyecto Base N° 1.
Dolores Ferreira Vda de Ayala:
Moción N° 2.
Juan Gilberto Orella:
Moción N° 1.
Carlos Avalos Flores:
Moción N° 1.
Serapio Mongelos:
Moción N° 2.
Gustavo René González:
Moción N° 1.
Miguel Angel Riquelme:
Moción N° 1.
Marcelino Alfonso González:
Moción N° 1.
Osvaldo Tomás Rodríguez:
Ausente.
Juan de la Cruz González:
Moción N° 1.
Carlos Ovidio Meyer:
Moción N° 1.
Cosme Miltos:
Ausente.
Oscar Alberto Delvalle:
Moción N° 1.
Cecilio Alejandro Osorio:
Moción N° 1.
Miguel Angel Galeano:
Ausente.
César R. Dos Santos Jara:
Moción N° 1.
Julio César Lugo Ortíz:
Moción N° 1.
Víctor Hugo Paniagua:
Moción N° 1.
Miguel M. Ferreira Bernal:
Moción N° 1.
Valentín Gamarra Velázquez:
Ausente.
Luis A. Duarte Molinas:
Moción N° 1.
Víctor Hugo Insaurralde:
Moción N° 1.
Gregorio R. Centurión:
Moción N° 1.
Teresa Delvalle de Rodríguez: Moción
N° 1.
Juan Félix Bogado Gondra:
Moción N° 2.
Jesús María Argaña:
Moción N° 1.
Rubén O. Fanego Mussi:
Moción N° 1.
Gustavo Mazó:
Moción N° 2.
Edgar Villalba:
Moción N° 2.
Cirila C. Vda de Alcaraz:
Moción N° 1.
Albino R. Chaparro:
Moción N° 1.
Juan Héctor Mongelós:
Moción N° 2.
Fernando Rolón Galeano:
Moción N° 1.
Pedro Talavera Martínez:
Propuesta N° 1.
Miguel Angel Rodas:
Propuesta N° 1.
(Se
lleva a cabo el conteo de la votación)
CIUDADANO PRESIDENTE: Se ruega silencio en la sala para escuchar el
resultado de la votación. Por Secretaría
se va a dar la cifra.
CIUDADANO SECRETARIO: El Proyecto Base
obtuvo ciento doce votos.
APLAUSOS...
La
Propuesta N° 2 obtuvo setenta y
cuatro votos.
APLAUSOS...
Ausentes: 11 ausentes.
CIUDADANO PRESIDENTE: En consecuencia queda aprobada por Mayoría
el Proyecto Base N°
1.
APROBADO.
Habiendo
transcurrido el tiempo reglamentario, la Presidencia levanta la sesión y
recomienda mañana puntual asistencia, a la hora 8:00. Gracias.
SE LEVANTA LA SESION.
RESOLUCIONES
ADOPTADAS
-Aprobación
del Acta N° 28 de fecha 18 de
mayo de 1992.
-Se
acepta el pedido de permiso del ciudadano Convencional Emilio Cubas Grau, en su
reemplazo ingresa como Convencional el ciudadano Miguel Angel Rodas.
-Se
acepta el pedido de permiso del ciudadano Convencional Efraín Enríquez Gamón,
en su reemplazo ingresa como Convencional la ciudadana Cirila Cabral de
Alcaraz.
CAPITULO
II
DE
LAS RELACIONES INTERNACIONALES
Artículo 135.- DE LOS TRATADOS INTERNACIONALES.
Los
tratados internacionales válidamente celebrados, aprobados por ley del
Congreso, cuyos instrumentos de ratificación fueran canjeados o depositados,
forman parte del ordenamiento legal interno con la jerarquía que determina el
artículo 131.
Artículo 136.- DE LA DENUNCIA DE TRATADOS.
Los
tratados internacinales relativos a los derechos humanos no podrán ser
denunciados sino por los procedimientos que rigen para la enmienda de esta
Constitución.
Artículo 137.- DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES.
La
República del Paraguay, en sus relaciones internacionales acepta el derecho
internacional y se ajusta a los siguientes principios:
1)la
independencia nacional;
2)la
autodeterminación de los pueblos;
3)la
igualdad jurídica entre los Estados;
4)la
solidaridad y la cooperación internacional;
5)la
protección internacional de los derechos humanos;
6)la
libre navegación de los ríos internacionales;
7)la
no intervención, y
8)la
condena a toda forma de dictadura, internacionales e imperialismo.
Artículo 138.- DE LA RENUNCIA A LA GUERRA.
La
República del Paraguay renuncia a la guerra, pero justifica la legítima defensa
nacional.Esta declaración es compatible con los derechos y obligaciones del
Paraguay en su carácter de miembro de la Organización de las Naciones Unidas y
de la Organización de Estados Americanos o como parte en tratados de
integración.
Artículo 139.- ORDEN JURIDICO
SUPRANACIONAL.
La
República del Paraguay, en condiciones de igualdad con otros Estados, admite un
orden jurídico supranacional que garantice la vigencia de los derechos humanos,
de la paz, de la justicia, de la cooperación y del desarrollo, en lo político,
económico, social y cultural.
Estas
decisiones sólo podrán ser adoptadas por la mayoría absoluta de cada Cámara del
Congreso.
CAPITULO
III
DE
LA NACIONALIDAD Y LA CIUDADANIA
Artículo 140.- DE LA NACIONALIDAD Y LA CIUDADANIA.
Son
de nacionalidad paraguaya natural:
1)las
personas nacidas en el territorio de la República;
2)los
hijos de madre o padre paraguayo que, hallándose uno o ambos al servicio de la
República, nazcan en el extranjero;
3)los
hijos de madre o padre paraguayo nacidos en el extranjero, cuando aquellos se
radiquen en la República en forma permanente, y
4)los
infantes recogidos en el territorio de la República, de padres ignorados.
La
formalización del derecho consagrado en el inciso 3) se hará por simple
declaración del interesado cuando éste sea mayor de dieciocho años. Si no los hubiese cumplido aún, la
declaración de su representante legal tendrá validez hasta dicha edad, quedando
sujeta a ratificación por el interesado.
Artículo 141.- DE LA PROHIBICION DE PRIVAR LA NACIONALIDAD NATURAL.
Ningún
paraguayo natural será privado de su nacionalidad, pero podrá renunciar
voluntariamente a ella.
Artículo 142.- DE LA NACIONALIDAD POR NATURALIZACION.
Los
extranjeros podrán obtener la nacionalidad paraguaya por naturalización, si
reúnen los siguientes requisitos:
1)mayoría
de edad;
2)radicación
mínima de tres años en el territorio nacional;
3)ejercicio
regular en el país de alguna profesión, oficio, ciencia, arte o industria, y
4)buena
conducta, establecida en la ley.
Artículo 143.- DE LA NACIONALIDAD MULTIPLE.
La
nacionalidad múltiple podrá ser admitida mediante tratado internacional o por
reciprocidad de rango constitucional entre los Estados del natural de origen y
del de adopción.
Artículo 144.- DE LA PERDIDA DE LA NACIONALIDAD.
Los
paraguayos naturalizados pierden la nacionalidad por ausencia injustificada de
la República por más de tres años, declarada judicialmente, o por la
adquisición voluntaria de otra nacionalidad.
Artículo 145.- DE LA NACIONALIDAD HONORARIA.
Los
extranjeros que hubiesen prestado servicios eminentes a la República podrán ser
honrados, por ley del Congreso, con la nacionalidad honoraria.
Artículo 146.- DE LA CIUDADANIA.
Son
ciudadanos:
1)las
personas de nacionalidad paraguaya nacional, desde los dieciocho años de edad,
y
2)las
personas de nacionalidad paraguaya por naturalización, después de dos años de
haberla obtenido.
Artículo 147.- DE LA SUSPENSION DEL EJERCICIO DE LA CIUDADANIA.
Se
suspende el ejercicio de la ciudadanía:
1)por
adopción de otra nacionalidad, salvo reciprocidad internacional;
2)por
incapacidad declarada en juicio que impida obrar libremente y con
discernimiento, y
3)por
hallarse cumpliendo condena judicial, con pena privativa de libertad.
La
suspensión de la ciudadanía concluye al cesar legalmente la causa que la
determina.
Artículo 148.- DE LA COMPETENCIA EXCLUSIVA DEL PODER JUDICIAL.
La
ley establecerá las normas sobre adquisición y opción de la nacionalidad así
como sobre la suspensión de la ciudadanía.
El
Poder Judicial tendrá competencia exclusiva para entender en estos casos.
-Reconsideración
del Artículo 119.- DE LOS ELECTORES.
Artículo 119.- DE LOS ELECTORES.
Son
electores los ciudadanos paraguayos radicados en el territorio nacional, sin
distinción, que hayan cumplido dieciocho años.
Los
ciudadanos son electores y elegibles sin más restricciones que las establecidas
en esta Constitución y en la ley.
Los
extranjeros con radicación definitiva tendrán los mismos derechos en las
elecciones municipales.